La estacionalidad afecta al turismo almeriense hasta el grado de que, acabado el verano, cierra sus puertas más de medio centenar de hoteles
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| Un grupo de visitantes madrileños se despiden de Mojácar en la puerta del hotel Marina Playa. |
ALMERÍA HOY / 23·11·2017
Los pilares de la economía almeriense son la agricultura y el turismo, dos sectores absolutamente estacionales; el campo 'para' en verano, que es cuando los hoteles hacen su 'agosto' particular. No es una expresión escogida a la ligera, ya que desde el mes de agosto hasta octubre han cerrado sus puertas —casi todos hasta la llegada del verano— 55 establecimientos hoteleros en toda la provincia.
Son datos del Instituto Nacional de Estadística consultados por ALMERÍA HOY y según los cuales, en pleno verano había abiertos 251 establecimientos hoteleros; en octubre, 196. Traducido en número de plazas, se pasó de 42.743 en agosto, a 28.244 el mes pasado.
Lógicamente, ese 'bajón' turístico se refleja también en las cifras de personal empleado. Según el INE, en agosto se contaban 5.458 trabajadores, por los 2.903 de octubre. El mercurio acompaña menos, y el grado de ocupación se resiente. En ese sentido, en agosto era del 75,42%, mientras que en octubre —a pesar de esa notable reducción de plazas— se ha quedado en el 42,67%.
Esas cerca de 15.000 plazas hoteleras que echan el cierre con la llegada del otoño dejan a Almería a la cabeza de las provincias donde más fuerte golpea la estacionalidad turística. Si comparamos con provincias cercanas de 'sol y playa', actualmente en Cádiz o Alicante hay sólo 4.000 plazas menos que en agosto; en Málaga, 2.756; y en Murcia, una diferencia de apenas 2.000 plazas menos.
Son datos del Instituto Nacional de Estadística consultados por ALMERÍA HOY y según los cuales, en pleno verano había abiertos 251 establecimientos hoteleros; en octubre, 196. Traducido en número de plazas, se pasó de 42.743 en agosto, a 28.244 el mes pasado.
Lógicamente, ese 'bajón' turístico se refleja también en las cifras de personal empleado. Según el INE, en agosto se contaban 5.458 trabajadores, por los 2.903 de octubre. El mercurio acompaña menos, y el grado de ocupación se resiente. En ese sentido, en agosto era del 75,42%, mientras que en octubre —a pesar de esa notable reducción de plazas— se ha quedado en el 42,67%.
Esas cerca de 15.000 plazas hoteleras que echan el cierre con la llegada del otoño dejan a Almería a la cabeza de las provincias donde más fuerte golpea la estacionalidad turística. Si comparamos con provincias cercanas de 'sol y playa', actualmente en Cádiz o Alicante hay sólo 4.000 plazas menos que en agosto; en Málaga, 2.756; y en Murcia, una diferencia de apenas 2.000 plazas menos.
