«Si Indalo quiere denunciar a la Junta tendrá que ir al juzgado en su nombre y su DNI»

Antonio Fernández, alcalde de Cuevas: «Resulta triste que Indalecio Modesto (C’s) únicamente busque saciar su afán de protagonismo»




ALMERÍA HOY / 31·03·2018

Al alcalde de Cuevas del Almanzora le «entristecen» dos cosas: que su ¿socio? de gobierno «busque protagonismo» con el anuncio de una denuncia contra la Junta de Andalucía a propósito del incumplimiento del convenio firmado en 2006 para la restauración y rehabilitación de la Máquina de Vapor del Barranco Chaparral; y que el PP focalice en la comarca el «problema nacional» de la falta de especialistas en la Sanidad. Como contraposición, se muestra satisfecho por el paso de gigante dado para la aprobación del PGOU.


Antonio Fernández Liria (PSOE), alcalde de Cuevas del Almanzora, asegura tomarse «en serio» la política. Eso, para el regidor, significa «hacer cosas por el pueblo, por eso me resulta triste que Indalecio Modesto (C’s) únicamente busque saciar su afán de protagonismo». «Si hay que denunciar a la Junta de Andalucía por el asunto de la Máquina de vapor, tendríamos que empezar a armar querellas, también, contra la Diputación y el Gobierno de España porque, quien más o quien menos, tiene alguna deuda con Cuevas. Pero Indalecio sólo busca titulares en la prensa y, eso, a mí ya me está cansando. Tendrá que ir al juzgado él en su nombre y con su carnet de identidad, porque el Ayuntamiento no le va a seguir el juego».

Era la respuesta al anuncio del único concejal de Ciudadanos, que le facilitó el bastón de la alcaldía, de interponer una denuncia contra la Junta de Andalucía por el incumplimiento del convenio suscrito en 2006 para la restauración y rehabilitación de la Máquina de Vapor del barranco Chaparral, la más antigua de España que se conserva en su lugar original.

«La Junta incluyó entonces una partida. Terminó la primera fase, pero en 2010, cuando tenía que llevar a cabo la segunda, que importaba 40.000 euros y consistía en consolidar la torre de la cabria y evitar el riesgo de su derrumbe, no llegó a acometerla».

Modesto recordaba a ACTUALIDAD ALMANZORA que «una de las primeras cosas que hizo mi departamento cuando iniciamos el mandato fue ponernos en comunicación con la delegación de Cultura solicitando el cumplimiento del convenio suscrito. Nos contestaron ofreciendo técnicos a nuestra disposición para realizar un estudio y asesorarnos en los trabajos de rehabilitación. Agradecemos el asesoramiento, sin embargo, lo que nosotros queremos es el dinero prometido para la restauración. En resumen, que cumplan el acuerdo de 2006. Han tenido 12 años para hacerlo y, si no nos queda más remedio, lucharemos por nuestros derechos ante un juez».


«El Ayuntamiento no es el alcalde»

Pero lejos de arriar velas tras las palabras del primer edil de Cuevas, Modesto insistía en su actitud, y anunciaba el jueves 15 de marzo a esta redacción su intención de seguir adelante con la demanda contra la Junta. «El Ayuntamiento no es el alcalde —explicaba—. Llevaré a Pleno una moción para que la Corporación autorice exigir a la Junta el cumplimiento de la 2ª fase del Convenio para la restauración y rehabilitación de la Máquina de Vapor en los juzgados».

Ante la posibilidad de que, dada la correlación de fuerzas en la Corporación, su moción no prospere, el concejal de Ciudadanos aseguraba que «eso está por ver, pero será una ocasión excepcional para que los diferentes grupos municipales manifiesten si se deben al pueblo de Cuevas o a su partido». No obstante, el asunto de la demanda no es la única causa que amenaza la frágil estabilidad, por no decir ninguna, que vive el pacto de gobierno PSOE-C's.

Al alcalde le parece «bochornoso» que Indalecio Modesto «ande proclamando que no votó contra los presupuestos en el Pleno porque consiguió introducir doce o catorce partidas en él». Antonio Fernández asegura que «es completamente falso. Una mentira de cara a la galería. De hecho, no acudió a ninguna de las reuniones del equipo de gobierno para trabajar en la elaboración de los presupuestos pese a que le invitamos a todas”.
“Sólo una hora antes de que diera comienzo la sesión —añade el regidor— me dijo que tendría que justificar su apoyo a las cuentas y que tendría que decir algo. Esas son sus doce ‘propuestas’. Una mentira. Nunca puso condiciones».

En otro orden de cosas, el portavoz popular, Miguel Caparrós, mostraba su contrariedad ante la decisión de no incluir en el orden del día una moción presentada por su grupo en la que solicitaban más especialistas y mejoras en el Hospital de La Inmaculada y el Área sanitaria Norte de la provincia de Almería, una cuestión «prioritaria y de rabiosa actualidad» según el edil.

«Será de rabiosa actualidad porque así lo quiere el PP —afirma Fernández Liria—. Hay muchas cosas que mejorar en materia de Sanidad en el Hospital de Huércal Overa, como en todos los de Andalucía y del resto de España. Se trata de un problema nacional. Por otra parte, la elaboración del orden del día de los plenos es una competencia del alcalde. Vi oportuno no incluir esa moción en éste, cono tampoco entraron otros, y ya valoraré llevarlo para su debate en el próximo o en el siguiente. Ya lo decidiré yo en el uso de mis atribuciones».


El PGOU mucho más cerca

La Corporación de Cuevas del Almanzora aprobaba en pleno el miércoles 14 de marzo la subsanación de las dos deficiencias que otras tantas delegaciones de la Junta de Andalucía habían observado en su proyecto de Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Se trataba de la exigencia de Cultura de ampliar el catálogo de bienes de interés cultural del municipio, así como la de Medio Ambiente, que impelía al Ayuntamiento a demostrar la suficiencia hídrica para asimilar el crecimiento previsto.

«Las soluciones aportadas ya son conocidas y fueron consensuadas con las delegaciones solicitantes, por lo que entendemos que, una vez transcurran los tiempos de exposición pública y los demás que marca la normativa, en cinco o seis meses será aceptado el PGOU por la Comisión Provincial de Urbanismo y procederemos a su aprobación definitiva», explica el alcalde Antonio Fernández Liria.

El regidor abunda que «ha costado mucho trabajo y sacrificio, pero vamos a terminar con la incertidumbre en que viven muchas familias desde hace 18 años. Se van a regularizar muchas de las viviendas y urbanizaciones construidas durante este tiempo en lugares como Palomares bajo. En otros sitios tendremos que sentarnos con los vecinos para dotar de calles y servicios a sus asentamientos, en cambio, La Romana, donde hay construidas 400 viviendas de las 2.000 que se pretendían levantar, no podrán serlo. Allí no existe ningún tipo de servicios. Ni tan siquiera accesos».