El concejal socialista avisa de que faltan 40 trabajadores sociales para poder llevarlo a cabo
ALMERÍA HOY / 25·04·2018
El concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Almería, Manuel Vallejo, ha advertido al alcalde de que el I Plan de Servicios Sociales 2018-2022 que se pretende poner en marcha «nacerá herido de muerte» si no va acompañado de una memoria económica que garantice la financiación de los programas contemplados para atender a los almerienses que más lo necesitan y si no se atiende la necesidad de incrementar los recursos humanos dedicados a estas tareas ya que, en estos momentos, los equipos profesionales tienen un importante déficit tanto de trabajadores sociales como de psicólogos, educadores sociales, animadores socioculturales o personal administrativo.
Los socialistas han subrayado que a lo que aspiran es «a que el nuevo plan de servicios sociales sea un revulsivo que acabe con el lamentable abandono en el que estos llevan inmersos desde que gobierna el Partido Popular». Pero para conseguirlo, y así lo han trasladado al equipo de gobierno en un documento con aportaciones al borrador del documento, se requiere de manera indispensable que se garantice la financiación de las actuaciones reflejadas, que se aumente el número de diferentes perfiles profesionales en los servicios sociales y, en tercer lugar, que se constituya una comisión de seguimiento que asegure el efectivo cumplimiento del plan y la adaptación del mismo a las nuevas realidades sociales o económicas que puedan aparecer durante los años para los que se proyecta.
Vallejo, que ha encontrado el apoyo a las peticiones de su grupo en el Colegio de Trabajadores Sociales, ha explicado que la nueva hoja de ruta contempla el mantenimiento de una serie de prestaciones, de carácter tanto económico como técnico, que «tienen que asegurarse con un buena y suficiente financiación». De lo contrario, si no cuenta con una memoria económica que cumpla esa premisa, ha alertado de que «esta iniciativa quedará en papel mojado», como sucede con otros planes sectoriales aprobados en el área de servicios sociales.
En ese sentido, ha recordado que desde el Grupo Socialista se ha venido denunciando «la deficiente situación presupuestaria en la que mantiene el alcalde los servicios sociales» año tras año. «Por eso entendemos que, llegados a este punto, el nuevo plan tendría que contar con el compromiso de un marco presupuestario que posibilite realmente su estabilidad a lo largo del tiempo y que sea independiente de la evolución del soporte financiero con el que se pueda contribuir desde la comunidad autónoma o desde el Gobierno de España», ha remarcado.
Se necesitan 40 trabajadores sociales
Por otro lado, desde el PSOE han puesto el acento en la necesidad de que el gobierno municipal «dote a los servicios sociales comunitarios de los recursos humanos y materiales adecuados para que se pueda ejecutar el plan realmente». «¿De qué vale tener directrices de trabajo a seguir cuando no hay quién las pueda seguir?», se ha preguntado Vallejo para visualizar la coyuntura actual de los servicios.
Y es que, según las indicaciones del Consejo General del Trabajo Social sobre la ratio ideal de profesionales para atender a aquellos ciudadanos con más necesidades, en el Ayuntamiento de Almería existe un déficit de más de 40 trabajadores sociales. A eso se suma que los equipos también son insuficientes en cuanto a psicólogos, educadores sociales, animadores socioculturales o auxiliares administrativos.
Con una plantilla «que sufre una escandalosa y preocupante situación para poder atender a una población cercana a los 200.000 habitantes», el concejal socialista echa en falta «que en el diseño del I Plan de Servicios Sociales se contemple la dotación suficiente de los equipos profesionales, para que estos puedan afrontar de una forma adecuada las funciones y las tareas que deben cumplir».
Medir el grado de cumplimiento
El tercero de los asuntos reclamados por el PSOE para el plan pasa por la creación de una comisión de seguimiento del mismo, que «no se ha previsto en la información facilitada por el gobierno municipal». Manuel Vallejo ha explicado la importancia de contar con un instrumento «que tiene que permitir realizar una evaluación y seguimiento del grado de cumplimiento de un plan que, lógicamente, se tendrá que ir adaptando a las nuevas circunstancias sociales o económicas que surjan y tendrá que ir corrigiéndose en aquellas cuestiones que se tengan que mejorar».
Para poder realizar un seguimiento adecuado y subsanar errores detectados, ha concluido, es pertinente «la recogida sistemática de información» por parte de los servicios sociales. «No se trata de descubrir nada nuevo, sino de utilizar bases de datos que ya existen, pero que a día de hoy resulta casi imposible de alimentar debido a la falta de personal administrativo y de material informático adecuado», ha concluido.
Los socialistas han subrayado que a lo que aspiran es «a que el nuevo plan de servicios sociales sea un revulsivo que acabe con el lamentable abandono en el que estos llevan inmersos desde que gobierna el Partido Popular». Pero para conseguirlo, y así lo han trasladado al equipo de gobierno en un documento con aportaciones al borrador del documento, se requiere de manera indispensable que se garantice la financiación de las actuaciones reflejadas, que se aumente el número de diferentes perfiles profesionales en los servicios sociales y, en tercer lugar, que se constituya una comisión de seguimiento que asegure el efectivo cumplimiento del plan y la adaptación del mismo a las nuevas realidades sociales o económicas que puedan aparecer durante los años para los que se proyecta.
Vallejo, que ha encontrado el apoyo a las peticiones de su grupo en el Colegio de Trabajadores Sociales, ha explicado que la nueva hoja de ruta contempla el mantenimiento de una serie de prestaciones, de carácter tanto económico como técnico, que «tienen que asegurarse con un buena y suficiente financiación». De lo contrario, si no cuenta con una memoria económica que cumpla esa premisa, ha alertado de que «esta iniciativa quedará en papel mojado», como sucede con otros planes sectoriales aprobados en el área de servicios sociales.
En ese sentido, ha recordado que desde el Grupo Socialista se ha venido denunciando «la deficiente situación presupuestaria en la que mantiene el alcalde los servicios sociales» año tras año. «Por eso entendemos que, llegados a este punto, el nuevo plan tendría que contar con el compromiso de un marco presupuestario que posibilite realmente su estabilidad a lo largo del tiempo y que sea independiente de la evolución del soporte financiero con el que se pueda contribuir desde la comunidad autónoma o desde el Gobierno de España», ha remarcado.
Se necesitan 40 trabajadores sociales
Por otro lado, desde el PSOE han puesto el acento en la necesidad de que el gobierno municipal «dote a los servicios sociales comunitarios de los recursos humanos y materiales adecuados para que se pueda ejecutar el plan realmente». «¿De qué vale tener directrices de trabajo a seguir cuando no hay quién las pueda seguir?», se ha preguntado Vallejo para visualizar la coyuntura actual de los servicios.
Y es que, según las indicaciones del Consejo General del Trabajo Social sobre la ratio ideal de profesionales para atender a aquellos ciudadanos con más necesidades, en el Ayuntamiento de Almería existe un déficit de más de 40 trabajadores sociales. A eso se suma que los equipos también son insuficientes en cuanto a psicólogos, educadores sociales, animadores socioculturales o auxiliares administrativos.
Con una plantilla «que sufre una escandalosa y preocupante situación para poder atender a una población cercana a los 200.000 habitantes», el concejal socialista echa en falta «que en el diseño del I Plan de Servicios Sociales se contemple la dotación suficiente de los equipos profesionales, para que estos puedan afrontar de una forma adecuada las funciones y las tareas que deben cumplir».
Medir el grado de cumplimiento
El tercero de los asuntos reclamados por el PSOE para el plan pasa por la creación de una comisión de seguimiento del mismo, que «no se ha previsto en la información facilitada por el gobierno municipal». Manuel Vallejo ha explicado la importancia de contar con un instrumento «que tiene que permitir realizar una evaluación y seguimiento del grado de cumplimiento de un plan que, lógicamente, se tendrá que ir adaptando a las nuevas circunstancias sociales o económicas que surjan y tendrá que ir corrigiéndose en aquellas cuestiones que se tengan que mejorar».
Para poder realizar un seguimiento adecuado y subsanar errores detectados, ha concluido, es pertinente «la recogida sistemática de información» por parte de los servicios sociales. «No se trata de descubrir nada nuevo, sino de utilizar bases de datos que ya existen, pero que a día de hoy resulta casi imposible de alimentar debido a la falta de personal administrativo y de material informático adecuado», ha concluido.