Lo ha hecho el ministro de Presidencia. La planta quedó inservible durante la riada del 28 de septiembre de 2012
ALMERÍA HOY / 03·08·2023
El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha defendido esta mañana en Cuevas del Almanzora las inversiones del Gobierno de España en materia hídrica.
Bolaños ha resaltado la intención del Ejecutivo Central de evitar que "la sequía se cronifique" y “garantizar agua de boca y de riego para todos los ciudadanos de nuestro país”. En ese sentido, y entre otros asuntos, ha anunciado que se va a “iniciar muy pronto” la “reparación” de la desaladora del Bajo Almanzora, inservible desde la riada del 28 de septiembre de 2012, antes de entrar en servicio, por haber sido construida en zona inundable.
Desde entonces han transcurrido casi once años, y las últimas noticias refieren nuevos retrasos en su reparación.
Así, la detección en abril de varias grietas no previstas, provocó la prolongación de cinco meses en los plazos de ejecución de las obras, para poder incluir su arreglo en el proyecto.
Más recientemente, la falta de valoración económica de una parte de los trabajos que se están realizando en el encauzamiento de la rambla de Canalejas con el fin de evitar nuevas inundaciones, como la que afectó a la planta el pasado 23 de mayo, ha obligado a aplazar cuatro meses más la puesta en servicio de la desaladora -que los regantes de la zona llaman de la “vergüenza”- para modificar el proyecto. Significa que, como muy pronto, no comenzará a producir agua desalada hasta diciembre de 2024, y sólo 5 Hm3/año, pues no cuenta con una dotación de energía eléctrica suficiente para asegurar su pleno funcionamiento.
Bolaños ha resaltado la intención del Ejecutivo Central de evitar que "la sequía se cronifique" y “garantizar agua de boca y de riego para todos los ciudadanos de nuestro país”. En ese sentido, y entre otros asuntos, ha anunciado que se va a “iniciar muy pronto” la “reparación” de la desaladora del Bajo Almanzora, inservible desde la riada del 28 de septiembre de 2012, antes de entrar en servicio, por haber sido construida en zona inundable.
Desde entonces han transcurrido casi once años, y las últimas noticias refieren nuevos retrasos en su reparación.
Así, la detección en abril de varias grietas no previstas, provocó la prolongación de cinco meses en los plazos de ejecución de las obras, para poder incluir su arreglo en el proyecto.
Más recientemente, la falta de valoración económica de una parte de los trabajos que se están realizando en el encauzamiento de la rambla de Canalejas con el fin de evitar nuevas inundaciones, como la que afectó a la planta el pasado 23 de mayo, ha obligado a aplazar cuatro meses más la puesta en servicio de la desaladora -que los regantes de la zona llaman de la “vergüenza”- para modificar el proyecto. Significa que, como muy pronto, no comenzará a producir agua desalada hasta diciembre de 2024, y sólo 5 Hm3/año, pues no cuenta con una dotación de energía eléctrica suficiente para asegurar su pleno funcionamiento.
