«Se esconden y no son claros»

El hijo de una mujer enferma de cáncer confirma a ALMERÍA HOY que las quejas por la «tardanza» de Torrecárdenas «están más que fundadas»


Detalle de la reclamación presentada ante el servicio de oncología de Torrecárdenas.

ALMERÍA HOY / 22·12·2017

Sabido es que en Almería faltan oncólogos. También se sabe que la sesiones de radioterapia en Torrecárdenas pueden llegar a ser todo una odisea para los enfermos de cáncer, y no sólo por las dificultades implícitas de dicho tratamiento. Así las cosas, las quejas —formales e informales— proliferan al tiempo que estos pacientes almerienses se topan con la sanidad pública andaluza.

Fabio Quintero es hijo de una mujer sexagenaria que en noviembre fue diagnosticada mediante laparoscopia exploradora de un carcinoma de ovario y de una carcinomatosis peritoneal, además de un derrame pleural. Semanas antes venía sintiéndose fatigada y acudió a su médico de cabecera en distintas ocasiones, pero, denuncia su hijo, «le decían que ya se le pasaría». El 24 de octubre, tras volver al ambulatorio en peor estado, la derivaron a Urgencias de Torrecárdenas, quedando ingresada una semana en el hospital almeriense.

Pero su principal queja está referida al servicio de oncología y en la «tardanza» en atender a los enfermos de cáncer. De hecho, desde que fue intervenida el 11 de noviembre, no ha sido hasta este viernes, 22 de diciembre, cuando han recibido la cita con el oncólogo para el 11 de enero. Hasta entonces, su madre «está en casa con dolores, tomando unas pastillas que podríamos tomar cualquiera», con problemas de movilidad, sin tratamiento —y sin saber cuándo comenzará a recibirlo— y con la «angustia» de no haber sido atendidos por un especialista, máxime sabiendo que, hablando de cáncer, el tiempo de respuesta es oro.

Fabio afirma haber reclamado a Torrecárdenas «por teléfono y en persona, pero dan largas, se hacen los locos, se esconden y no son claros». Así las cosas, el pasado 13 de diciembre presentó una queja por escrito. «Que esto ocurra a menudo no tiene que significar que lo veamos como algo normal», sentencia.