ALMERÍA HOY / 29·10·2025
El Instituto Andaluz del Deporte (IAD), organismo adscrito a la Consejería de Cultura y Deporte, celebró una jornada de gestión deportiva en Almería para conmemorar los 20 años del legado organizativo que dejaron los Juegos Mediterráneos de 2005. Este evento, desarrollado en el Espacio Alma de Almería, reunió a figuras clave del deporte, incluyendo directores de importantes competiciones nacionales e internacionales y destacados deportistas.
Un evento de gestión y reflexión
La presentación de estas jornadas estuvo a cargo del director general de Eventos e Instalaciones Deportivas de la Junta de Andalucía, Gorka Lerchundi, quien estuvo acompañado por relevantes autoridades. Entre ellos se encontraban el presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, el concejal de Ciudad Activa, Movilidad y Deporte del Ayuntamiento de Almería, Antonio Jesús Casimiro, y el vicepresidente de la Diputación Provincial de Almería, José Antonio García. También asistió el delegado territorial de Cultura y Deporte, Juan José Alonso.
Gorka Lerchundi resaltó la trascendencia de "Almería 2005", asegurando que el evento no solo ubicó a la ciudad y a Andalucía en el mapa internacional de la organización de grandes citas deportivas, sino que, dos décadas después, sigue siendo reconocido como uno de los mejores Juegos Mediterráneos jamás celebrados. Subrayó que representó una de las páginas más brillantes en la historia reciente del deporte andaluz, dejando una "huella imborrable" en la región y en la memoria colectiva.
Los mejores juegos de la historia
Por su parte, Alejandro Blanco, presidente del COE, fue enfático al calificar la edición de 2005 como un "acontecimiento excepcional" y los "mejores Juegos Mediterráneos de la historia". Afirmó con rotundidad que "nunca antes nadie los había igualado y después nadie los ha superado", poniendo el evento como ejemplo del potencial del país cuando existe unidad de propósitos y esfuerzo conjunto, destacando que "España es imbatible".
José Antonio García, vicepresidente de la Diputación, fue más allá del aspecto deportivo al recordar que los Juegos de 2005 fueron la "chispa que encendió una profunda transformación" en el panorama deportivo de la provincia. En estos 20 años, se ha presenciado una "auténtica revolución deportiva", que ha permitido a la provincia pasar de un tejido modesto a convertirse en un referente. García destacó que el legado no se limitó a las infraestructuras, sino que también incluyó un 'saber hacer' que ha consolidado a Almería como sede de eventos de alto nivel, logrando una visibilidad nacional e internacional crucial.
Desde el ámbito municipal, Antonio Casimiro coincidió en que "Almería 2005 fue un antes y un después". Señaló tres impactos fundamentales: el impulso a las infraestructuras deportivas, el fortalecimiento de la autoestima de los almerienses y la materialización del lema "Juntos Podemos". Aseguró que el Ayuntamiento mantiene viva esta herencia con nuevos proyectos que seguirán posicionando a la ciudad como un destino de eventos deportivos, mencionando la futura Ciudad del Deporte Ambrosio Sánchez, el Complejo Deportivo de Costacabana y el Centro de Deportes de Arena en El Toyo.
Un legado vivo: Transformación y conocimiento
En 2005, Almería se erigió como la capital mediterránea del deporte, un hito que transformó la ciudad y proyectó a Andalucía globalmente. Dos décadas más tarde, aquel legado perdura, sirviendo como modelo de cómo los grandes acontecimientos deportivos pueden ser motores de desarrollo, cohesión social e identidad colectiva.
Las jornadas conmemorativas del IAD se concibieron como un espacio clave de formación continua, reflexión y encuentro profesional. El programa se centró en conferencias y mesas redondas que, mediante el análisis de la experiencia de Almería 2005, desglosaron las claves de la organización y gestión de grandes eventos.
La lista de participantes incluyó al consejero delegado de los Juegos Mediterráneos Almería 2005, Vicente Añó; directores de federaciones y competiciones como Jorge García (Triatlón), Josep Ponset (Beach Soccer Worldwide) y Aitor Jiménez (Andalucía Bike Race); Jesús García, CEO de RPM Sports Titan World Series; y figuras deportivas de renombre como los ex jugadores internacionales Rafael Pascual y Juan José Salvador (voleibol), y Pedro García Aguado (waterpolo).
Un evento de gestión y reflexión
La presentación de estas jornadas estuvo a cargo del director general de Eventos e Instalaciones Deportivas de la Junta de Andalucía, Gorka Lerchundi, quien estuvo acompañado por relevantes autoridades. Entre ellos se encontraban el presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, el concejal de Ciudad Activa, Movilidad y Deporte del Ayuntamiento de Almería, Antonio Jesús Casimiro, y el vicepresidente de la Diputación Provincial de Almería, José Antonio García. También asistió el delegado territorial de Cultura y Deporte, Juan José Alonso.
Gorka Lerchundi resaltó la trascendencia de "Almería 2005", asegurando que el evento no solo ubicó a la ciudad y a Andalucía en el mapa internacional de la organización de grandes citas deportivas, sino que, dos décadas después, sigue siendo reconocido como uno de los mejores Juegos Mediterráneos jamás celebrados. Subrayó que representó una de las páginas más brillantes en la historia reciente del deporte andaluz, dejando una "huella imborrable" en la región y en la memoria colectiva.
Los mejores juegos de la historia
Por su parte, Alejandro Blanco, presidente del COE, fue enfático al calificar la edición de 2005 como un "acontecimiento excepcional" y los "mejores Juegos Mediterráneos de la historia". Afirmó con rotundidad que "nunca antes nadie los había igualado y después nadie los ha superado", poniendo el evento como ejemplo del potencial del país cuando existe unidad de propósitos y esfuerzo conjunto, destacando que "España es imbatible".
José Antonio García, vicepresidente de la Diputación, fue más allá del aspecto deportivo al recordar que los Juegos de 2005 fueron la "chispa que encendió una profunda transformación" en el panorama deportivo de la provincia. En estos 20 años, se ha presenciado una "auténtica revolución deportiva", que ha permitido a la provincia pasar de un tejido modesto a convertirse en un referente. García destacó que el legado no se limitó a las infraestructuras, sino que también incluyó un 'saber hacer' que ha consolidado a Almería como sede de eventos de alto nivel, logrando una visibilidad nacional e internacional crucial.
Desde el ámbito municipal, Antonio Casimiro coincidió en que "Almería 2005 fue un antes y un después". Señaló tres impactos fundamentales: el impulso a las infraestructuras deportivas, el fortalecimiento de la autoestima de los almerienses y la materialización del lema "Juntos Podemos". Aseguró que el Ayuntamiento mantiene viva esta herencia con nuevos proyectos que seguirán posicionando a la ciudad como un destino de eventos deportivos, mencionando la futura Ciudad del Deporte Ambrosio Sánchez, el Complejo Deportivo de Costacabana y el Centro de Deportes de Arena en El Toyo.
Un legado vivo: Transformación y conocimiento
En 2005, Almería se erigió como la capital mediterránea del deporte, un hito que transformó la ciudad y proyectó a Andalucía globalmente. Dos décadas más tarde, aquel legado perdura, sirviendo como modelo de cómo los grandes acontecimientos deportivos pueden ser motores de desarrollo, cohesión social e identidad colectiva.
Las jornadas conmemorativas del IAD se concibieron como un espacio clave de formación continua, reflexión y encuentro profesional. El programa se centró en conferencias y mesas redondas que, mediante el análisis de la experiencia de Almería 2005, desglosaron las claves de la organización y gestión de grandes eventos.
La lista de participantes incluyó al consejero delegado de los Juegos Mediterráneos Almería 2005, Vicente Añó; directores de federaciones y competiciones como Jorge García (Triatlón), Josep Ponset (Beach Soccer Worldwide) y Aitor Jiménez (Andalucía Bike Race); Jesús García, CEO de RPM Sports Titan World Series; y figuras deportivas de renombre como los ex jugadores internacionales Rafael Pascual y Juan José Salvador (voleibol), y Pedro García Aguado (waterpolo).


