Europa avala el sistema de control de antibióticos Presvet cuestionado por los veterinarios
ALMERÍA HOY / 11·06·2025
La Comisión Europea ha respaldado el sistema español de control de antibióticos, Presvet, una herramienta que ha generado un profundo desacuerdo entre el colectivo veterinario. Mientras el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) celebra el aval de Bruselas, los veterinarios claman contra una normativa que, a su juicio, coarta su capacidad de trabajo y no se adapta a la realidad de la medicina de animales de compañía.
Según el MAPA, la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria de la Comisión Europea, tras una auditoría realizada entre el 6 y el 17 de marzo, concluyó que España contribuye a un uso más prudente de los antimicrobianos, cumpliendo con los requisitos del reglamento sobre medicamentos veterinarios. En este sentido, el Real Decreto 666/23, que regula la prescripción de medicamentos para animales, es considerado por el ministerio como una transposición de una normativa comunitaria de obligado cumplimiento, cuyo objetivo es promover un uso prudente de antibióticos y luchar contra la resistencia antimicrobiana, preservando la sanidad animal y humana.
La auditoría destaca que los antimicrobianos solo se prescriben tras un examen clínico o una evaluación adecuada del estado de salud del animal, y que su uso se ajusta a los requisitos nacionales adicionales. Además, el informe de Bruselas valida el sistema Presvet, que obliga a los veterinarios a comunicar los antibióticos que prescriben, facilitando así el control y permitiendo verificar las prescripciones, tratamientos y cantidades de antimicrobianos aplicados.
LA VISIÓN DE LOS VETERINARIOS: “EL MINISTERIO SIGUE SIN OÍRNOS”
A pesar del respaldo europeo, el sentir entre los profesionales veterinarios es de descontento. Yasmina Domínguez, Presidenta del Colegio de Veterinarios de Almería, ha expresado en una entrevista en RADIO ACTUALIDAD, que la normativa los trata "como un colectivo infantil y el ministro Planas sigue sin oírnos". Domínguez subraya que los veterinarios trabajan con un alto nivel de control y exigencia, adaptándose continuamente a las necesidades de la medicina veterinaria. Sin embargo, considera que el Real Decreto 666/2023 "coarta nuestra actividad para poder prescribir y tratar a los animales conforme a la Ciencia, no a lo que indica el prospecto que está anticuado en muchos de los medicamentos".
La principal crítica radica en la aplicación del sistema Presvet para los animales de compañía. Aunque los veterinarios de ganaderías ya lo utilizan y se han adaptado, Domínguez explica que no es comparable. En las ganaderías, un tratamiento único puede aplicarse a cientos de cabezas de ganado. En contraste, en una clínica de animales de compañía, la notificación a Presvet debe ser individualizada para cada animal y cada tratamiento, lo que representa una carga administrativa ingente dada la diversidad de especies que atienden diariamente.
IMPORTANCIA DE LA SALUD PÚBLICA, GASTO INNECESARIO Y UNIDAD DE LOS VETERINARIOS
La presidenta del Colegio de Veterinarios de Almería hace hincapié en la creciente importancia de las mascotas en los hogares, a las que se les brinda una atención médica cada vez más sofisticada. Perros, gatos, loros y hurones, entre otros, son hoy parte fundamental de la familia, y su salud tiene un impacto directo en la salud pública. La medicina preventiva en animales de compañía, con vacunas y tratamientos contra enfermedades como la leishmaniosis, no solo cuida a las mascotas, sino que también protege a sus familias.
Domínguez reitera que los tratamientos con antibióticos deben basarse en la evidencia científica actual, no en prospectos desactualizados. Además, la normativa actual genera un gasto inútil para los dueños de los animales, que se ven obligados a comprar cajas enteras de medicamentos cuando antes el veterinario podía dispensar la cantidad justa.
Ante esta situación, y por primera vez, todos los presidentes de los Colegios de Veterinarios de España se han unido con un objetivo común: lograr la derogación del Real Decreto 666/2023 o, al menos, las modificaciones pertinentes que permitan a los profesionales ejercer su labor de manera más eficiente y acorde con las necesidades actuales de la medicina veterinaria.
Según el MAPA, la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria de la Comisión Europea, tras una auditoría realizada entre el 6 y el 17 de marzo, concluyó que España contribuye a un uso más prudente de los antimicrobianos, cumpliendo con los requisitos del reglamento sobre medicamentos veterinarios. En este sentido, el Real Decreto 666/23, que regula la prescripción de medicamentos para animales, es considerado por el ministerio como una transposición de una normativa comunitaria de obligado cumplimiento, cuyo objetivo es promover un uso prudente de antibióticos y luchar contra la resistencia antimicrobiana, preservando la sanidad animal y humana.
La auditoría destaca que los antimicrobianos solo se prescriben tras un examen clínico o una evaluación adecuada del estado de salud del animal, y que su uso se ajusta a los requisitos nacionales adicionales. Además, el informe de Bruselas valida el sistema Presvet, que obliga a los veterinarios a comunicar los antibióticos que prescriben, facilitando así el control y permitiendo verificar las prescripciones, tratamientos y cantidades de antimicrobianos aplicados.
LA VISIÓN DE LOS VETERINARIOS: “EL MINISTERIO SIGUE SIN OÍRNOS”
A pesar del respaldo europeo, el sentir entre los profesionales veterinarios es de descontento. Yasmina Domínguez, Presidenta del Colegio de Veterinarios de Almería, ha expresado en una entrevista en RADIO ACTUALIDAD, que la normativa los trata "como un colectivo infantil y el ministro Planas sigue sin oírnos". Domínguez subraya que los veterinarios trabajan con un alto nivel de control y exigencia, adaptándose continuamente a las necesidades de la medicina veterinaria. Sin embargo, considera que el Real Decreto 666/2023 "coarta nuestra actividad para poder prescribir y tratar a los animales conforme a la Ciencia, no a lo que indica el prospecto que está anticuado en muchos de los medicamentos".
La principal crítica radica en la aplicación del sistema Presvet para los animales de compañía. Aunque los veterinarios de ganaderías ya lo utilizan y se han adaptado, Domínguez explica que no es comparable. En las ganaderías, un tratamiento único puede aplicarse a cientos de cabezas de ganado. En contraste, en una clínica de animales de compañía, la notificación a Presvet debe ser individualizada para cada animal y cada tratamiento, lo que representa una carga administrativa ingente dada la diversidad de especies que atienden diariamente.
IMPORTANCIA DE LA SALUD PÚBLICA, GASTO INNECESARIO Y UNIDAD DE LOS VETERINARIOS
La presidenta del Colegio de Veterinarios de Almería hace hincapié en la creciente importancia de las mascotas en los hogares, a las que se les brinda una atención médica cada vez más sofisticada. Perros, gatos, loros y hurones, entre otros, son hoy parte fundamental de la familia, y su salud tiene un impacto directo en la salud pública. La medicina preventiva en animales de compañía, con vacunas y tratamientos contra enfermedades como la leishmaniosis, no solo cuida a las mascotas, sino que también protege a sus familias.
Domínguez reitera que los tratamientos con antibióticos deben basarse en la evidencia científica actual, no en prospectos desactualizados. Además, la normativa actual genera un gasto inútil para los dueños de los animales, que se ven obligados a comprar cajas enteras de medicamentos cuando antes el veterinario podía dispensar la cantidad justa.
Ante esta situación, y por primera vez, todos los presidentes de los Colegios de Veterinarios de España se han unido con un objetivo común: lograr la derogación del Real Decreto 666/2023 o, al menos, las modificaciones pertinentes que permitan a los profesionales ejercer su labor de manera más eficiente y acorde con las necesidades actuales de la medicina veterinaria.