Esteban Requena dirige el PSOE en Huércal Overa desde hace poco más de un mes, Quiere “mejorar las políticas sociales, la sanidad” y procurar que sus vecinos “sean felices”. También el empleo
ALMERÍA HOY / 26·11·2023
Lidera el Partido Socialista huercalense desde hace poco más de un mes. Esteban Requena ha recogido el testigo para “mejorar las políticas sociales, la sanidad” y procurar que sus vecinos “sean felices”. También el empleo: “La mitad de los huercalenses entre 25 y 45 años están parados”. Aunque parezca extraño, no habló de ultraderecha ni fascismos. Apenas hizo una referencia a su rival el alcalde.
- ¿Cuál es su curriculum en el Partido Socialista?
- Me afilié en 1999, aunque he estado desvinculado mucho tiempo por cuestión de estudios y trabajo, hasta que volví a involucrarme hace dos años.
- ¿Por qué ha vuelto?
- Porque amo a Huércal Overa, a su gente y a la clase trabajadora. Cuando decidí tomar las riendas del partido en el Ayuntamiento y la Agrupación local, un compañero de trabajo me preguntó qué necesidad tenía de hacerlo y, la verdad, es que ninguna. Tengo un empleo fijo y una familia bien encauzada. No necesito entrar en política. Otros lo han hecho para emprender carrera, yo no. Me he comprometido por vocación y para sentirme satisfecho espiritualmente.
- ¿Quiénes son esos ‘otros’ que han buscado una carrera política?
- No es ningún secreto. El alcalde, Domingo Fernández, dijo en público que él y Maribel Sánchez, hoy diputada tras haber sido concejal, senadora, delegada del Gobierno de la Junta y parlamentaria andaluza, habían entrado en política para hacer carrera.
- ¿Ha seguido los acontecimientos de la política local huercalense?
- Claro. Soy médico de familia, y el trabajo diario me permite observar y palpar la realidad. Sé qué hay detrás de lo que aparece en la prensa porque me lo cuentan mis pacientes sin que yo les pregunte. La política tiene mucho que ver con la salud de las personas. Puede subirte o bajarte el ánimo, la tensión y otras constantes.
- Como observador, ¿a qué conclusiones ha llegado?
- A bastantes y no todas buenas, por eso me ha animado a llegar a la Alcaldía. El principal problema es la baja tasa de empleo. La mitad de los vecinos con edades entre 25 y 45 años están parados. Mi principal objetivo es conseguir el pleno empleo. A partir de ahí será posible alcanzar el bienestar social.
- Resulta difícil entender tanto desempleo en un municipio que es el gran centro administrativo y de servicios en el Levante almeriense. - Pero si prescindimos de los institutos, el Hospital, los Juzgados y Hacienda, no hay otros motores de empleo en Huércal Overa. Apenas contamos con unas cuantas empresas y comercios. Recientemente ha sido noticia la inauguración de una fábrica de fertilizantes. Me parece muy triste que la apertura de una empresa en un municipio de 20.000 habitantes sea un acontecimiento insólito.
- ¿Supuso un golpe a la economía huercalense que la carretera nacional dejara de pasar por el pueblo al construirse la Autovía del Mediterráneo?
- Todo lo contrario. De hecho, el entronque de la Autovía del Mediterráneo con la del Almanzora en nuestro municipio es una gran oportunidad que debemos aprovechar dotando de suelo industrial a esa zona. Es una baza fantástica para atraer a las grandes empresas logísticas.
- Con tanto paro, como usted apunta, ¿cómo es posible que Huércal Overa superara el año pasado los 20.000 habitantes?
- Tal vez porque ofrece más oportunidades para encontrar vivienda a personas que trabajan en Antas, Pulpí o Cuevas. Es cierto que Huércal Overa vive una explosión demográfica desde hace quince o veinte años propiciada por toda esa gente con domicilio en nuestro pueblo y empleos en otros. La actividad no ha crecido en la misma proporción que el censo, y nos arriesgamos a que estos vecinos se vayan si cierran empresas en municipios vecinos.
- Además del empleo, ¿qué otras prioridades requiere Huércal Overa?
- El desarrollo de políticas sociales. Al superar el listón de los 20.000 habitantes, nos toca asumir la competencia sobre ayuda a domicilio. Es un reto importante. El Grupo Socialista ha solicitado información acerca de la forma en que va a ser gestionada. Queremos saber cómo se financiará; si el Ayuntamiento prestará el servicio directamente o mediante una empresa privada y, en cualquier caso, cuáles serán las condiciones laborales de los trabajadores.
- ¿Son muchos los huercalenses que necesitan ayuda a domicilio?
- Un gran número ha pedido el reconocimiento de un grado de dependencia. La lista de espera para que se les reconozca alcanza los 18 meses. Después han de aguardar 6 más para recibir la atención y acceder realmente a la prestación. La ley estipula que el plazo desde que se cursa la solicitud hasta recibir la atención no debe superar los 6 meses. La realidad lo eleva a dos años.
- Como médico será consciente de los retrasos que arrastra el futuro centro de salud.
- Por supuesto. Muchos creen que con el hospital La Inmaculada en el pueblo ya está todo solucionado, y no es así. Huércal Overa no sólo necesita más médicos de Atención Primaria para que los vecinos vivan más y mejor y, de paso, evitar el colapso que sufre el Hospital, sino también un nuevo centro de salud. Créame si le digo que el actual no reúne las condiciones. En mi consulta no tengo un lugar donde lavarme las manos y la ventilación es claramente insuficiente.
- Ser médico de Atención Primaria, ¿supone una ventaja en la política local?
- Entiendo que sí. Ejercer una profesión que inspira tanta confianza en los vecinos me permite escuchar, aunque nunca hago campaña en la consulta. Son los pacientes los que hablan por iniciativa propia e incluso llegan a hacerme propuestas que recojo. En el trabajo me limito a atender su salud y sus palabras.
- Es curioso que, saliéndose del discurso habitual, no haya alertado sobre los peligros de la derecha y la ultraderecha en toda la entrevista, ¿se lo reprocharán sus compañeros socialistas?
- Espero que no. Quizás soy muy naif. Prefiero compartir nuestros proyectos para el futuro de Huércal Overa antes que perderme en diatribas y soflamas contra la derecha o la ultraderecha. Eso no es lo importante.
- Tampoco ha criticado al alcalde?
- Y ¿por qué he de hablar mal del alcalde si me cae muy bien? ¡Domingo es magnífico! Muy simpático. Tiene una sonrisa tan agradable que dificulta luchar con él.
- Los resultados de las pasadas Municipales no fueron positivos para el PSOE. Su entonces candidata, Francisca Fernández, entendió que no debía seguir encabezando. ¿Qué piensa de ella?
- Francisca Fernández es la responsable de que yo me haya comprometido a representar al Partido Socialista en mi pueblo. Me parece una mujer muy inteligente y trabajadora que no ha conseguido sus objetivos. Es mi referente y le deseo lo mejor, aunque me consta que es muy feliz en su trabajo de orientadora escolar con los chavales de Secundaria.
- ¿Cuál es su curriculum en el Partido Socialista?
- Me afilié en 1999, aunque he estado desvinculado mucho tiempo por cuestión de estudios y trabajo, hasta que volví a involucrarme hace dos años.
- ¿Por qué ha vuelto?
- Porque amo a Huércal Overa, a su gente y a la clase trabajadora. Cuando decidí tomar las riendas del partido en el Ayuntamiento y la Agrupación local, un compañero de trabajo me preguntó qué necesidad tenía de hacerlo y, la verdad, es que ninguna. Tengo un empleo fijo y una familia bien encauzada. No necesito entrar en política. Otros lo han hecho para emprender carrera, yo no. Me he comprometido por vocación y para sentirme satisfecho espiritualmente.
- ¿Quiénes son esos ‘otros’ que han buscado una carrera política?
- No es ningún secreto. El alcalde, Domingo Fernández, dijo en público que él y Maribel Sánchez, hoy diputada tras haber sido concejal, senadora, delegada del Gobierno de la Junta y parlamentaria andaluza, habían entrado en política para hacer carrera.
- ¿Ha seguido los acontecimientos de la política local huercalense?
- Claro. Soy médico de familia, y el trabajo diario me permite observar y palpar la realidad. Sé qué hay detrás de lo que aparece en la prensa porque me lo cuentan mis pacientes sin que yo les pregunte. La política tiene mucho que ver con la salud de las personas. Puede subirte o bajarte el ánimo, la tensión y otras constantes.
- Como observador, ¿a qué conclusiones ha llegado?
- A bastantes y no todas buenas, por eso me ha animado a llegar a la Alcaldía. El principal problema es la baja tasa de empleo. La mitad de los vecinos con edades entre 25 y 45 años están parados. Mi principal objetivo es conseguir el pleno empleo. A partir de ahí será posible alcanzar el bienestar social.
- Resulta difícil entender tanto desempleo en un municipio que es el gran centro administrativo y de servicios en el Levante almeriense. - Pero si prescindimos de los institutos, el Hospital, los Juzgados y Hacienda, no hay otros motores de empleo en Huércal Overa. Apenas contamos con unas cuantas empresas y comercios. Recientemente ha sido noticia la inauguración de una fábrica de fertilizantes. Me parece muy triste que la apertura de una empresa en un municipio de 20.000 habitantes sea un acontecimiento insólito.
- ¿Supuso un golpe a la economía huercalense que la carretera nacional dejara de pasar por el pueblo al construirse la Autovía del Mediterráneo?
- Todo lo contrario. De hecho, el entronque de la Autovía del Mediterráneo con la del Almanzora en nuestro municipio es una gran oportunidad que debemos aprovechar dotando de suelo industrial a esa zona. Es una baza fantástica para atraer a las grandes empresas logísticas.
- Con tanto paro, como usted apunta, ¿cómo es posible que Huércal Overa superara el año pasado los 20.000 habitantes?
- Tal vez porque ofrece más oportunidades para encontrar vivienda a personas que trabajan en Antas, Pulpí o Cuevas. Es cierto que Huércal Overa vive una explosión demográfica desde hace quince o veinte años propiciada por toda esa gente con domicilio en nuestro pueblo y empleos en otros. La actividad no ha crecido en la misma proporción que el censo, y nos arriesgamos a que estos vecinos se vayan si cierran empresas en municipios vecinos.
- Además del empleo, ¿qué otras prioridades requiere Huércal Overa?
- El desarrollo de políticas sociales. Al superar el listón de los 20.000 habitantes, nos toca asumir la competencia sobre ayuda a domicilio. Es un reto importante. El Grupo Socialista ha solicitado información acerca de la forma en que va a ser gestionada. Queremos saber cómo se financiará; si el Ayuntamiento prestará el servicio directamente o mediante una empresa privada y, en cualquier caso, cuáles serán las condiciones laborales de los trabajadores.
- ¿Son muchos los huercalenses que necesitan ayuda a domicilio?
- Un gran número ha pedido el reconocimiento de un grado de dependencia. La lista de espera para que se les reconozca alcanza los 18 meses. Después han de aguardar 6 más para recibir la atención y acceder realmente a la prestación. La ley estipula que el plazo desde que se cursa la solicitud hasta recibir la atención no debe superar los 6 meses. La realidad lo eleva a dos años.
- Como médico será consciente de los retrasos que arrastra el futuro centro de salud.
- Por supuesto. Muchos creen que con el hospital La Inmaculada en el pueblo ya está todo solucionado, y no es así. Huércal Overa no sólo necesita más médicos de Atención Primaria para que los vecinos vivan más y mejor y, de paso, evitar el colapso que sufre el Hospital, sino también un nuevo centro de salud. Créame si le digo que el actual no reúne las condiciones. En mi consulta no tengo un lugar donde lavarme las manos y la ventilación es claramente insuficiente.
- Ser médico de Atención Primaria, ¿supone una ventaja en la política local?
- Entiendo que sí. Ejercer una profesión que inspira tanta confianza en los vecinos me permite escuchar, aunque nunca hago campaña en la consulta. Son los pacientes los que hablan por iniciativa propia e incluso llegan a hacerme propuestas que recojo. En el trabajo me limito a atender su salud y sus palabras.
- Es curioso que, saliéndose del discurso habitual, no haya alertado sobre los peligros de la derecha y la ultraderecha en toda la entrevista, ¿se lo reprocharán sus compañeros socialistas?
- Espero que no. Quizás soy muy naif. Prefiero compartir nuestros proyectos para el futuro de Huércal Overa antes que perderme en diatribas y soflamas contra la derecha o la ultraderecha. Eso no es lo importante.
- Tampoco ha criticado al alcalde?
- Y ¿por qué he de hablar mal del alcalde si me cae muy bien? ¡Domingo es magnífico! Muy simpático. Tiene una sonrisa tan agradable que dificulta luchar con él.
- Los resultados de las pasadas Municipales no fueron positivos para el PSOE. Su entonces candidata, Francisca Fernández, entendió que no debía seguir encabezando. ¿Qué piensa de ella?
- Francisca Fernández es la responsable de que yo me haya comprometido a representar al Partido Socialista en mi pueblo. Me parece una mujer muy inteligente y trabajadora que no ha conseguido sus objetivos. Es mi referente y le deseo lo mejor, aunque me consta que es muy feliz en su trabajo de orientadora escolar con los chavales de Secundaria.
