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PASEO ABAJO/Juan Torrijos
Garrucha está de máxima actualidad, cuando no es en plan escatológico con excrementos en los sillones de los despachos de los concejales, ¡ay, esas madres de ediles!, lo es por las sentencias que recibe la exalcaldesa, María Antonia López, a la que políticamente se le puede llamar, en un ejercicio de libertad de expresión: garrapata, corrupta y otras lindezas. Y a la que se le condena al pago de las costas. Pero si hasta ahora estamos escribiendo de las pequeñas ocurrencias que se producen en el pueblo, y es de suponer que, con el deseo de no aburrir al personal durante los largos meses de parón turístico, lo del terrorismo denunciado por el Psoe, al que se enfrenta el puerto, es algo más grave a tener en cuenta.
El grupo socialista en el Parlamento Andaluz mete el miedo a los garrucheros, denunciando que existe un peligro terrorista en el puerto de la localidad. El argumento: que no hay policía portuaria, que a la nacional no se la ve ni se la espera, y que la Guardia Civil está desaparecida del puerto. Sin entrar en la polémica de la falta de seguridad en los muelles y dársenas garrucheros, de la que es responsable en primer lugar el ministro Marlaska, no me parece serio que se asuste a los vecinos con la historia del terrorismo sin aportar argumento alguno de peso en el que basarse. Si lo que se desea, y en eso el acuerdo va a ser unánime, más policía vigilando el puerto, usar el tema de terrorismo como gancho político no lleva tranquilidad a los vecinos. Si tienen que llegar a usarlo debe ser porque el ministro de interior, un tal Marlaska, no les ha hecho ni puñetero caso en sus anteriores denuncias, si es que las ha habido, y eso es más grave.
Si los socialistas de Garrucha habían notado aumento de movimientos en el puerto que pueda llevar a pensar y creer que se vienen produciendo movimientos de terroristas en el mismo, no creo que la mejor solución sea la de crear incertidumbre en los trabajadores y vecinos, y más cuando es el gobierno de su partido, con Pedro Sánchez de presidente, el responsable de la seguridad del país. No llego a entender lo que está buscando el Psoe con la historia del puerto y su inseguridad.
Debería ser consciente el grupo socialista de que la falta de guardias civiles en el puerto de Garrucha y en el resto de pueblos de Almería es culpa solo y exclusivamente del gobierno de su propio partido. Si Pedro Sánchez le diera la orden a Marlasca de que aumentara el número de agentes de la Benemérita en puertos y pueblos, en vez de atacarla en zonas del norte, no tendríamos que estar quejándonos de falta de seguridad en el puerto de Garrucha. Si Pedro Sánchez diera la orden de menos políticos y asesores, aseguran que más de mil en Moncloa, y más policía en puertos y ciudades, el de Garrucha, como el resto de puertos de España, sería más seguro, pero no es esa la política de los partidos que han venido mandando en el país en los últimos años.
El grupo socialista en el Parlamento Andaluz mete el miedo a los garrucheros, denunciando que existe un peligro terrorista en el puerto de la localidad. El argumento: que no hay policía portuaria, que a la nacional no se la ve ni se la espera, y que la Guardia Civil está desaparecida del puerto. Sin entrar en la polémica de la falta de seguridad en los muelles y dársenas garrucheros, de la que es responsable en primer lugar el ministro Marlaska, no me parece serio que se asuste a los vecinos con la historia del terrorismo sin aportar argumento alguno de peso en el que basarse. Si lo que se desea, y en eso el acuerdo va a ser unánime, más policía vigilando el puerto, usar el tema de terrorismo como gancho político no lleva tranquilidad a los vecinos. Si tienen que llegar a usarlo debe ser porque el ministro de interior, un tal Marlaska, no les ha hecho ni puñetero caso en sus anteriores denuncias, si es que las ha habido, y eso es más grave.
Si los socialistas de Garrucha habían notado aumento de movimientos en el puerto que pueda llevar a pensar y creer que se vienen produciendo movimientos de terroristas en el mismo, no creo que la mejor solución sea la de crear incertidumbre en los trabajadores y vecinos, y más cuando es el gobierno de su partido, con Pedro Sánchez de presidente, el responsable de la seguridad del país. No llego a entender lo que está buscando el Psoe con la historia del puerto y su inseguridad.
Debería ser consciente el grupo socialista de que la falta de guardias civiles en el puerto de Garrucha y en el resto de pueblos de Almería es culpa solo y exclusivamente del gobierno de su propio partido. Si Pedro Sánchez le diera la orden a Marlasca de que aumentara el número de agentes de la Benemérita en puertos y pueblos, en vez de atacarla en zonas del norte, no tendríamos que estar quejándonos de falta de seguridad en el puerto de Garrucha. Si Pedro Sánchez diera la orden de menos políticos y asesores, aseguran que más de mil en Moncloa, y más policía en puertos y ciudades, el de Garrucha, como el resto de puertos de España, sería más seguro, pero no es esa la política de los partidos que han venido mandando en el país en los últimos años.
