Martirio Godoy abrió una “información reservada” en lugar de un expediente para que los cinco forestales denunciados por reiterado absentismo laboral no tuvieran la condición de “expedientados”
ALMERÍA HOY / 10·03·2021
La secretaria general de la Delegación de Desarrollo Sostenible en Almería, Martirio Godoy, y el coordinador provincial de los agentes de Medio Ambiente, Juan José Alesina, han cesado en los cargos que desempeñaban.
Estos hechos se producen un año y medio después de que un forestal de la Unidad de Medio Ambiente que opera en el Levante de la provincia denunciara ante la Delegación y la Consejería a sus cinco compañeros por presunto absentismo laboral reiterado, así como por otra serie de irregularidades, como el uso privado de los vehículos de trabajo, con los que realizaban desplazamientos distantes. En el caso del coordinador adjunto comarcal, Ignacio de la Torre, hasta su segunda residencia en el barrio de El Zapillo, en la capital de la provincia, a más de cien kilómetros de la base de la Unidad.
Tras la denuncia, un año y medio después no llegó a ser abierto expediente, a pesar de que la propia secretaria general admitía que las pruebas aportadas -entre ellas 115 vídeos- demostraban la existencia de "puntos de mejora". Martirio Godoy optó por otro procedimiento denominado "información reservada" con el fin de no señalar a los denunciados como "expedientados", según ella misma admitía en su informe.
Uno de esos "puntos de mejora" debe ser, a todas luces, el presunto absentismo denunciado. De hecho, el 1 de febrero se implantaron a modo de prueba dos localizadores en los teléfonos de trabajo del coordinador de Cabo de Gata y del adjunto del Levante, Ignacio de la Torre, uno de los supuestos absentistas. Juan José Alesina, el coordinador provincial cesante, era el encargado de controlar el cumplimiento del horario.
Estos hechos se producen un año y medio después de que un forestal de la Unidad de Medio Ambiente que opera en el Levante de la provincia denunciara ante la Delegación y la Consejería a sus cinco compañeros por presunto absentismo laboral reiterado, así como por otra serie de irregularidades, como el uso privado de los vehículos de trabajo, con los que realizaban desplazamientos distantes. En el caso del coordinador adjunto comarcal, Ignacio de la Torre, hasta su segunda residencia en el barrio de El Zapillo, en la capital de la provincia, a más de cien kilómetros de la base de la Unidad.
Tras la denuncia, un año y medio después no llegó a ser abierto expediente, a pesar de que la propia secretaria general admitía que las pruebas aportadas -entre ellas 115 vídeos- demostraban la existencia de "puntos de mejora". Martirio Godoy optó por otro procedimiento denominado "información reservada" con el fin de no señalar a los denunciados como "expedientados", según ella misma admitía en su informe.
Uno de esos "puntos de mejora" debe ser, a todas luces, el presunto absentismo denunciado. De hecho, el 1 de febrero se implantaron a modo de prueba dos localizadores en los teléfonos de trabajo del coordinador de Cabo de Gata y del adjunto del Levante, Ignacio de la Torre, uno de los supuestos absentistas. Juan José Alesina, el coordinador provincial cesante, era el encargado de controlar el cumplimiento del horario.