Así respondía el Gobierno a preguntas interpuestas por el PP, aunque la planta se encuentra “en servicio”
ALMERÍA HOY / 01·07·2025
La desaladora de Carboneras se prepara para un periodo de dos años de intensas obras de reparación y modernización, según ha confirmado el Gobierno en respuesta a consultas parlamentarias del Partido Popular. Estos trabajos, que buscan subsanar deficiencias detectadas y optimizar el rendimiento de la planta, incluyen la renovación de los bastidores y la sustitución completa de los tubos de presión, elementos que han presentado hasta tres averías en el último año.
El mantenimiento de la desaladora, operada por Acuamed, ha visto un incremento de 4,3 millones de euros debido a estas reparaciones urgentes. A pesar de estas necesidades, el Ejecutivo ha asegurado que la planta se mantiene "en servicio", aunque actualmente opera con diez de sus doce líneas de producción, generando poco más de 100.000 metros cúbicos de agua al día.
Además de las reparaciones estructurales, un pilar fundamental de este proyecto es la implementación de un nuevo sistema de eficiencia energética. Esta mejora contempla la sustitución de las turbo-bombas existentes por intercambiadores de presión, una tecnología que promete optimizar el consumo energético de la planta, una de las más antiguas en funcionamiento bajo la gestión de Acuamed.
Paralelamente a estas intervenciones, se está gestionando la adjudicación del contrato para el suministro de los nuevos tubos de presión. La coordinación de estas obras con la producción de agua desalada es un desafío clave, ya que es fundamental garantizar el suministro a los usuarios durante todo el proceso.
El Gobierno ha señalado que la transformación de la desaladora se llevará a cabo mediante "paradas parciales", lo que inevitablemente reducirá temporalmente la producción nominal de la planta. Sin embargo, han enfatizado que estas interrupciones se han programado con la garantía de que la planta potabilizadora de Cuevas del Almanzora está operando a plena capacidad, supliendo parte de la demanda de agua de las poblaciones del Levante almeriense y asegurando así el abastecimiento continuo.
El mantenimiento de la desaladora, operada por Acuamed, ha visto un incremento de 4,3 millones de euros debido a estas reparaciones urgentes. A pesar de estas necesidades, el Ejecutivo ha asegurado que la planta se mantiene "en servicio", aunque actualmente opera con diez de sus doce líneas de producción, generando poco más de 100.000 metros cúbicos de agua al día.
Además de las reparaciones estructurales, un pilar fundamental de este proyecto es la implementación de un nuevo sistema de eficiencia energética. Esta mejora contempla la sustitución de las turbo-bombas existentes por intercambiadores de presión, una tecnología que promete optimizar el consumo energético de la planta, una de las más antiguas en funcionamiento bajo la gestión de Acuamed.
Paralelamente a estas intervenciones, se está gestionando la adjudicación del contrato para el suministro de los nuevos tubos de presión. La coordinación de estas obras con la producción de agua desalada es un desafío clave, ya que es fundamental garantizar el suministro a los usuarios durante todo el proceso.
El Gobierno ha señalado que la transformación de la desaladora se llevará a cabo mediante "paradas parciales", lo que inevitablemente reducirá temporalmente la producción nominal de la planta. Sin embargo, han enfatizado que estas interrupciones se han programado con la garantía de que la planta potabilizadora de Cuevas del Almanzora está operando a plena capacidad, supliendo parte de la demanda de agua de las poblaciones del Levante almeriense y asegurando así el abastecimiento continuo.