La directora de Enfermería del Hospital de Huércal Overa desmiente las acusaciones de UGT referentes a supuestos "reproches" a trabajadoras del Centro por utilizar EPIs.
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| Catiana Soriano desmiente que nadie de la Dirección de Enfermería haya "reprochado" a ningún sanitario el uso correcto de equipos de protección |
ALMERÍA HOY / 17·04·2020
"Nadie ha reprendido a ningún sanitario en La Inmaculada por usar los equipos de protección de forma correcta", manifestaba con rotundidad en el informativo de ayer de RADIO ACTUALIDAD la directora de Enfermería del citado Centro hospitalario, Catiana Soriano.
Era la respuesta a unas declaraciones efectuadas en el mismo medio el pasado lunes, y recogidas en este medio, de la responsable del sindicato UGT-Sanidad en Almería, Juana Reche, quien revelaba que "alguien de la Dirección de Enfermería de La Inmaculada ningunea y reprocha al personal sanitario el uso de pantallas, guantes y otros equipos de protección individual (EPIs), en su mayoría donados".
"Les pregunta con malos modos qué hacen con esos equipos puestos de manera innecesaria, cuando su obligación es proteger a las trabajadoras y proporcionarles EPIs suficientes", explicaba Reche, quien añadía que "no esa persona nunca da ninguna explicación que justifique su actitud, del todo injustificable. Es como enviar soldados a primera línea del frente de batalla sin ni siquiera un casco".
"Tienen a los profesionales 'acojonaos', y les han prohibido hasta quejarse. La Junta les lanza amenazas para que no opinen sobre lo que está pasando en los hospitales", agregaba la sindicalista que reconocía que "la presión para que el personal sanitario no utilice los EPIs es una situación insólita en la provincia que solamente ocurre en el Hospital de La Inmaculada, en Huércal Overa".
Soriano desmentía tajantemente tales acusaciones, y las achacaba a un posible error de percepción. "Los equipos de protección individual son específicos para cada ambiente, y es verdad que, en alguna ocasión, ha habido que llamar la atención a algún profesional que, por descuido, ha salido de una zona con especial protección por encontrarse en ella algún enfermo contagiado portando los equipos que podían estar infectados al haber estado expuestos, llevando la posibilidad de transmisión a otras áreas del Hospital. En cualquier caso -añadía la directora de Enfermería-, se ha tratado de muy pocos casos, hasta el punto que podríamos catalogarlos de anecdóticos, y en ningún caso merecedores de la respuesta de UGT, que creo se ha propasado totalmente en sus acusaciones".
Era la respuesta a unas declaraciones efectuadas en el mismo medio el pasado lunes, y recogidas en este medio, de la responsable del sindicato UGT-Sanidad en Almería, Juana Reche, quien revelaba que "alguien de la Dirección de Enfermería de La Inmaculada ningunea y reprocha al personal sanitario el uso de pantallas, guantes y otros equipos de protección individual (EPIs), en su mayoría donados".
"Les pregunta con malos modos qué hacen con esos equipos puestos de manera innecesaria, cuando su obligación es proteger a las trabajadoras y proporcionarles EPIs suficientes", explicaba Reche, quien añadía que "no esa persona nunca da ninguna explicación que justifique su actitud, del todo injustificable. Es como enviar soldados a primera línea del frente de batalla sin ni siquiera un casco".
"Tienen a los profesionales 'acojonaos', y les han prohibido hasta quejarse. La Junta les lanza amenazas para que no opinen sobre lo que está pasando en los hospitales", agregaba la sindicalista que reconocía que "la presión para que el personal sanitario no utilice los EPIs es una situación insólita en la provincia que solamente ocurre en el Hospital de La Inmaculada, en Huércal Overa".
Soriano desmentía tajantemente tales acusaciones, y las achacaba a un posible error de percepción. "Los equipos de protección individual son específicos para cada ambiente, y es verdad que, en alguna ocasión, ha habido que llamar la atención a algún profesional que, por descuido, ha salido de una zona con especial protección por encontrarse en ella algún enfermo contagiado portando los equipos que podían estar infectados al haber estado expuestos, llevando la posibilidad de transmisión a otras áreas del Hospital. En cualquier caso -añadía la directora de Enfermería-, se ha tratado de muy pocos casos, hasta el punto que podríamos catalogarlos de anecdóticos, y en ningún caso merecedores de la respuesta de UGT, que creo se ha propasado totalmente en sus acusaciones".
