“Sin palabras” ha quedado el líder de Cs tras ser cesado. Se confiesa “sorprendido”, pese a enumerar un buen número de “traiciones” durante la larga convivencia política con Felipe Cayuela
ALMERÍA HOY / 29·10·2023
“Sin palabras” ha quedado el líder de Cs tras ser cesado. Se confiesa “sorprendido”, pese a enumerar un buen número de “traiciones” durante la larga convivencia política con Felipe Cayuela. Como el boxeador que acaba de encajar un duro golpe, Salvador no entiende qué ha pasado. Tal vez hayan sido los “celos”, barrunta. No alcanza a comprender por qué el alcalde ha optado por “quedarse en minoría”, pues no cree que Cayuela cuente con el edil socialista que se ha pasado a los no adscritos.
- ¿Por qué ha dejado de ser teniente de alcalde y le han echado del Gobierno?
- Porque no aparezco en el último decreto.
- El decreto ha sido la herramienta, pero, ¿cuál ha sido el motivo?
- No tengo más información. Recibí un primer decreto en el que me retiraba la firma el 2 de octubre, un segundo con fecha 6 de octubre en el que me cambiaba la cartera de Urbanismo por la de Infancia, y un tercer decreto el día 10 en el que ya ni siquiera aparece mi nombre, es decir, no estoy entre lo concejales del Gobierno. Todos esos decretos los ha firmado Felipe Cayuela. Él debería dar las explicaciones. Por mi parte, sólo puedo decir que la relación con los concejales del PP ha sido muy buena, grata y cordial. Con quien menos trato he tenido ha sido con el alcalde. Con los demás, fluidez total.
- ¿Qué desencuentros ha tenido con el alcalde en estos tres meses de Mandato?
- No ha habido ninguno, entre otras cosas, porque no ha transcurrido tiempo suficiente para adoptar grandes decisiones. Él siempre ha asentido a lo que yo proponía. No me ha rebatido nunca nada. Es posible que la buena relación que mantenía con los concejales del PP haya generado celos, resentimiento o inquietud en Felipe, pero tampoco puedo asegurarlo. Yo no tengo nada que ocultar. No he firmado los decretos. Sólo puedo intuir, pero carezco de datos objetivos. Sería conveniente escuchar al alcalde.
- ¿No existía trato cordial entre ustedes?
- Cordialidad, no. Pero ni conmigo ni con sus compañeros concejales del PP. No ofrece respuestas ni soluciones a nada que se le plantea. Ni a los concejales ni a los funcionarios.
- Llama la atención que el alcalde justificara retirarle las competencias sobre Urbanismo y encomendarle las de Infancia en base al estudio de sus “capacidades”, ¿cómo encajó esto?
- Me dejó sin palabras. El día que adoptó esa decisión, el 6 de octubre, yo tenía exactamente las mismas capacidades que el 5 de julio, cuando me buscaba ansiosamente para que gobernáramos juntos. Sin embargo, Felipe Cayuela ha intentado dañar mi imagen. Eso no me ha pillado de sorpresa. Ya lo hizo en 2018, cuando me sucedió en la Alcaldía. Entonces me acusó de haber cometido un montón de irregularidades y quedó demostrado que eran falsas. Yo estoy dispuesto a debatir con él sobre los motivos del cese. Que los exponga abiertamente.
- ¿De qué le acusó en 2018?
- De realizar contratos y pagos a ciertos proveedores e impagos a otros ¡siendo él concejal de Hacienda y, por tanto, encargado de ejecutarlos! De ser ciertas sus acusaciones, habría sido también culpable. Me denigró y comenzó a despellejarme desde el momento en que llegó a la Alcaldía. Me traicionó entonces, en 2018. Me acusó de una serie de falsas irregularidades de las que él habría sido cómplice en caso de ser ciertas. Recuerdo que, cuando anuncié que sería mi sucesor, todos estuvieron de acuerdo y él mismo juró y perjuró que me guardaría el puesto hasta que cumpliera el año de inhabilitación. Después, con el bastón en la mano, salió como salió. Es su forma de ser.
- Y con esos antecedentes, ¿por qué acordaron compartir gobierno hace tres meses?
- Decidimos hacer borrón y cuenta nueva. Siempre ha apuntado maneras. Ya en 2010, cuando UPyD, el partido de Rosa Díaz, parecía coger fuerza, organizó un par de reuniones para ponerlo en marcha en Carboneras. Tras fracasar, se disculpó ante mí. Después, estando en Gicar, llamó varias veces a la puerta del PP. Según me han dicho ahora, hablaba muy mal de mí aun siendo mi número dos.
- Ustedes tienen casi la misma edad, han crecido juntos, ¿no se conocen lo suficiente?
- Aunque él es dos o tres años mayor que yo, es verdad que nos conocemos desde niños. Vivíamos muy cerca, en el mismo barrio. Nadie me descubrió quién es.
- Aun así, ¿le buscó usted para que le acompañara en política?
- No. Me buscó él a mí en 2007. Cuando supo que estaba formando una candidatura, fue a la floristería de mi hermana para decirle que quería formar parte de la lista.
- Entonces es usted apartado del Gobierno sin explicaciones, ¿se queda con ganas de decirle algo?
- Poco tengo que hablar con él. Cada uno es como es. Me reservo dar consejos a este señor. Creo que no soy la persona más adecuada para hacerlo y, además, no es el momento.
- ¿Porque en caliente se puede decir lo que no se quiere?
- Porque estoy perplejo, más que cabreado. En una corporación de 13 concejales, siempre es preferible contar con 7 que con 6, y con 8 antes que con 5. Es obvio. Resulta de sentido común sumar en lugar de restar. Por eso es difícil entender la decisión de Felipe de quedarse minoría. Se está autoinmolando, destruyendo. Se ha suicidado políticamente.
- Igual cuenta con el concejal no adscrito Andrés Belmonte que hace poco más de un mes ha abandonado el Grupo Municipal del PSOE.
- No me consta. Andrés Belmonte continúa militando en el PSOE, pero no sé si ha llegado a algún acuerdo con Felipe. Me extrañaría mucho, porque es un hombre que se viste por los pies y no creo que sucumba a supuestos cantos de sirena. De todos modos, en un mes sabremos algo más, en función a cómo se desarrollen las cosas.
- Tras el cese ¿se ha planteado promover una moción de censura?
- No. No me la he planteado. Además, ni yo he contactado con nadie ni nadie lo ha hecho conmigo. Ni del PSOE ni del PP local.
- ¿Tampoco dentro de unos meses? - Insisto, no me lo he planteado. Ahora quiero hacer oposición, que es donde me han puesto los vecinos y Felipe. Votaré a favor, en contra o me abstendré cuando lo estime conveniente. El mandato termina en 2027.
- ¿Sabe si el PP de Almería estaba al tanto de la decisión de romper el pacto?
- Siempre he tenido una relación correcta con la dirección provincial. Jugó un papel importante para que el Mandato comenzara con un acuerdo que podía haber sido bueno. Desgraciadamente, ha pasado esto.
- Pero, ¿respaldan la actuación del alcalde?
- Me consta que no se lo esperaban. Están sorprendidos. Ha sido una decisión unilateral de Felipe.
- ¿Por qué ha dejado de ser teniente de alcalde y le han echado del Gobierno?
- Porque no aparezco en el último decreto.
- El decreto ha sido la herramienta, pero, ¿cuál ha sido el motivo?
- No tengo más información. Recibí un primer decreto en el que me retiraba la firma el 2 de octubre, un segundo con fecha 6 de octubre en el que me cambiaba la cartera de Urbanismo por la de Infancia, y un tercer decreto el día 10 en el que ya ni siquiera aparece mi nombre, es decir, no estoy entre lo concejales del Gobierno. Todos esos decretos los ha firmado Felipe Cayuela. Él debería dar las explicaciones. Por mi parte, sólo puedo decir que la relación con los concejales del PP ha sido muy buena, grata y cordial. Con quien menos trato he tenido ha sido con el alcalde. Con los demás, fluidez total.
- ¿Qué desencuentros ha tenido con el alcalde en estos tres meses de Mandato?
- No ha habido ninguno, entre otras cosas, porque no ha transcurrido tiempo suficiente para adoptar grandes decisiones. Él siempre ha asentido a lo que yo proponía. No me ha rebatido nunca nada. Es posible que la buena relación que mantenía con los concejales del PP haya generado celos, resentimiento o inquietud en Felipe, pero tampoco puedo asegurarlo. Yo no tengo nada que ocultar. No he firmado los decretos. Sólo puedo intuir, pero carezco de datos objetivos. Sería conveniente escuchar al alcalde.
- ¿No existía trato cordial entre ustedes?
- Cordialidad, no. Pero ni conmigo ni con sus compañeros concejales del PP. No ofrece respuestas ni soluciones a nada que se le plantea. Ni a los concejales ni a los funcionarios.
- Llama la atención que el alcalde justificara retirarle las competencias sobre Urbanismo y encomendarle las de Infancia en base al estudio de sus “capacidades”, ¿cómo encajó esto?
- Me dejó sin palabras. El día que adoptó esa decisión, el 6 de octubre, yo tenía exactamente las mismas capacidades que el 5 de julio, cuando me buscaba ansiosamente para que gobernáramos juntos. Sin embargo, Felipe Cayuela ha intentado dañar mi imagen. Eso no me ha pillado de sorpresa. Ya lo hizo en 2018, cuando me sucedió en la Alcaldía. Entonces me acusó de haber cometido un montón de irregularidades y quedó demostrado que eran falsas. Yo estoy dispuesto a debatir con él sobre los motivos del cese. Que los exponga abiertamente.
- ¿De qué le acusó en 2018?
- De realizar contratos y pagos a ciertos proveedores e impagos a otros ¡siendo él concejal de Hacienda y, por tanto, encargado de ejecutarlos! De ser ciertas sus acusaciones, habría sido también culpable. Me denigró y comenzó a despellejarme desde el momento en que llegó a la Alcaldía. Me traicionó entonces, en 2018. Me acusó de una serie de falsas irregularidades de las que él habría sido cómplice en caso de ser ciertas. Recuerdo que, cuando anuncié que sería mi sucesor, todos estuvieron de acuerdo y él mismo juró y perjuró que me guardaría el puesto hasta que cumpliera el año de inhabilitación. Después, con el bastón en la mano, salió como salió. Es su forma de ser.
- Y con esos antecedentes, ¿por qué acordaron compartir gobierno hace tres meses?
- Decidimos hacer borrón y cuenta nueva. Siempre ha apuntado maneras. Ya en 2010, cuando UPyD, el partido de Rosa Díaz, parecía coger fuerza, organizó un par de reuniones para ponerlo en marcha en Carboneras. Tras fracasar, se disculpó ante mí. Después, estando en Gicar, llamó varias veces a la puerta del PP. Según me han dicho ahora, hablaba muy mal de mí aun siendo mi número dos.
- Ustedes tienen casi la misma edad, han crecido juntos, ¿no se conocen lo suficiente?
- Aunque él es dos o tres años mayor que yo, es verdad que nos conocemos desde niños. Vivíamos muy cerca, en el mismo barrio. Nadie me descubrió quién es.
- Aun así, ¿le buscó usted para que le acompañara en política?
- No. Me buscó él a mí en 2007. Cuando supo que estaba formando una candidatura, fue a la floristería de mi hermana para decirle que quería formar parte de la lista.
- Entonces es usted apartado del Gobierno sin explicaciones, ¿se queda con ganas de decirle algo?
- Poco tengo que hablar con él. Cada uno es como es. Me reservo dar consejos a este señor. Creo que no soy la persona más adecuada para hacerlo y, además, no es el momento.
- ¿Porque en caliente se puede decir lo que no se quiere?
- Porque estoy perplejo, más que cabreado. En una corporación de 13 concejales, siempre es preferible contar con 7 que con 6, y con 8 antes que con 5. Es obvio. Resulta de sentido común sumar en lugar de restar. Por eso es difícil entender la decisión de Felipe de quedarse minoría. Se está autoinmolando, destruyendo. Se ha suicidado políticamente.
- Igual cuenta con el concejal no adscrito Andrés Belmonte que hace poco más de un mes ha abandonado el Grupo Municipal del PSOE.
- No me consta. Andrés Belmonte continúa militando en el PSOE, pero no sé si ha llegado a algún acuerdo con Felipe. Me extrañaría mucho, porque es un hombre que se viste por los pies y no creo que sucumba a supuestos cantos de sirena. De todos modos, en un mes sabremos algo más, en función a cómo se desarrollen las cosas.
- Tras el cese ¿se ha planteado promover una moción de censura?
- No. No me la he planteado. Además, ni yo he contactado con nadie ni nadie lo ha hecho conmigo. Ni del PSOE ni del PP local.
- ¿Tampoco dentro de unos meses? - Insisto, no me lo he planteado. Ahora quiero hacer oposición, que es donde me han puesto los vecinos y Felipe. Votaré a favor, en contra o me abstendré cuando lo estime conveniente. El mandato termina en 2027.
- ¿Sabe si el PP de Almería estaba al tanto de la decisión de romper el pacto?
- Siempre he tenido una relación correcta con la dirección provincial. Jugó un papel importante para que el Mandato comenzara con un acuerdo que podía haber sido bueno. Desgraciadamente, ha pasado esto.
- Pero, ¿respaldan la actuación del alcalde?
- Me consta que no se lo esperaban. Están sorprendidos. Ha sido una decisión unilateral de Felipe.