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| Cabo de Gata (archivo) |
ALMERÍA HOY / 02·05·2025
Un agente del servicio Cinológico de El Pardo (Madrid), que disfrutaba de su día libre con su familia, se lanzó al mar con aletas y gafas para salvar a un hombre de 36 años que luchaba contra las fuertes corrientes a 250 metros de la orilla.
El guardia civil destinado en Madrid protagonizó el pasado 1 de mayo un heroico rescate en Cabo de Gata, evitando una posible tragedia. Se encontraba de descanso junto a su familia alrededor de las 19:00 horas y no dudó en lanzarse al mar para auxiliar a un hombre de 36 años que se estaba ahogando.
La alerta llegó de un residente local que avisó al guardia civil de la desesperada situación del bañista. A pesar de la caída del sol y las condiciones marítimas adversas, con fuertes rachas de viento y oleaje, el agente logró divisar al afectado a unos 250 metros de la costa. El hombre se encontraba de espaldas y agitaba sus manos en un intento desesperado por alcanzar la orilla.
Sin perder un instante, el agente se equipó con aletas y gafas de buceo y se adentró en el mar. Tras una intensa travesía de diez minutos, consiguió alcanzar al bañista exhausto. Con gran esfuerzo, logró llevarlo a la orilla, donde el hombre presentaba mareos y dificultades respiratorias debido al cansancio y la ingesta de agua.
El guardia le proporcionó agua y se aseguró de su recuperación antes de acompañarlo a recoger sus pertenencias y trasladarlo hasta su vehículo.
Durante el trayecto, se cruzaron con una mujer que informó de haber contactado con Salvamento Marítimo para alertar de la emergencia. Ante esta comunicación, el guardia civil se puso en contacto con la entidad para informar del rescate y anular el operativo de búsqueda que ya se había puesto en marcha.
Este acto de valentía y rápida actuación por parte del agente fuera de servicio fue crucial para salvar la vida del bañista en las peligrosas aguas de Cabo de Gata.
El guardia civil destinado en Madrid protagonizó el pasado 1 de mayo un heroico rescate en Cabo de Gata, evitando una posible tragedia. Se encontraba de descanso junto a su familia alrededor de las 19:00 horas y no dudó en lanzarse al mar para auxiliar a un hombre de 36 años que se estaba ahogando.
La alerta llegó de un residente local que avisó al guardia civil de la desesperada situación del bañista. A pesar de la caída del sol y las condiciones marítimas adversas, con fuertes rachas de viento y oleaje, el agente logró divisar al afectado a unos 250 metros de la costa. El hombre se encontraba de espaldas y agitaba sus manos en un intento desesperado por alcanzar la orilla.
Sin perder un instante, el agente se equipó con aletas y gafas de buceo y se adentró en el mar. Tras una intensa travesía de diez minutos, consiguió alcanzar al bañista exhausto. Con gran esfuerzo, logró llevarlo a la orilla, donde el hombre presentaba mareos y dificultades respiratorias debido al cansancio y la ingesta de agua.
El guardia le proporcionó agua y se aseguró de su recuperación antes de acompañarlo a recoger sus pertenencias y trasladarlo hasta su vehículo.
Durante el trayecto, se cruzaron con una mujer que informó de haber contactado con Salvamento Marítimo para alertar de la emergencia. Ante esta comunicación, el guardia civil se puso en contacto con la entidad para informar del rescate y anular el operativo de búsqueda que ya se había puesto en marcha.
Este acto de valentía y rápida actuación por parte del agente fuera de servicio fue crucial para salvar la vida del bañista en las peligrosas aguas de Cabo de Gata.
