Pueblos de la provincia ofertarán electricidad barata a sus vecinos

Ocho ayuntamientos convenian con la Cámara de Comercio la instalación de placas solares en tejados de edificios municipales. Centenares de familias y autónomos pagarán menos por la luz



ALMERÍA HOY / 27·11·2023

La inflación castiga los bolsillos de autónomos, pequeños empresarios y ciudadanos en general. Para combatirla, la Cámara de Comercio de Almería tiene un plan: Impulsar una comunidad energética. Su nombre es ‘Toda Almería’ y permitirá reducir el coste de la electricidad.

En el plazo aproximado de un año, familias y autónomos de los ocho pueblos de la provincia que han constituido esta cooperativa, Pulpí, Cuevas del Almanzora, Bayarque, Abrucena, Las Tres Villas, Níjar, Suflí y María, podrán beneficiarse de una sustancial rebaja en el recibo de la luz.

“No hemos inventado nada”, apunta Jerónimo Parra, presidente de la Cámara almeriense. “Nos hemos limitado a promover aquí una iniciativa que lleva funcionando con éxito en Navarra desde hace algo más de un año, y si allí han logrado un ahorro importante, el que lograremos nosotros, con 700 horas más de sol al año, será importantísimo”.

El proyecto consiste en instalar placas fotovoltaicas sobre tejados de edificios y espacios de titularidad municipal. Ahora bien, la energía producida –en principio alrededor de 2 megavatios que las compañías eléctricas están obligadas a comprar, según una directiva de la Comisión Europea- no sólo reducirá el gasto en electricidad de cada ayuntamiento socio, sino también el de los vecinos que se adhieran al proyecto.

Porque, además de la municipalidad, podrán participar en la comunidad energética los propietarios de viviendas situadas en un radio de dos kilómetros del lugar en que estén instaladas las placas. No obstante, no todos podrán sumarse. La participación está limitada, en primer lugar, por la capacidad de generación de las placas instaladas en cada pueblo y, en segundo, porque cada vecino coopera con el equivalente a 0,5 Kw. Esta última condición trata de “extender la rentabilidad social del proyecto permitiendo que llegue al máximo número posible de beneficiarios”, indica Parra.

Los candidatos a formar parte de la comunidad habrán de depositar 150 euros en concepto de capital social. Este dinero es recuperable en caso de abandonar la sociedad, aunque, “para evitar tentaciones especulativas, los estatutos prevén que las acciones únicamente podrán venderse a la propia cooperativa por el valor nominal de la participación, es decir, 150 euros”.

“30% MENOS AL MES”

A partir de ahí, y siempre según la experiencia navarra, el beneficio se traducirá en una rebaja en el recibo de la luz de entre el 25% y el 30%. “Teniendo en cuenta que el importe medio ronda los 100 euros, estamos hablando de unos 30 euros al mes”, cuenta el presidente de la Cámara.

Parra acentúa que, salvo los 150 euros señalados, “nadie tendrá que adelantar ni un céntimo. Tampoco los ayuntamientos”. Explica que el presupuesto del proyecto supera los 2,5 millones, si bien la mitad “corresponden a fondos europeos gestionados por el Gobierno Central”. El 50% restante lo obtendrán de préstamos que la Cámara ya ha sondeado con entidades financieras, y se amortizarán por cada comunero con alrededor de 6 euros por recibo. “Aun así, los cooperativistas se estarán ahorrando un mínimo de 24 al mes”.

¿Por qué habla de “un mínimo” el líder de la institución empresarial? Lo aclara inmediatamente. Explica que, a esa cantidad, resultado de la generación de energía, habría que sumar el fruto de la “negociación con las compañías comercializadoras”. Espera que cuando la comunidad solicite ofertas a las distintas empresas eléctricas, “en nombre de los titulares de miles de contratos, obtendremos un precio sensiblemente inferior al que están cobrando a cada usuario de manera individual”.

A todo esto, Jerónimo Parra agrega un provecho más para el medio ambiente, ya que, “producir energía renovable, como en este caso la fotovoltaica, supone reducir la emisión de CO2 y, por tanto, rebajar la huella de carbono”.

La comunidad energética ‘Toda Almería’ está legalmente constituida y cuenta con técnicos “trabajando en el diseño de las instalaciones”. El objetivo es empezar a colocar placas solares en “febrero o marzo”. A partir de ese momento se iniciará la cuenta atrás para ayudar a unas 2.600 familias de los diez municipios fundadores, aunque la Cámara pretende extender el proyecto a 26.000 de ‘Toda Almería’.