Destacan la regulación de la pesca deportiva/recreativa, así como diferentes recomendaciones para el arrastre de fondo y el cerco con jareta
Pescador descarga las capturas a su llegada al puerto de Garrucha. |
ALMERÍA HOY / 31·08·2017
La orden del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente que regulará la pesca en el Mediterráneo tendrá finalmente en cuenta las singularidades propias de las flotas de cerco y arrastre andaluzas, tal y como venían reclamando la Junta de Andalucía y el propio sector.
Así ha quedado de manifiesto en la reunión mantenida en Almería, en la que el Gobierno central ha transmitido que acepta las reivindicaciones y que las incluirá en el documento, de manera que se permitirá que la flota de cerco realice dos descargas de capturas (con un tope de 4.500 kilos por barco y día) como históricamente ha venido haciendo, frente a la postura inicial del Ministerio de imponer una única descarga. Asimismo, para la flota de arrastre se eliminará la división que se había establecido en función de si se pesca gamba roja o peces, cuando los barcos andaluces se dedican indistintamente a ambas, de ahí que para Andalucía no fuese aceptable que hubiese dos tipos de pesquería en una misma modalidad o dos tipos de bolsa de trabajo.
La directora general de Pesca y Acuicultura de la Junta, Margarita Pérez, ha expresado su satisfacción después de que el Gobierno haya rectificado su posición inicial para atender las peticiones hechas desde Andalucía. Pérez, que ha recordado que la postura andaluza había fijado como irrenunciables estas dos líneas rojas, ha agradecido la «sensibilidad» del Ministerio al atender unas reclamaciones que ahora deben plasmarse en la orden ministerial.
La reunión, celebrada en la Subdelegación del Gobierno en Almería y que ha presidido el subdirector general de Caladero Nacional, Aguas Comunitarias y Acuicultura del Ministerio, Rafael Centenera, ha servido para continuar avanzando en la negociación para consensuar el proyecto de orden de gestión para la pesca sostenible en el Mediterráneo que el Gobierno central ha elaborado para remitir ahora a la Unión Europea. Al margen de ambas administraciones, en el encuentro han estado presentes los representantes del sector pesquero que faena en el Mediterráneo andaluz, al que Margarita Pérez ha agradecido «su apoyo a la Junta», lo que ha permitido mantener un frente común desde Andalucía que ha propiciado este acuerdo final.
Las propuestas andaluzas se incluyeron en el modelo de gestión que, consensuado con todo el sector pesquero, la Consejería elaboró y remitió al Ministerio tras un año de trabajo, un documento con claves para mejorar la gestión de la pesca en este mar teniendo en cuenta las características propias de zonas concretas. Este plan de gestión propuesto por Andalucía para las pesquerías de arrastre, cerco y artes menores del Mediterráneo contempla la delicada situación de las poblaciones de peces explotadas en este caladero, de manera que recoge una serie de medidas que, a partir de las singularidades de la pesca en Andalucía, han tenido por objetivo adelantarse e influir en cualquier decisión que tome tanto el Gobierno central como la Comisión Europea.
Entre las medidas de gestión de carácter general que incluye el documento aportado por Andalucía, destacan la regulación de la pesca deportiva/recreativa, así como diferentes recomendaciones para el arrastre de fondo y el cerco con jareta. En el primer caso, se propone limitar el esfuerzo pesquero a un máximo de 210 días de actividad al año (manteniendo las excepciones vigentes); establecer una veda en junio sobre fondos inferiores a 60 metros en la provincia de Almería; la utilización de mallas de red de mayor grosor (torzal de cinco milímetros); y la reducción horaria en los meses de enero, febrero y marzo en Almería.
Para la modalidad de cerco con jareta, habría un tope de capturas para la sardina de 4.500 kilos por día y barco, lo que supone una reducción del 10% respecto al límite actual. Asimismo, se incluye entre las especies autorizadas el 'pescado de paso' y se reduce el tiempo de pesca en determinados meses según la modalidad y provincia.
En cuanto a medidas específicas, el documento incluye vedas temporales para arrastre y cerco y vedas espacio-temporales en zonas de alevinaje para estas modalidades de las tres provincias andaluzas del Mediterráneo, así como la realización de estudios científicos para el establecimiento de áreas de desove y alevinaje de determinadas especies y de impacto socieconómico de la puesta en funcionamiento de dichas áreas. Asimismo, se contempla la mejora de zonas de arrecifes y franja costera para la protección de los recursos pesqueros del litoral, además de la elaboración de estudios sanitarios para las zonas de pesca.
En el litoral mediterráneo andaluz faenan en la actualidad 90 barcos de arrastre con 450 tripulantes, mientras que la flota de cerco consta de un total de 75 embarcaciones con 830 tripulantes.
Así ha quedado de manifiesto en la reunión mantenida en Almería, en la que el Gobierno central ha transmitido que acepta las reivindicaciones y que las incluirá en el documento, de manera que se permitirá que la flota de cerco realice dos descargas de capturas (con un tope de 4.500 kilos por barco y día) como históricamente ha venido haciendo, frente a la postura inicial del Ministerio de imponer una única descarga. Asimismo, para la flota de arrastre se eliminará la división que se había establecido en función de si se pesca gamba roja o peces, cuando los barcos andaluces se dedican indistintamente a ambas, de ahí que para Andalucía no fuese aceptable que hubiese dos tipos de pesquería en una misma modalidad o dos tipos de bolsa de trabajo.
La directora general de Pesca y Acuicultura de la Junta, Margarita Pérez, ha expresado su satisfacción después de que el Gobierno haya rectificado su posición inicial para atender las peticiones hechas desde Andalucía. Pérez, que ha recordado que la postura andaluza había fijado como irrenunciables estas dos líneas rojas, ha agradecido la «sensibilidad» del Ministerio al atender unas reclamaciones que ahora deben plasmarse en la orden ministerial.
La reunión, celebrada en la Subdelegación del Gobierno en Almería y que ha presidido el subdirector general de Caladero Nacional, Aguas Comunitarias y Acuicultura del Ministerio, Rafael Centenera, ha servido para continuar avanzando en la negociación para consensuar el proyecto de orden de gestión para la pesca sostenible en el Mediterráneo que el Gobierno central ha elaborado para remitir ahora a la Unión Europea. Al margen de ambas administraciones, en el encuentro han estado presentes los representantes del sector pesquero que faena en el Mediterráneo andaluz, al que Margarita Pérez ha agradecido «su apoyo a la Junta», lo que ha permitido mantener un frente común desde Andalucía que ha propiciado este acuerdo final.
Las propuestas andaluzas se incluyeron en el modelo de gestión que, consensuado con todo el sector pesquero, la Consejería elaboró y remitió al Ministerio tras un año de trabajo, un documento con claves para mejorar la gestión de la pesca en este mar teniendo en cuenta las características propias de zonas concretas. Este plan de gestión propuesto por Andalucía para las pesquerías de arrastre, cerco y artes menores del Mediterráneo contempla la delicada situación de las poblaciones de peces explotadas en este caladero, de manera que recoge una serie de medidas que, a partir de las singularidades de la pesca en Andalucía, han tenido por objetivo adelantarse e influir en cualquier decisión que tome tanto el Gobierno central como la Comisión Europea.
Entre las medidas de gestión de carácter general que incluye el documento aportado por Andalucía, destacan la regulación de la pesca deportiva/recreativa, así como diferentes recomendaciones para el arrastre de fondo y el cerco con jareta. En el primer caso, se propone limitar el esfuerzo pesquero a un máximo de 210 días de actividad al año (manteniendo las excepciones vigentes); establecer una veda en junio sobre fondos inferiores a 60 metros en la provincia de Almería; la utilización de mallas de red de mayor grosor (torzal de cinco milímetros); y la reducción horaria en los meses de enero, febrero y marzo en Almería.
Para la modalidad de cerco con jareta, habría un tope de capturas para la sardina de 4.500 kilos por día y barco, lo que supone una reducción del 10% respecto al límite actual. Asimismo, se incluye entre las especies autorizadas el 'pescado de paso' y se reduce el tiempo de pesca en determinados meses según la modalidad y provincia.
En cuanto a medidas específicas, el documento incluye vedas temporales para arrastre y cerco y vedas espacio-temporales en zonas de alevinaje para estas modalidades de las tres provincias andaluzas del Mediterráneo, así como la realización de estudios científicos para el establecimiento de áreas de desove y alevinaje de determinadas especies y de impacto socieconómico de la puesta en funcionamiento de dichas áreas. Asimismo, se contempla la mejora de zonas de arrecifes y franja costera para la protección de los recursos pesqueros del litoral, además de la elaboración de estudios sanitarios para las zonas de pesca.
En el litoral mediterráneo andaluz faenan en la actualidad 90 barcos de arrastre con 450 tripulantes, mientras que la flota de cerco consta de un total de 75 embarcaciones con 830 tripulantes.