Voladura de la nave de tolvas: un desafío de ingeniería
ALMERÍA HOY / 30·10·2025
Endesa ha completado la espectacular voladura de la nave de tolvas de la central térmica Litoral, situada en Carboneras, un paso decisivo en el desmantelamiento de la planta almeriense. Esta estructura era fundamental, pues albergaba los depósitos en forma de embudo que recibían el carbón del parque de almacenamiento y lo dosificaban para alimentar los grupos de generación. La demolición supuso un reto técnico significativo debido a la particular geometría de la nave, completamente metálica, con una longitud de 180 metros —casi la extensión de dos campos de fútbol— y una altura de 57 metros, equivalente a un edificio de 19 plantas, pero con una estrecha anchura de apenas 21 metros. Para derribar esta estructura de 12.200 toneladas de peso, que se apoyaba sobre 60 pilares, se necesitaron 550 kilos de dinamita repartidos en 140 cargas, activadas por 316 detonadores conectados mediante un único cordón de 100 metros de largo. La estructura fue abatida de forma limpia hacia un lateral, y el evento, que tuvo lugar este jueves 30 de octubre de 2025, marca una de las últimas grandes demoliciones de la central.
Compromiso local y economía circular: residuos cero y donaciones
Tras la caída, las 7.500 toneladas de residuos metálicos generados serán retiradas progresivamente, logrando una valorización que superará el 90%. Esta cifra sitúa el desmantelamiento en la senda del objetivo de "residuo cero" de Endesa, alineado con su compromiso con la economía circular, un principio que ya se ha aplicado con éxito a las más de 100.000 toneladas de materiales tratados anteriormente. Precisamente, una de las iniciativas más destacadas de este enfoque es la donación de elementos que pueden tener una segunda vida útil; en total, se han cedido más de 6.000 artículos a diversas entidades públicas y privadas tanto de Almería como del resto de España, dando un nuevo uso a lo que fue parte de la central durante cuatro décadas. Los trabajos de desmantelamiento están siendo ejecutados por la UTE Lecalde, formada por la empresa local Caldererías Indálicas y la vizcaína Lezama Demoliciones, especialista en demoliciones industriales. Además, Endesa fomenta la actividad económica en la zona, ya que más del 70% de los 140 trabajadores actuales son antiguos contratistas o residentes de Carboneras y su entorno.
El futuro: Plan Futur-e para la reconversión
Una vez finalizado el desmantelamiento mecánico de los restos de la nave de tolvas y del parque de carbón, y se realice el desmontaje de pequeños elementos periféricos, el último paso será el picado y la nivelación de los suelos. Estos terrenos de 297.000 metros cuadrados, que incluyen la terminal portuaria, serán el epicentro de la reconversión económica de la zona a través del Plan Futur-e de Endesa, un concurso internacional que busca proyectos que impulsen el desarrollo sostenible. Las propuestas recibidas se centran en sectores como la economía circular, la acuicultura, los biocombustibles, el turismo y la logística, buscando una transición energética justa para la comarca.
Compromiso local y economía circular: residuos cero y donaciones
Tras la caída, las 7.500 toneladas de residuos metálicos generados serán retiradas progresivamente, logrando una valorización que superará el 90%. Esta cifra sitúa el desmantelamiento en la senda del objetivo de "residuo cero" de Endesa, alineado con su compromiso con la economía circular, un principio que ya se ha aplicado con éxito a las más de 100.000 toneladas de materiales tratados anteriormente. Precisamente, una de las iniciativas más destacadas de este enfoque es la donación de elementos que pueden tener una segunda vida útil; en total, se han cedido más de 6.000 artículos a diversas entidades públicas y privadas tanto de Almería como del resto de España, dando un nuevo uso a lo que fue parte de la central durante cuatro décadas. Los trabajos de desmantelamiento están siendo ejecutados por la UTE Lecalde, formada por la empresa local Caldererías Indálicas y la vizcaína Lezama Demoliciones, especialista en demoliciones industriales. Además, Endesa fomenta la actividad económica en la zona, ya que más del 70% de los 140 trabajadores actuales son antiguos contratistas o residentes de Carboneras y su entorno.
El futuro: Plan Futur-e para la reconversión
Una vez finalizado el desmantelamiento mecánico de los restos de la nave de tolvas y del parque de carbón, y se realice el desmontaje de pequeños elementos periféricos, el último paso será el picado y la nivelación de los suelos. Estos terrenos de 297.000 metros cuadrados, que incluyen la terminal portuaria, serán el epicentro de la reconversión económica de la zona a través del Plan Futur-e de Endesa, un concurso internacional que busca proyectos que impulsen el desarrollo sostenible. Las propuestas recibidas se centran en sectores como la economía circular, la acuicultura, los biocombustibles, el turismo y la logística, buscando una transición energética justa para la comarca.
