El presupuesto del Estado para 2017 ha sido el más bajo desde la llegada del euro, mientras que la Junta incluye obras que llevan años de retraso
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| Gráfico elaborado por Asempal con las inversiones del Estado desde la llegada del euro. |
ALMERÍA HOY / 21·12·2017
Faltan menos de diez días para que finalice un 2017 que nos ha dejado diversos titulares situando la provincia de Almería a la cola en inversiones y en servicios básicos como son sanidad, educación, justicia e infraestructuras. En el caso de la sanidad, así lo confirman desde sindicatos, partidos políticos y trabajadores de ambulatorios y hospitales; en el de la educación, colectivos tan dispares como la marea verde y el PP; en justicia, el que hasta hace pocas semanas era juez decano de Almería —así como la presidenta de la Audiencia Provincial—, y en inversiones, los Presupuestos Generales del Estado y las obras 'añejas' de la Junta de Andalucía.
Sanidad
En el mes de marzo, se convocaba una nueva manifestación en el centro de Almería para denunciar que Almería sigue «a la cola de España» en camas hospitalarias, así como en número de médicos y enfermeros. Sin ir más lejos, esta misma semana ALMERÍA HOY se ha hecho eco de la falta de especialistas como anestesistas, pediatras u oncólogos, entre otros. Incluso siendo la provincia española con mayor tasa de natalidad, hay un notable déficit de matronas.
Y todo, sin olvidar el hospital que Roquetas de Mar espera desde hace 12 años, o el Materno Infantil que la Junta de Andalucía prometió abrir para 2011 en la capital, pero que todavía se está construyendo —sin fecha oficial de entrada en servicio y sin información sobre las futuras plantillas—. En cualquier caso, dicho hospital vendrá a paliar la saturación que padecen los servicios de urgencias tanto de Torrecárdenas como del Hospital de Poniente.
Educación
La otra 'pata' de la que presumen nuestros políticos cuando defienden el «Estado del Bienestar» es la educación. La provincia de Almería ha vuelto a ser durante 2017 la provincia andaluza con más aulas prefabricadas. Y no es el único problema que afronta el sistema público de educación dependiente de la Junta: ratios de alumnos por encima de la media establecida, los problemas administrativos con los comedores escolares, los 1.500 alumnos que se han quedado sin poder cursar FP, o colegios que llevan décadas sin ser objeto de mejora alguna, sin dejar de lado el Conservatorio de Música.
Justicia
Los juzgados almerienses son los más saturados de Andalucía y de los más desbordados de toda España. Así lo confesaba el que ha sido juez decano de Almería, Luis Miguel Columna, en una entrevista concedida a este medio la pasada primavera. Según explicaba entonces el magistrado, los jueces de lo penal atienden en la provincia el doble de casos —entre 600 y 700 al año— de la media establecida —350 anuales—.
Ello, sin olvidar las 'quejas' provenientes de la Audiencia Provincial de Almería. Su presidenta, Lourdes Molina, ha llegado a comparar las deficiencias de los juzgados almerienses con las que existían hace 125 años.
Infraestructuras e inversión pública
Demasiadas veces se ha descrito a Almería como «la cenicienta de Europa» en cuestión de infraestructuras, especialmente en lo relativo a la situación «tercermundista» del ferrocarril. Así, mientras la Mesa del Tren ha cobrado más protagonismo durante 2017, hasta miembros del PP —incluyendo al alcalde de la capital— se han sumado a manifestaciones en las que se reclamaban mejoras al Gobierno de Rajoy.
Luego, hay otras infraestructuras pendientes desde hace décadas, como la 'autovía del mármol' o la variante de Mojácar, sin olvidar que la de Roquetas se ha finalizado este año —con 11 de retraso—, o que las dos grandes autovías de la provincia, la A-92 y la A-7, también llegaron con más de una década de retraso.
Ante este panorama, cuando se hicieron públicas las cuentas de los PGE 2017, los empresarios almerienses se llevaron las manos a la cabeza. Desde Asempal se calificaron los presupuestos como «los más decepcionantes» para Almería desde la llegada del euro por el «desplome» de inversión pública.
En cuanto a los números de la administración autonómica, mientras desde la Junta presumen por ser la administración que más obra licita en tierra almeriense —nada complicado viendo lo que invierten los demás—, lo cierto es que no pocas inversiones previstas en su presupuesto deberían haberse finalizado hace años, a saber: la autovía del Almanzora, la Casa del Mar, la Plaza Vieja...
Sanidad
En el mes de marzo, se convocaba una nueva manifestación en el centro de Almería para denunciar que Almería sigue «a la cola de España» en camas hospitalarias, así como en número de médicos y enfermeros. Sin ir más lejos, esta misma semana ALMERÍA HOY se ha hecho eco de la falta de especialistas como anestesistas, pediatras u oncólogos, entre otros. Incluso siendo la provincia española con mayor tasa de natalidad, hay un notable déficit de matronas.
Y todo, sin olvidar el hospital que Roquetas de Mar espera desde hace 12 años, o el Materno Infantil que la Junta de Andalucía prometió abrir para 2011 en la capital, pero que todavía se está construyendo —sin fecha oficial de entrada en servicio y sin información sobre las futuras plantillas—. En cualquier caso, dicho hospital vendrá a paliar la saturación que padecen los servicios de urgencias tanto de Torrecárdenas como del Hospital de Poniente.
Educación
La otra 'pata' de la que presumen nuestros políticos cuando defienden el «Estado del Bienestar» es la educación. La provincia de Almería ha vuelto a ser durante 2017 la provincia andaluza con más aulas prefabricadas. Y no es el único problema que afronta el sistema público de educación dependiente de la Junta: ratios de alumnos por encima de la media establecida, los problemas administrativos con los comedores escolares, los 1.500 alumnos que se han quedado sin poder cursar FP, o colegios que llevan décadas sin ser objeto de mejora alguna, sin dejar de lado el Conservatorio de Música.
Justicia
Los juzgados almerienses son los más saturados de Andalucía y de los más desbordados de toda España. Así lo confesaba el que ha sido juez decano de Almería, Luis Miguel Columna, en una entrevista concedida a este medio la pasada primavera. Según explicaba entonces el magistrado, los jueces de lo penal atienden en la provincia el doble de casos —entre 600 y 700 al año— de la media establecida —350 anuales—.
Ello, sin olvidar las 'quejas' provenientes de la Audiencia Provincial de Almería. Su presidenta, Lourdes Molina, ha llegado a comparar las deficiencias de los juzgados almerienses con las que existían hace 125 años.
Infraestructuras e inversión pública
Demasiadas veces se ha descrito a Almería como «la cenicienta de Europa» en cuestión de infraestructuras, especialmente en lo relativo a la situación «tercermundista» del ferrocarril. Así, mientras la Mesa del Tren ha cobrado más protagonismo durante 2017, hasta miembros del PP —incluyendo al alcalde de la capital— se han sumado a manifestaciones en las que se reclamaban mejoras al Gobierno de Rajoy.
Luego, hay otras infraestructuras pendientes desde hace décadas, como la 'autovía del mármol' o la variante de Mojácar, sin olvidar que la de Roquetas se ha finalizado este año —con 11 de retraso—, o que las dos grandes autovías de la provincia, la A-92 y la A-7, también llegaron con más de una década de retraso.
Ante este panorama, cuando se hicieron públicas las cuentas de los PGE 2017, los empresarios almerienses se llevaron las manos a la cabeza. Desde Asempal se calificaron los presupuestos como «los más decepcionantes» para Almería desde la llegada del euro por el «desplome» de inversión pública.
En cuanto a los números de la administración autonómica, mientras desde la Junta presumen por ser la administración que más obra licita en tierra almeriense —nada complicado viendo lo que invierten los demás—, lo cierto es que no pocas inversiones previstas en su presupuesto deberían haberse finalizado hace años, a saber: la autovía del Almanzora, la Casa del Mar, la Plaza Vieja...
