José María Martínez de Haro ya es hijo predilecto de Garrucha

El que fuera jefe de Prensa de Adolfo Suárez ha recibido este viernes el nombramiento aprobado unánimemente por la Corporación local



ALMERÍA HOY / 06·12·2024

El Salón de Plenos quedó pequeño para albergar a tanto garruchero como quiso compartir un día feliz con el periodista y doctor en Derecho José María Martínez de Haro, que ha recibido este viernes el nombramiento de hijo predilecto de Garrucha aprobado unánimemente por el Pleno un día antes. Tampoco faltaron alcaldes de localidades vecinas, como Vera, Turre, Huércal Overa, Carboneras o Pulpí, ni otras autoridades, como la diputada Maribel Sánchez, el senador Jesús Caicedo, el delegado de Salud Juan de la Cruz Belmonte, el comandante de la Guardia Civil de Garrucha o el párroco de la Villa.

El reconocimiento le ha sido entregado durante un emotivo acto que comenzó el concejal de Cultura, Luis José Fernández, con la exposición de los motivos recogidos en la moción presentada por Garrucha con la Gente, que contó con el respaldo unánime de los cinco grupos municipales, y el secretario del Ayuntamiento, Juan Luis Pérez Tornell, leyó el acta de la sesión que aprobó el reconocimiento.

A continuación, Miguel Ángel Sánchez, director del grupo ACTUALIDAD y gran amigo del homenajeado, aportó una sentida semblanza del hijo predilecto de Garrucha, cuajada de anécdotas. Esbozó un retrato cercano del niño que a los quince años tuvo que ponerse al frente del negocio familiar tras la temprana muerte de su padre. Habló del José María testigo excepcional de la transición desde el Gabinete de Prensa de Adolfo Suárez, y presentó al hombre que siempre hizo profesión de garruchero, ayudando en lo que pudo a vecinos de todo el Levante almeriense y facilitando alguna de las intensas gestiones que realizó el recordado exalcalde Adolfo Pérez para que el Malecón, emblema de la villa marinera, se hiciera realidad.

José María Martínez de Haro agradeció a la Corporación el reconocimiento y que lo hicieran coincidir con el Día de la Constitución, un punto de inflexión para el país que vivió en primera línea. Contó numerosas anécdotas de las interminables reuniones celebradas en un piso de 80m2 entre personajes de la talla de Santiago Carrillo, Durán y Lleida, Alfonso Guerra, Abril Martorell, Fraga Iribarne y el propio Adolfo Suárez, entre una niebla provocada por el humo del tabaco que “parecía el escenario de un bombardeo”, y cómo las notas y propuestas que los diferentes partidos llevaban a cada encuentro eran “quemadas en un recipiente metálico” de modo que hacían imposible obtener pista alguna. Aunque José María se valía de la complicidad de conserjes y personal subalterno para saber antes que nadie que, por ejemplo, el Partido Comunista de España iba a ser legalizado.

Pero, por encima de todo, destacó su condición de garruchero. Habló de los amigos que mantuvieron vivo ese cordón umbilical que le ha traído a su pueblo todos los veranos y siempre por el día de la Virgen del Carmen, la patrona de Garrucha. Y del mar, ese fluido salado tan parecido a las lágrimas.