La embarcación fue interceptada en Punta Polacra con 11 adultos y dos niñas a bordo
ALMERÍA HOY / 25·11·2022
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado la condena a cinco años de prisión un joven de 28 años por patronear una patera de apenas seis metros de eslora que fue interceptada frente a Punta Polacra, en Níjar con 11 adultos y dos niñas de dos y ocho años a bordo al considerar que puso "en concreto peligro" su vida durante una travesía en la que "había bastante oleaje y hacía mucho viento", y en la que se produjeron "situaciones de terror" en las que se "enfrentaron entre sí debido al pánico, llorando porque pensaban que iban a morir".
El alto tribunal indica que la embarcación estaba "sin duda sobrecargada" no solo por el número de ocupantes, sino también por los seis bidones de gasolina de 30 litros cada uno que portaba, cuya volatilidad y uso generó "un gran peligro de incendio o deflagración a bordo" durante un viaje por alta mar de más de 90 millas náuticas.
La sentencia, hecha pública este viernes, desestima el recurso de apelación de la defensa de M.A.K. y, al margen de concluir que procede la aplicación del subtipo agravado del delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, señala como acreditado que el acusado "no viajaba" como un "inmigrante mas" en la patera ni tampoco, como él asegura, que se pusiera a tripularla "debido a que los pasajeros comenzaron a discutir y dejó de hacerlo el que entonces se dedicaba a ello".
Apunta que, si bien el recurrente alegó que la embarcación "estaba en aceptable estado de conservación" y que tenía un motor fuera borda "que disminuía el tiempo de travesía", ello no obvia "la falta absoluta de cualquier medida de seguridad" como chalecos salvavidas.
La Audiencia Provincial de Almería recoge como probado en primera instancia que el acusado, de nacionalidad argelina, junto con otras personas no identificadas y con la intención de enriquecerse ilícitamente y favorecer la entrada fuera de las vías legales en territorio español, promovió de forma directa la inmigración clandestina de personas desde Argelia.
Sostiene que, a cambio de dinero, organizó todo lo necesario para efectuar el viaje desde las costas de Argelia hasta España en una embarcación tipo patera y que, el día 12 de septiembre de 2021, inició el viaje "patroneando la embarcación neumática de seis metros de eslora, haciéndolo sin luces y sin medidas de seguridad".
Añade el fallo que sobre las 14,00 horas, a siete millas náuticas de Punta Polacra, la embarcación fue interceptada por agentes de la Guardia Civil, que rescataron a las 13 personas que viajaban a bordo junto con él. Entre ellas, dos niñas de dos y ocho años.
El tribunal remarca que la embarcación puso en peligro la vida e integridad de todos los que viajaron a bordo al no reunir las condiciones de seguridad mínimas para garantizar la seguridad de la vida humana en el mar, requeridas para la realización de este tipo de viajes.
"No estaba capacitada para realizar un trayecto de 92 millas náuticas, ni para soportar condiciones de viento y oleaje que existían el día de los hechos, debido a la falta de equipo de navegación, salvamento, contra incendios, achique o radiocomunicaciones, comida o víveres", remarca para concretar que "no contaba con chalecos salvavidas, ni balsas salvavidas, ni cohetes, ni bengalas, ni señales fumíferas, ni extintores portátiles, ni baldes contra incendios, ni bombas de achique, ni equipo de radiocomunicaciones, ni de seguridad en la navegación como SIA, cartas náuticas ni luces de navegación".
Por último, alude a que "la falta de seguridad en la navegación se vio agravada por las características concretas del tráfico en la zona por la que discurrió la embarcación, al ser utilizado por gran número de buques mercantes y señala que al acusado "se le ocuparon 1.150 euros en efectivo procedentes de la actividad ilícita". A
El alto tribunal indica que la embarcación estaba "sin duda sobrecargada" no solo por el número de ocupantes, sino también por los seis bidones de gasolina de 30 litros cada uno que portaba, cuya volatilidad y uso generó "un gran peligro de incendio o deflagración a bordo" durante un viaje por alta mar de más de 90 millas náuticas.
La sentencia, hecha pública este viernes, desestima el recurso de apelación de la defensa de M.A.K. y, al margen de concluir que procede la aplicación del subtipo agravado del delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, señala como acreditado que el acusado "no viajaba" como un "inmigrante mas" en la patera ni tampoco, como él asegura, que se pusiera a tripularla "debido a que los pasajeros comenzaron a discutir y dejó de hacerlo el que entonces se dedicaba a ello".
Apunta que, si bien el recurrente alegó que la embarcación "estaba en aceptable estado de conservación" y que tenía un motor fuera borda "que disminuía el tiempo de travesía", ello no obvia "la falta absoluta de cualquier medida de seguridad" como chalecos salvavidas.
La Audiencia Provincial de Almería recoge como probado en primera instancia que el acusado, de nacionalidad argelina, junto con otras personas no identificadas y con la intención de enriquecerse ilícitamente y favorecer la entrada fuera de las vías legales en territorio español, promovió de forma directa la inmigración clandestina de personas desde Argelia.
Sostiene que, a cambio de dinero, organizó todo lo necesario para efectuar el viaje desde las costas de Argelia hasta España en una embarcación tipo patera y que, el día 12 de septiembre de 2021, inició el viaje "patroneando la embarcación neumática de seis metros de eslora, haciéndolo sin luces y sin medidas de seguridad".
Añade el fallo que sobre las 14,00 horas, a siete millas náuticas de Punta Polacra, la embarcación fue interceptada por agentes de la Guardia Civil, que rescataron a las 13 personas que viajaban a bordo junto con él. Entre ellas, dos niñas de dos y ocho años.
El tribunal remarca que la embarcación puso en peligro la vida e integridad de todos los que viajaron a bordo al no reunir las condiciones de seguridad mínimas para garantizar la seguridad de la vida humana en el mar, requeridas para la realización de este tipo de viajes.
"No estaba capacitada para realizar un trayecto de 92 millas náuticas, ni para soportar condiciones de viento y oleaje que existían el día de los hechos, debido a la falta de equipo de navegación, salvamento, contra incendios, achique o radiocomunicaciones, comida o víveres", remarca para concretar que "no contaba con chalecos salvavidas, ni balsas salvavidas, ni cohetes, ni bengalas, ni señales fumíferas, ni extintores portátiles, ni baldes contra incendios, ni bombas de achique, ni equipo de radiocomunicaciones, ni de seguridad en la navegación como SIA, cartas náuticas ni luces de navegación".
Por último, alude a que "la falta de seguridad en la navegación se vio agravada por las características concretas del tráfico en la zona por la que discurrió la embarcación, al ser utilizado por gran número de buques mercantes y señala que al acusado "se le ocuparon 1.150 euros en efectivo procedentes de la actividad ilícita". A
