El Gobierno las instauró en enero y las familias vulnerables aún las esperan
ALMERÍA HOY / 25·06·2024
A partir del 2024 ha dejado de funcionar la ayuda que el Fondo Europeo de Ayuda Alimentaria entregaba a los bancos de alimentos y a la Cruz Roja. Fue el Gobierno el que en enero aprobó la sustitución de esas ayudas de comida por el sistema de las Tarjetas Monedero que, a partir de ahora, se entregarán directamente a familias en situación de vulnerabilidad.
Hasta ahora, los alimentos -que no dinero-, eran entregados a través de una licitación y de ahí se repartían a entidades beneficiarias de los bancos de alimentos, nos comenta Luis Docavo, director del Banco de Alimentos de Almería.
En Almería en concreto, el año pasado, el Banco de Alimentos repartió 800.000 kilos, beneficiando a unas 49.500 personas. No se trataba de individuos concretos, sino familias con hijos, comedores sociales, residencias de ancianos, centros de rehabilitación de drogodependencias, mujeres con dificultades, cáritas parroquiales, iglesias de todo tipo de confesiones, y un largo etcétera de organismos que así lo requerían.
Ahora, este tipo de ayuda a los alimentos ha desaparecido —comenta Docavo refiriéndose a la proveniente de Europa—, sustituyéndose por las tarjeta monedero. A su modo de ver mucho más limitadas porque sólo se entregarán a un tipo de familia con hijos o monoparentales, pero que no atiende por tanto a otro tipo de colectivos o individuos con graves vulnerabilidades. Además, sólo podrán comprar con estas tarjetas en determinadas cadenas alimentarias, no en todas, con el agravante que si no existen en sus municipios, tendrán que desplazarse. Dándose casos en que la distancia puede ser de hasta 100 kilómetros en algunas ocasiones.
Así, el Gobierno, elimina de la ecuación a los Bancos de Alimentos, y la distribución de las tarjetas la encomienda a Cruz Roja, que es la encargada de su gestión y reparto.
Cruz Roja en Almería aún no sabe nada de ellas. Ni a quiénes, ni cuándo se entregarán, ni a cuántos, ni qué método se usará. Tampoco ellos elaborarán listado de demandantes, sino que les vendrá impuesto desde el Gobierno.
Desde el Banco de Alimentos se quejan de que también muchos colectivos que hasta ahora recibían ayudas directas de los fondos europeos, ahora no las van a recibir y se quedan sin alternativa alguna.
El banco viene notando un aumento de demanda según las llamadas que recogen de los 147 colectivos con los que colaboran. Estos provienen, muchos de la zona de Poniente, pero también atienden al Levante y a cualquier otro punto de la provincia. Seguirá funcionando con las fuentes normales que hasta ahora tenían, "pero que no les da para atender a toda las personas, ni con la misma intensidad, ni la misma inmediatez", comenta su director.
Hasta ahora, los alimentos -que no dinero-, eran entregados a través de una licitación y de ahí se repartían a entidades beneficiarias de los bancos de alimentos, nos comenta Luis Docavo, director del Banco de Alimentos de Almería.
En Almería en concreto, el año pasado, el Banco de Alimentos repartió 800.000 kilos, beneficiando a unas 49.500 personas. No se trataba de individuos concretos, sino familias con hijos, comedores sociales, residencias de ancianos, centros de rehabilitación de drogodependencias, mujeres con dificultades, cáritas parroquiales, iglesias de todo tipo de confesiones, y un largo etcétera de organismos que así lo requerían.
Ahora, este tipo de ayuda a los alimentos ha desaparecido —comenta Docavo refiriéndose a la proveniente de Europa—, sustituyéndose por las tarjeta monedero. A su modo de ver mucho más limitadas porque sólo se entregarán a un tipo de familia con hijos o monoparentales, pero que no atiende por tanto a otro tipo de colectivos o individuos con graves vulnerabilidades. Además, sólo podrán comprar con estas tarjetas en determinadas cadenas alimentarias, no en todas, con el agravante que si no existen en sus municipios, tendrán que desplazarse. Dándose casos en que la distancia puede ser de hasta 100 kilómetros en algunas ocasiones.
Así, el Gobierno, elimina de la ecuación a los Bancos de Alimentos, y la distribución de las tarjetas la encomienda a Cruz Roja, que es la encargada de su gestión y reparto.
Cruz Roja en Almería aún no sabe nada de ellas. Ni a quiénes, ni cuándo se entregarán, ni a cuántos, ni qué método se usará. Tampoco ellos elaborarán listado de demandantes, sino que les vendrá impuesto desde el Gobierno.
Desde el Banco de Alimentos se quejan de que también muchos colectivos que hasta ahora recibían ayudas directas de los fondos europeos, ahora no las van a recibir y se quedan sin alternativa alguna.
El banco viene notando un aumento de demanda según las llamadas que recogen de los 147 colectivos con los que colaboran. Estos provienen, muchos de la zona de Poniente, pero también atienden al Levante y a cualquier otro punto de la provincia. Seguirá funcionando con las fuentes normales que hasta ahora tenían, "pero que no les da para atender a toda las personas, ni con la misma intensidad, ni la misma inmediatez", comenta su director.
