El exalcalde Juan Francisco Fernández, hoy al frente de la oposición de Garrucha, fue agredido por un vecino, caso en manos de la justicia que ya ha resuelto imponer una multa de 90 euros y orden de alejamiento al mismo individuo por las amenazas que profirió un día después contra la actual regidora y su padre.
ALMERÍA HOY / 18·08·2018
Para conocer las consecuencias por apalear al jefe de la oposición de Garrucha, Juan Francisco Fernández (PP), también conocido como ‘El Cuqui’, habrá que esperar a que la justicia valore el caso y dicte sentencia contra Antonio ‘El Turrero’, el vecino de la Villa que, armado con una caja de madera, la emprendió contra el exalcalde golpeándole repetidamente en el tronco y extremidades.
Sin embargo, ya es público que amenazar a la alcaldesa de Garrucha y a su padre sale por 90 euros y la imposibilidad de acercarse hasta ambos a menos de 200 metros durante seis meses.
Los hechos comenzaron el domingo 8 de julio. El hoy portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento caminaba por una calle de la localidad cuando un vecino le salió al encuentro infligiéndole diversos porrazos con una caja de madera de las que suelen usarse para el envase y transporte de frutas, que le ocasionaron diversas heridas de carácter leve.
Al parecer, mientras se afanaba en golpearle, se pudo escuchar cómo el presunto agresor gritaba “no te vuelvas a presentar más”, en alusión a las elecciones municipales.
Un día más tarde, el mismo sujeto se dirigió en actitud amenazante hacia el padre de la actual alcaldesa socialista, María Antonia López, a la que hizo, también, blanco de sus amenazas en cuanto la vio aparecer en escena.
Ambos hechos fueron puestos en conocimiento de las autoridades pero, mientras en el caso de la agresión sufrida por el edil éste lo hizo ante la Guardia Civil, que tomó declaración al presunto agresor y el asunto está pendiente de la celebración del oportuno procedimiento judicial, la alcaldesa se dirigió al juzgado de Vera, que instruyó un juicio rápido que resultó con la condena a Antonio ‘El Turrero’ a pagar una multa de 90 euros y a cumplir una orden de alejamiento con respecto a la regidora y su progenitor amenazados.
Sin embargo, las raíces de esta historia tenemos que buscarlas hace una década. Fue cuando el presunto agresor físico y constatado agresor verbal en primera instancia no conseguía que se le otorgara la licencia que había solicitado para la apertura de un chiringuito cuya ubicación estaba a caballo entre los terrenos municipales y los que están bajo la jurisdicción de la Autoridad Portuaria, en esa nueva zona de ocio de Garrucha.
El establecimiento no llegó a obtener la licencia, según nuestras fuentes, por estar a falta de cumplir una parte de los requisitos que exige la normativa vigente, lo que no fue obstáculo para que pudiera abrir y ofrecer sus servicios. La falta de ese permiso habría sido el motivo que indujo a ‘El Turrero’, según nuestras fuentes de reconocida solvencia, a amenazar al entonces alcalde, Andrés Segura (PSOE), aunque familiares del exrregidor niegan total y absolutamente tales amenazas.
Las advertencias alcanzaron también al jefe del Puerto, Alfonso Rodríguez, a quien según las mismas fuentes, el presunto agresor de Fernández habría llegado a colocar en el pecho el cañón de una escopeta hará cosa de un año. Y hace casi tres, el actual teniente de alcalde, José Antonio Gallardo (PSOE), habría sido abofeteado por el mismo sujeto y por el mismo motivo, que en ningún caso podría justificar semejante comportamiento reiterado.
Llegados a este punto, es necesario señalar que, a diferencia de la alcaldesa y del portavoz del Grupo Popular, ni Segura, ni Rodríguez ni Gallardo denunciaron los hechos de los que fueron objeto. En cualquier caso, el negocio de Antonio ‘El Turrero’ cuenta hoy con la pertinente licencia que no fue capaz de conseguir durante los últimos años del mandato del socialista Andrés Segura ni en los ocho que gobernó Juan Francisco Fernández, el apaleado edil popular.
REACCIONES
A falta de una valoración por parte del exalcalde Fernández, que no ha atendido a las múltiples llamadas realizadas por esta redacción, el portavoz del Grupo Independiente por Garrucha (GIGA), Bernardo Simón, lamenta lo sucedido y asegura haberse puesto a disposición del concejal agredido. “Estos hechos no son admisibles en un estado de derecho que proporciona numerosos recursos para solucionar cualquier asunto. Hemos hecho llegar nuestra solidaridad a Juan Francisco y le hemos comunicado que estamos con él en momentos como los que está atravesando”.
Por su parte, la alcaldesa María Antonia López no ha querido entrar en detalles “por respeto a la justicia, que se está ocupando del asunto, y porque entendemos que Antonio –el presunto agresor- debía estar fuera de su propio control por alguna causa que desconozco para obrar como la ha hecho tanto con Juan Francisco como con mi padre y conmigo”.
“Son hechos que, por desgracia, ocurren. Yo estoy en contacto con Juan Francisco y él sabe que cuenta con el apoyo de toda la Corporación y del Partido Socialista. Se trata de un hecho aislado, sin otro trasfondo político ni administrativo, que intentamos controlar judicialmente y con los medios que tenemos a nuestro alcance. Insisto en que todo está en manos de las autoridades judiciales y de las fuerzas de seguridad del Estado. Dejémosles trabajar”, concluye la regidora.
ACLARACION DE ANDRÉS SEGURA:
“Quiero aclarar que no he sido amenazado nunca por el denunciado ni por su familia. Mi relación Antonio "El Turrero" y su familia siempre fue y es correcta e incluso cordial”.
Sin embargo, ya es público que amenazar a la alcaldesa de Garrucha y a su padre sale por 90 euros y la imposibilidad de acercarse hasta ambos a menos de 200 metros durante seis meses.
Los hechos comenzaron el domingo 8 de julio. El hoy portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento caminaba por una calle de la localidad cuando un vecino le salió al encuentro infligiéndole diversos porrazos con una caja de madera de las que suelen usarse para el envase y transporte de frutas, que le ocasionaron diversas heridas de carácter leve.
Al parecer, mientras se afanaba en golpearle, se pudo escuchar cómo el presunto agresor gritaba “no te vuelvas a presentar más”, en alusión a las elecciones municipales.
Un día más tarde, el mismo sujeto se dirigió en actitud amenazante hacia el padre de la actual alcaldesa socialista, María Antonia López, a la que hizo, también, blanco de sus amenazas en cuanto la vio aparecer en escena.
Ambos hechos fueron puestos en conocimiento de las autoridades pero, mientras en el caso de la agresión sufrida por el edil éste lo hizo ante la Guardia Civil, que tomó declaración al presunto agresor y el asunto está pendiente de la celebración del oportuno procedimiento judicial, la alcaldesa se dirigió al juzgado de Vera, que instruyó un juicio rápido que resultó con la condena a Antonio ‘El Turrero’ a pagar una multa de 90 euros y a cumplir una orden de alejamiento con respecto a la regidora y su progenitor amenazados.
Sin embargo, las raíces de esta historia tenemos que buscarlas hace una década. Fue cuando el presunto agresor físico y constatado agresor verbal en primera instancia no conseguía que se le otorgara la licencia que había solicitado para la apertura de un chiringuito cuya ubicación estaba a caballo entre los terrenos municipales y los que están bajo la jurisdicción de la Autoridad Portuaria, en esa nueva zona de ocio de Garrucha.
El establecimiento no llegó a obtener la licencia, según nuestras fuentes, por estar a falta de cumplir una parte de los requisitos que exige la normativa vigente, lo que no fue obstáculo para que pudiera abrir y ofrecer sus servicios. La falta de ese permiso habría sido el motivo que indujo a ‘El Turrero’, según nuestras fuentes de reconocida solvencia, a amenazar al entonces alcalde, Andrés Segura (PSOE), aunque familiares del exrregidor niegan total y absolutamente tales amenazas.
Las advertencias alcanzaron también al jefe del Puerto, Alfonso Rodríguez, a quien según las mismas fuentes, el presunto agresor de Fernández habría llegado a colocar en el pecho el cañón de una escopeta hará cosa de un año. Y hace casi tres, el actual teniente de alcalde, José Antonio Gallardo (PSOE), habría sido abofeteado por el mismo sujeto y por el mismo motivo, que en ningún caso podría justificar semejante comportamiento reiterado.
Llegados a este punto, es necesario señalar que, a diferencia de la alcaldesa y del portavoz del Grupo Popular, ni Segura, ni Rodríguez ni Gallardo denunciaron los hechos de los que fueron objeto. En cualquier caso, el negocio de Antonio ‘El Turrero’ cuenta hoy con la pertinente licencia que no fue capaz de conseguir durante los últimos años del mandato del socialista Andrés Segura ni en los ocho que gobernó Juan Francisco Fernández, el apaleado edil popular.
REACCIONES
A falta de una valoración por parte del exalcalde Fernández, que no ha atendido a las múltiples llamadas realizadas por esta redacción, el portavoz del Grupo Independiente por Garrucha (GIGA), Bernardo Simón, lamenta lo sucedido y asegura haberse puesto a disposición del concejal agredido. “Estos hechos no son admisibles en un estado de derecho que proporciona numerosos recursos para solucionar cualquier asunto. Hemos hecho llegar nuestra solidaridad a Juan Francisco y le hemos comunicado que estamos con él en momentos como los que está atravesando”.
Por su parte, la alcaldesa María Antonia López no ha querido entrar en detalles “por respeto a la justicia, que se está ocupando del asunto, y porque entendemos que Antonio –el presunto agresor- debía estar fuera de su propio control por alguna causa que desconozco para obrar como la ha hecho tanto con Juan Francisco como con mi padre y conmigo”.
“Son hechos que, por desgracia, ocurren. Yo estoy en contacto con Juan Francisco y él sabe que cuenta con el apoyo de toda la Corporación y del Partido Socialista. Se trata de un hecho aislado, sin otro trasfondo político ni administrativo, que intentamos controlar judicialmente y con los medios que tenemos a nuestro alcance. Insisto en que todo está en manos de las autoridades judiciales y de las fuerzas de seguridad del Estado. Dejémosles trabajar”, concluye la regidora.
ACLARACION DE ANDRÉS SEGURA:
“Quiero aclarar que no he sido amenazado nunca por el denunciado ni por su familia. Mi relación Antonio "El Turrero" y su familia siempre fue y es correcta e incluso cordial”.
