Medio siglo después de aquella imagen, «se mantiene el pulso» por la limpieza de los residuos radiactivos
El ministro de Turismo de la época, Manuel Fraga, durante su célebre baño en la playa de Quitapellejos. |
EUROPA PRESS / 08·03·2016
El Gobierno español «mantiene conversaciones de tipo técnico» con la Administración estadounidense sobre «cómo ir desbrozando el terreno contaminado una vez que se firme el acuerdo —definitivo— entre ambos países» sobre la retirada de los residuos nucleares de Palomares, en Cuevas del Almanzora, 50 años después de que cayeran accidentalmente bombas termonucleares, según han informado fuentes diplomáticas.
Este 8 de marzo se cumplen 50 años del famoso baño del entonces ministro de Información y Turismo, Manuel Fraga, junto con el embajador de Estados Unidos Angier Biddle Duke en la playa de esta localidad, donde ese mes de enero dos aviones militares estadounidense colisionaron en vuelo provocando la caída de los artefactos.
Estas mismas fuentes han subrayado que, a pesar de que el Gobierno esté en funciones, «se mantiene el pulso» tras el memorándum de entendimiento firmado a finales de 2015 entre ambas Administraciones en el que Estados Unidos, por primera vez, plasmaba por escrito su «intención» de llevarse la tierra contaminada a su territorio.
Tras la caída de las bombas, la noticia de la contaminación radiactiva en España se extendió por todo el mundo en plena Guerra Fría. Esta información en la época del desarrollo del turismo en España, con Manuel Fraga como ministro del ramo, llevó al político gallego a minimizar el impacto negativo del suceso dándose un baño en la playa de Quitapellejos, frente a varios fotógrafos que captaron el momento.
Este 8 de marzo se cumplen 50 años del famoso baño del entonces ministro de Información y Turismo, Manuel Fraga, junto con el embajador de Estados Unidos Angier Biddle Duke en la playa de esta localidad, donde ese mes de enero dos aviones militares estadounidense colisionaron en vuelo provocando la caída de los artefactos.
Estas mismas fuentes han subrayado que, a pesar de que el Gobierno esté en funciones, «se mantiene el pulso» tras el memorándum de entendimiento firmado a finales de 2015 entre ambas Administraciones en el que Estados Unidos, por primera vez, plasmaba por escrito su «intención» de llevarse la tierra contaminada a su territorio.
Tras la caída de las bombas, la noticia de la contaminación radiactiva en España se extendió por todo el mundo en plena Guerra Fría. Esta información en la época del desarrollo del turismo en España, con Manuel Fraga como ministro del ramo, llevó al político gallego a minimizar el impacto negativo del suceso dándose un baño en la playa de Quitapellejos, frente a varios fotógrafos que captaron el momento.