La víctima, de 63 años de edad y natural de Huércal de Almería, fallecía a causa de las quemaduras sufridas en el incendio de su silla de ruedas eléctrica
EUROPA PRESS / 10·08·2016
La alcaldesa de Chirivel, Emma Sola, ha trasladado este miércoles el «pésame» de la corporación municipal por la muerte de una mujer de 63 años en una residencia de la localidad, después de que en la noche de este martes la silla eléctrica en la que se desplazaba ardiera por motivos que aún se desconocen.
La regidora ha lamentado la tragedia y ha querido trasladar sus condolencias a la familia, con la que, asegura, comparte su «tristeza», al tiempo que ha valorado el suceso como «un cúmulo de circunstancias y hechos fortuitos».
«No nos gusta que este tipo de cosas pase y solamente podemos dar las gracias por el tiempo que ha pasado en Chirivel», ha añadido la primer edil, quien ha explicado que permanece en contacto con la dirección del centro, de carácter privado, que se ubica a unos ocho kilómetros del núcleo de este pueblo de 1.600 habitantes.
Según la información remitida desde la residencia, los hechos tuvieron lugar poco después de las 21:15 horas, cuando la mujer fue conducida a uno de los cuatro patios interiores, después de la cena y a la espera de ser subida a su habitación mientras se acompañaba a otros internos del centro, especializado en enfermedades neurodegenerativas.
Fue una de las supervisoras que acompañaba a la mujer la que se percató de que la silla comenzó a arder, por lo que trató de sofocar las llamas al tiempo que avisaba a otros trabajadores de la residencia, quienes, según ha declarado el director del centro, emplearon hasta seis extintores para tratar de apagar el fuego.
Así, se dio aviso a efectivos sanitarios, a los bomberos de Baza (Granada) y a la Guardia Civil, sin que se pudiera hacer nada para salvar la vida de la mujer, quien falleció a causa de las graves heridas. Según el director del centro, la silla se había cambiado por una nueva el pasado año.
La regidora ha lamentado la tragedia y ha querido trasladar sus condolencias a la familia, con la que, asegura, comparte su «tristeza», al tiempo que ha valorado el suceso como «un cúmulo de circunstancias y hechos fortuitos».
«No nos gusta que este tipo de cosas pase y solamente podemos dar las gracias por el tiempo que ha pasado en Chirivel», ha añadido la primer edil, quien ha explicado que permanece en contacto con la dirección del centro, de carácter privado, que se ubica a unos ocho kilómetros del núcleo de este pueblo de 1.600 habitantes.
Según la información remitida desde la residencia, los hechos tuvieron lugar poco después de las 21:15 horas, cuando la mujer fue conducida a uno de los cuatro patios interiores, después de la cena y a la espera de ser subida a su habitación mientras se acompañaba a otros internos del centro, especializado en enfermedades neurodegenerativas.
Fue una de las supervisoras que acompañaba a la mujer la que se percató de que la silla comenzó a arder, por lo que trató de sofocar las llamas al tiempo que avisaba a otros trabajadores de la residencia, quienes, según ha declarado el director del centro, emplearon hasta seis extintores para tratar de apagar el fuego.
Así, se dio aviso a efectivos sanitarios, a los bomberos de Baza (Granada) y a la Guardia Civil, sin que se pudiera hacer nada para salvar la vida de la mujer, quien falleció a causa de las graves heridas. Según el director del centro, la silla se había cambiado por una nueva el pasado año.