Terrazas del Paseo Marítimo de la capital permanecieron abiertas pese a las recomendaciones municipales en contra

La de la Cafetería París se mantuvo en servicio contra el sentir de los vecinos que recriminaban su actitud desde las ventanas y balcones de sus domicilios.


La Cafetería París permaneció abierta hasta bien entrada l anoche del sábado a pesar de las recriminaciones de los vecinos y haciendo oídos sordos a la recomendación de la Policía Local.

ALMERÍA HOY / 15·03·2020

Frente al sentido común mostrado por la inmensa mayoría de los ciudadanos, incluidos los almerienses, otros han mostrado, en cambio, no estar a la altura de los acontecimientos.

Así, un buen número de madrileños han invadido lugares de vacaciones, como los que proliferan a lo largo de toda la costa de nuestra provincia, liderados por el ex presidente Aznar y su cónyuge, que han hecho caso omiso del sentido de Estado que se le suponía para escapar hasta Marbella.

Afortunadamente, veíamos proliferar ejemplos en contrario. Ayer destacábamos la iniciativa de los propietarios de restaurantes de Vera, que decidieron de motu propio el cierre de sus establecimientos, como hicieron también en otros municipios de nuestra provincia y muchos a título individual.

Sin embargo, hay que destacar del mismo modo casos contrarios, como el espectáculo ofrecido durante el sábado por casi la totalidad, a excepción de dos, de las terrazas del Paseo Marítimo de la capital, abiertas y a rebosar de clientes en un irresponsable ejercicio de inconsciencia y avaricia a costa del peligro que entrañaba su acción.

Cabe destacar y singularizar el caso de la Cafetería París porque, mientras el resto fue cerrando las persianas a lo largo de la tarde, permaneció abierta bien entrada la noche, impasible a las advertencias de la Policía Local y a las recriminaciones que los vecinos vertían desde sus ventanas y balcones.