Desde la Plaza Vieja al soterramiento pasando por el parque de La Hoya, el Cable Inglés o la vieja estación de ferrocarril
Pancarta reivindicativa por el Parque de la Hoya (archivo). |
ALMERÍA HOY / 21·09·2017
Quizá sea por el 'síndrome de esquina', puede que se deba al endeble espíritu reivindicativo almeriense, o tal vez a una clase política con tendencia a la mentira fácil, pero lo cierto es que la provincia de Almería acumula numerosas obras y proyectos prometidos —algunos hace décadas, otros a las puertas de unas elecciones— que hacen aún más profunda la incredulidad y la falta de confianza de la sociedad almeriense en sus representantes públicos.
ALMERÍA HOY ha recopilado algunas de esas obras: no rumores en plan cuando Almería peleó con París por acoger el Eurodisney, o con Madrid para ser sede del Eurovegas, sino obras 'vendidas' en prensa, en mítines, hasta en boletines oficiales y en presupuestos públicos. Si bien es cierto que algunas de estas actuaciones están previstas que se acometan en un corto espacio de tiempo, no lo es menos el hecho de que otras siguen sin fecha, ni plazos ni financiación algunas.
1. PLAZA VIEJA
Paradigma de lo tremendamente inútil que una administración —en este caso, la Junta— puede llegar a ser. Fue en 1999 cuando el alcalde socialista Martínez Cabrejas firmó el primer convenio de colaboración con el Gobierno andaluz para acometer esta actuación de cara a los Juegos del Mediterráneo 2005. Sin embargo, las obras no comenzaron hasta el año 2004; lo hicieron de forma oficial, ya que, durante meses, no hubo operarios trabajando en la Plaza Vieja —algo similar a lo que ocurre con el Materno-Infantil—. Después, problemas y excusas de todo tipo hasta llegar 2017... y todavía sigue el viejo edificio del Ayuntamiento de Almería cerrado y esperando a que se terminen de una vez las obras iniciadas trece años atrás.
2. PARQUE DE LA HOYA
El parque de Jayrán o de la Hoya, entre la Alcazaba y el cerro de San Cristóbal, tuvo como gran promotor al entonces responsable de Urbanismo, Juan Megino. En principio, este proyecto pretendía ser uno de los más ambiciosos en la historia reciente para que buena parte del casco histórico almeriense dejara de dar esa perenne sensación de abandono y dejadez. Zonas verdes, un centro de interpretación, incluso modernos ascensores que subían a La Alcazaba... Pero, hace pocos meses, el edil de Urbanismo confesaba que dicho proyecto es «irrealizable» —rondaba los 15 millones de euros—, y que en vez de eso tratarían de embellecer la zona sin tirar la casa por la ventana.
3. AVE-SOTERRAMIENTO
Aunque si hay un clásico en esto de las promesas incumplidas, sin duda es el soterramiento y, de rebote, la llegada de la alta velocidad a la capital. Claro que esto último, al menos, ya tiene una hoja de ruta —se supone que las obras del Corredor Mediterráneo estarán para 2023—, pero han sido tantos los plazos y el dinero presupuestado y luego 'esfumado', que cualquiera termina de creérselo del todo. Además, todavía no es seguro que vaya a ejecutarse la conexión ferroviaria con el puerto, y de ser así, si esta se realizará en superficie o soterrada, aunque lo del soterramiento, tal y como nos lo vendieron todos y cada uno de los partidos políticos —un proyecto de unos 400 millones de euros—, ya se sabe, «ni aquí ni en Vladivostok».
4. CABLE INGLÉS
Otro ejemplo paradigmático, por supuesto, es el Cable Inglés que estas semanas ha vuelto a la palestra mediática porque la Junta de Andalucía dice ahora que no es responsable de este monumento, a pesar de estar declarado Bien de Interés Cultural por la Junta, de que la Junta le quitó el óxido no hace mucho, donde consejeros de la Junta se han hecho fotorreportajes, donde la Junta llegó a anunciar una rehabilitación integral valorada en 18 millones de euros, y donde la Junta ha prometido ubicar desde el Centro Andaluz de la Fotografía (CAF) hasta convertirlo en un punto turístico alternativo, con zonas de ocio y mirador. Hoy por hoy, el Cable Inglés, además de volver a ser un colosal transmisor de tétanos, no es nada de eso. Y no hay visos de que, a corto o medio plazo, la situación vaya a cambiar.
5. ESTACIÓN DE FERROCARRIL
Una de las estaciones de tren más hermosas y singulares de toda España es la de la capital almeriense, que tiene el mismo sello arquitectónico de la Torre Eiffel, pero que lleva años cerrada al público y convertida en cálido hogar para palomas, insectos y roedores de todo tipo. Así ha sido estos últimos tiempos, hasta que el pasado mes de junio, Adif anunciaba 250.000 euros para la primera fase de rehabilitación de esta estación —centrada en la fachada y el vestíbulo—, pero las malas lenguas dicen que no estará a punto hasta la entrada del primer AVE en suelo almeriense.
6. PUERTO-CIUDAD
No hay actuación prevista en Almería más ilusionante y ambiciosa, hoy por hoy, que el denominado proyecto Puerto-Ciudad, del que se lleva hablando desde tiempos de Nono Amate en la APA, pero no ha sido hasta esta legislatura cuando ha cobrado un protagonismo real. Consiste básicamente en la integración del Puerto con el casco urbano en una zona que abarca desde el Cable Francés —incluyendo el Cable Inglés— hasta el Muelle de Levante. Desde 2.010, cuando tuvo lugar la celebración de la primera reunión de la Comisión Técnica de la Integración Puerto-Ciudad, todo han sido buenas palabras y amables gestos por parte de los implicados, a saber; el Ayuntamiento de Almería, la Autoridad Portuaria y la Fundación Bahía Almeriport. Y poco más. Actualmente, aún se desconocen las actuaciones concretas que se llevarían a cabo, y no se sabe cuánto costarían ni cuándo podrían empezar a realizarse.
7.CERCANÍAS EN EL PONIENTE
Lo del tren de cercanías que una la comarca del Poniente almeriense con la capital (también se habló de una línea Almería-Motril) es otro de esos globos sonda que ha generado el mis juego entre la clase política que incredulidad entre la ciudadanía. Allá por 2006, el Ministerio de Fomento aseguraba que estudiaba conectar por tren la costa tropical granadina con la almeriense. Más adelante, desde la Junta de Andalucía se ha incluido esta posibilidad en su plan estratégico. Pero, hoy por hoy, ir en tren desde Adra o El Ejido hasta la capital se antoja, cuando menos, harto improbable.
8. AUTOVÍA DEL ALMANZORA
Cerramos este repaso por lo que pudo ser y aún no ha sido con la autovía del Almanzora, prometida en los años 80 por el Gobierno andaluz, pero que todavía hoy espera ser finalizada. En una provincia donde otras autovías han padecido décadas de retrasos, como la A-92 o la A-7, lo del valle del Almanzora se lleva la palma, ya que va para más de 30 años desde que se vendiera a la ciudadanía como proyecto «indispensable» para el desarrollo de esta comarca. Lo último que se sabe sobre ella es que podría estar acabada, según el delegado de Fomento, para 2019. Hagan sus apuestas.
ALMERÍA HOY ha recopilado algunas de esas obras: no rumores en plan cuando Almería peleó con París por acoger el Eurodisney, o con Madrid para ser sede del Eurovegas, sino obras 'vendidas' en prensa, en mítines, hasta en boletines oficiales y en presupuestos públicos. Si bien es cierto que algunas de estas actuaciones están previstas que se acometan en un corto espacio de tiempo, no lo es menos el hecho de que otras siguen sin fecha, ni plazos ni financiación algunas.
1. PLAZA VIEJA
Paradigma de lo tremendamente inútil que una administración —en este caso, la Junta— puede llegar a ser. Fue en 1999 cuando el alcalde socialista Martínez Cabrejas firmó el primer convenio de colaboración con el Gobierno andaluz para acometer esta actuación de cara a los Juegos del Mediterráneo 2005. Sin embargo, las obras no comenzaron hasta el año 2004; lo hicieron de forma oficial, ya que, durante meses, no hubo operarios trabajando en la Plaza Vieja —algo similar a lo que ocurre con el Materno-Infantil—. Después, problemas y excusas de todo tipo hasta llegar 2017... y todavía sigue el viejo edificio del Ayuntamiento de Almería cerrado y esperando a que se terminen de una vez las obras iniciadas trece años atrás.
2. PARQUE DE LA HOYA
El parque de Jayrán o de la Hoya, entre la Alcazaba y el cerro de San Cristóbal, tuvo como gran promotor al entonces responsable de Urbanismo, Juan Megino. En principio, este proyecto pretendía ser uno de los más ambiciosos en la historia reciente para que buena parte del casco histórico almeriense dejara de dar esa perenne sensación de abandono y dejadez. Zonas verdes, un centro de interpretación, incluso modernos ascensores que subían a La Alcazaba... Pero, hace pocos meses, el edil de Urbanismo confesaba que dicho proyecto es «irrealizable» —rondaba los 15 millones de euros—, y que en vez de eso tratarían de embellecer la zona sin tirar la casa por la ventana.
3. AVE-SOTERRAMIENTO
Aunque si hay un clásico en esto de las promesas incumplidas, sin duda es el soterramiento y, de rebote, la llegada de la alta velocidad a la capital. Claro que esto último, al menos, ya tiene una hoja de ruta —se supone que las obras del Corredor Mediterráneo estarán para 2023—, pero han sido tantos los plazos y el dinero presupuestado y luego 'esfumado', que cualquiera termina de creérselo del todo. Además, todavía no es seguro que vaya a ejecutarse la conexión ferroviaria con el puerto, y de ser así, si esta se realizará en superficie o soterrada, aunque lo del soterramiento, tal y como nos lo vendieron todos y cada uno de los partidos políticos —un proyecto de unos 400 millones de euros—, ya se sabe, «ni aquí ni en Vladivostok».
4. CABLE INGLÉS
Otro ejemplo paradigmático, por supuesto, es el Cable Inglés que estas semanas ha vuelto a la palestra mediática porque la Junta de Andalucía dice ahora que no es responsable de este monumento, a pesar de estar declarado Bien de Interés Cultural por la Junta, de que la Junta le quitó el óxido no hace mucho, donde consejeros de la Junta se han hecho fotorreportajes, donde la Junta llegó a anunciar una rehabilitación integral valorada en 18 millones de euros, y donde la Junta ha prometido ubicar desde el Centro Andaluz de la Fotografía (CAF) hasta convertirlo en un punto turístico alternativo, con zonas de ocio y mirador. Hoy por hoy, el Cable Inglés, además de volver a ser un colosal transmisor de tétanos, no es nada de eso. Y no hay visos de que, a corto o medio plazo, la situación vaya a cambiar.
5. ESTACIÓN DE FERROCARRIL
Una de las estaciones de tren más hermosas y singulares de toda España es la de la capital almeriense, que tiene el mismo sello arquitectónico de la Torre Eiffel, pero que lleva años cerrada al público y convertida en cálido hogar para palomas, insectos y roedores de todo tipo. Así ha sido estos últimos tiempos, hasta que el pasado mes de junio, Adif anunciaba 250.000 euros para la primera fase de rehabilitación de esta estación —centrada en la fachada y el vestíbulo—, pero las malas lenguas dicen que no estará a punto hasta la entrada del primer AVE en suelo almeriense.
6. PUERTO-CIUDAD
No hay actuación prevista en Almería más ilusionante y ambiciosa, hoy por hoy, que el denominado proyecto Puerto-Ciudad, del que se lleva hablando desde tiempos de Nono Amate en la APA, pero no ha sido hasta esta legislatura cuando ha cobrado un protagonismo real. Consiste básicamente en la integración del Puerto con el casco urbano en una zona que abarca desde el Cable Francés —incluyendo el Cable Inglés— hasta el Muelle de Levante. Desde 2.010, cuando tuvo lugar la celebración de la primera reunión de la Comisión Técnica de la Integración Puerto-Ciudad, todo han sido buenas palabras y amables gestos por parte de los implicados, a saber; el Ayuntamiento de Almería, la Autoridad Portuaria y la Fundación Bahía Almeriport. Y poco más. Actualmente, aún se desconocen las actuaciones concretas que se llevarían a cabo, y no se sabe cuánto costarían ni cuándo podrían empezar a realizarse.
7.CERCANÍAS EN EL PONIENTE
Lo del tren de cercanías que una la comarca del Poniente almeriense con la capital (también se habló de una línea Almería-Motril) es otro de esos globos sonda que ha generado el mis juego entre la clase política que incredulidad entre la ciudadanía. Allá por 2006, el Ministerio de Fomento aseguraba que estudiaba conectar por tren la costa tropical granadina con la almeriense. Más adelante, desde la Junta de Andalucía se ha incluido esta posibilidad en su plan estratégico. Pero, hoy por hoy, ir en tren desde Adra o El Ejido hasta la capital se antoja, cuando menos, harto improbable.
8. AUTOVÍA DEL ALMANZORA
Cerramos este repaso por lo que pudo ser y aún no ha sido con la autovía del Almanzora, prometida en los años 80 por el Gobierno andaluz, pero que todavía hoy espera ser finalizada. En una provincia donde otras autovías han padecido décadas de retrasos, como la A-92 o la A-7, lo del valle del Almanzora se lleva la palma, ya que va para más de 30 años desde que se vendiera a la ciudadanía como proyecto «indispensable» para el desarrollo de esta comarca. Lo último que se sabe sobre ella es que podría estar acabada, según el delegado de Fomento, para 2019. Hagan sus apuestas.