Interceptaban las comunicaciones entre dos compañías para hacerse pasar por una de ellas
ALMERÍA HOY / 05·12·2023
La Guardia Civil ha detenido a siete varones de entre 20 y 27 años de Roquetas de Mar acusados de conformar una organización delictiva destinada a estafar 132.000 euros a una empresa situada en el Poniente almeriense. Según las investigaciones, habrían engañado a la compañía mediante mensajes de correo electrónico para que realizara dos transferencias bancarias por la citada cantidad mediante el método conocido como 'Man in the middle'.
Según ha indicado la Comandancia, la operación se inició a finales de 2021 y se ha dado por finalizada el pasado mes de octubre con siete detenciones por estafa tecnológica en la que se interceptaron las comunicaciones entre dos empresas.
Esta modalidad de estafa consiste en interceptar las comunicaciones a través de correos electrónicos entre dos empresas para suplantar a una de ella y así cobrar el importe que la primera le abona por trabajos realizados.
Una vez los autores consiguieron la documentación que se intercambiaron las dos compañías en sus comunicaciones electrónicas, generalmente facturas, simularonn ser el proveedor para reclamar el importe adeudado, si bien indicaron que el pago debía efectuarse en una cuenta distinta a la habitual y gestionada por el autor de los hechos.
El Equipo @ de Almería se hizo cargo de la investigación en el momento en el que la Guardia Civil tuvo conocimiento de la denuncia, volcando los primeros esfuerzos en evitar que se completaran las transferencias fraudulentas y bloquear el dinero sustraído que provenía de la cuenta bancaria de la empresa perjudicada.
Estas primeras gestiones dieron como resultado el bloqueo de un total de 45.000 euros, un tercio de la cantidad total estafada, que habían sido ingresados en la cuenta fraudulenta. El resto del dinero sustraído había sido ya transferido a segundas y terceras cuentas.
Los agentes participantes en la operación agotaron todas las líneas de investigación, que culminó con la detención de un total de siete individuos, uno de los cuales identifican como el "responsable de la operativa", mientras que dos serían "captadores de mulas" y los cuatro, "mulas económicas", todos ellos afincados en Roquetas de Mar.
La estrecha relación entre el "responsable de la operativa" y los "captadores de mulas" les permitía hacer uso de un local con un negocio activo para llevar a cabo la captación de las "mulas", ocultando esta labor de captación durante el funcionamiento de dicho negocio.
Los detenidos, junto con las diligencias instruidas, fueron puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Berja (Almería).
Según ha indicado la Comandancia, la operación se inició a finales de 2021 y se ha dado por finalizada el pasado mes de octubre con siete detenciones por estafa tecnológica en la que se interceptaron las comunicaciones entre dos empresas.
Esta modalidad de estafa consiste en interceptar las comunicaciones a través de correos electrónicos entre dos empresas para suplantar a una de ella y así cobrar el importe que la primera le abona por trabajos realizados.
Una vez los autores consiguieron la documentación que se intercambiaron las dos compañías en sus comunicaciones electrónicas, generalmente facturas, simularonn ser el proveedor para reclamar el importe adeudado, si bien indicaron que el pago debía efectuarse en una cuenta distinta a la habitual y gestionada por el autor de los hechos.
El Equipo @ de Almería se hizo cargo de la investigación en el momento en el que la Guardia Civil tuvo conocimiento de la denuncia, volcando los primeros esfuerzos en evitar que se completaran las transferencias fraudulentas y bloquear el dinero sustraído que provenía de la cuenta bancaria de la empresa perjudicada.
Estas primeras gestiones dieron como resultado el bloqueo de un total de 45.000 euros, un tercio de la cantidad total estafada, que habían sido ingresados en la cuenta fraudulenta. El resto del dinero sustraído había sido ya transferido a segundas y terceras cuentas.
Los agentes participantes en la operación agotaron todas las líneas de investigación, que culminó con la detención de un total de siete individuos, uno de los cuales identifican como el "responsable de la operativa", mientras que dos serían "captadores de mulas" y los cuatro, "mulas económicas", todos ellos afincados en Roquetas de Mar.
La estrecha relación entre el "responsable de la operativa" y los "captadores de mulas" les permitía hacer uso de un local con un negocio activo para llevar a cabo la captación de las "mulas", ocultando esta labor de captación durante el funcionamiento de dicho negocio.
Los detenidos, junto con las diligencias instruidas, fueron puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Berja (Almería).