Desde ASAJA critican que agricultores deben esperar varias semanas e incluso meses para trasladar los restos de sus explotaciones a una planta de compostaje
ALMERÍA HOY / 03·08·2017
Ante el inminente inicio de una nueva campaña agrícola, ASAJA-Almería ha dado la voz de alarma por lo que consideran el «colapso que sufre el actual modelo de gestión de restos vegetales», señalando casos en los que agricultores deben esperar varias semanas e incluso meses para que se trasladen los restos de sus explotaciones a una planta de compostaje.
«Encontramos muchas plantaciones habituales de pimiento realizadas a finales de julio, a las que se añaden nuevas plantaciones de pimiento o berenjena principalmente en el Poniente almeriense durante estas fechas, y que vienen a sumarse a las cosechas que algunas explotaciones invernadas realizan en verano que tienen serias dificultades a la hora de controlar las habituales plagas que acechan a nuestras cosechas. En este contexto, contar con un buen y eficiente sistema para la gestión de los restos vegetales se erige en fundamental y se está convirtiendo también en un problema para el agricultor», avisan desde el sindicato agrario.
Así, desde ASAJA señalan al «colapso» de las plantas de recogida. «La situación de las plantas nos preocupa, la de Cespa —anteriormente conocida como de Albaida— sólo admite restos sin rafia y en cantidades limitadas, Ejido Medio Ambiente abre medio día para tener tiempo de gestionar los restos vegetales que le llegan, y la de las Chozas, que ofrece una buena gestión pero con una capacidad limitada, lo cual nos hace pensar que se necesita mejorar el actual modelo para hacer una gestión más rápida y eficaz», señala el presidente provincial de ASAJA, Francisco Vargas.
En ese sentido, denuncia que el agricultor también se encuentra con dificultades a la hora de la recogida y transporte desde la finca a la planta, debiendo esperar durante semanas su recogida, «e incluso nos hemos encontrado con algún caso en el que llevan dos meses esperando, lo cual denota también que este sector sufre las consecuencias del colapso que parece vivir el actual modelo de gestión de los restos vegetales».
«Además en algunos casos con las matas de sandía y melón que se llevan en ocasiones a los ganaderos —prosigue— nos encontramos con que la gestión no siempre está siendo la adecuada, por lo que nos preocupa que con el arranque de la nueva cosecha, como ha ocurrido en las dos últimas, persista una elevada presencia de mosca blanca y prolifere la virosis en las plantaciones, ya que a pesar de la recomendación que la Organización viene haciendo por asegurar la cosecha, esta actuación no es suficiente y además, lo ideal sería poder empezar con un campo con las labores de limpieza completamente finalizadas, y sin embargo nos encontramos con que aún son muchos los que no han podido finalizar debido a esta situación».
Por ello, desde ASAJA recomiendan a todos aquellos agentes que intervienen en el proceso de gestión de los restos vegetales «que trasladen sus impresiones a las Delegaciones de Agricultura y Medio Ambiente con el objetivo de mejorar la capacidad de las plantas y la gestión que se realiza para atajar este problema, que todas las campañas se convierte en una preocupación más para el agricultor».
Por todo ello, desde el sindicato indican que «quizá fuese oportuna la convocatoria de la mesa técnica de restos vegetales para evaluar la situación». «Hace unas semanas nos informaban de que próximamente se iban a publicar nuevamente ayudas para los que deseen realizar una mejor gestión y rápida eliminación de los restos de la cosecha por lo que contar con las impresiones de todos los agentes que participan en este proceso es importante para avanzar y mejorar».
«Encontramos muchas plantaciones habituales de pimiento realizadas a finales de julio, a las que se añaden nuevas plantaciones de pimiento o berenjena principalmente en el Poniente almeriense durante estas fechas, y que vienen a sumarse a las cosechas que algunas explotaciones invernadas realizan en verano que tienen serias dificultades a la hora de controlar las habituales plagas que acechan a nuestras cosechas. En este contexto, contar con un buen y eficiente sistema para la gestión de los restos vegetales se erige en fundamental y se está convirtiendo también en un problema para el agricultor», avisan desde el sindicato agrario.
Así, desde ASAJA señalan al «colapso» de las plantas de recogida. «La situación de las plantas nos preocupa, la de Cespa —anteriormente conocida como de Albaida— sólo admite restos sin rafia y en cantidades limitadas, Ejido Medio Ambiente abre medio día para tener tiempo de gestionar los restos vegetales que le llegan, y la de las Chozas, que ofrece una buena gestión pero con una capacidad limitada, lo cual nos hace pensar que se necesita mejorar el actual modelo para hacer una gestión más rápida y eficaz», señala el presidente provincial de ASAJA, Francisco Vargas.
En ese sentido, denuncia que el agricultor también se encuentra con dificultades a la hora de la recogida y transporte desde la finca a la planta, debiendo esperar durante semanas su recogida, «e incluso nos hemos encontrado con algún caso en el que llevan dos meses esperando, lo cual denota también que este sector sufre las consecuencias del colapso que parece vivir el actual modelo de gestión de los restos vegetales».
«Además en algunos casos con las matas de sandía y melón que se llevan en ocasiones a los ganaderos —prosigue— nos encontramos con que la gestión no siempre está siendo la adecuada, por lo que nos preocupa que con el arranque de la nueva cosecha, como ha ocurrido en las dos últimas, persista una elevada presencia de mosca blanca y prolifere la virosis en las plantaciones, ya que a pesar de la recomendación que la Organización viene haciendo por asegurar la cosecha, esta actuación no es suficiente y además, lo ideal sería poder empezar con un campo con las labores de limpieza completamente finalizadas, y sin embargo nos encontramos con que aún son muchos los que no han podido finalizar debido a esta situación».
Por ello, desde ASAJA recomiendan a todos aquellos agentes que intervienen en el proceso de gestión de los restos vegetales «que trasladen sus impresiones a las Delegaciones de Agricultura y Medio Ambiente con el objetivo de mejorar la capacidad de las plantas y la gestión que se realiza para atajar este problema, que todas las campañas se convierte en una preocupación más para el agricultor».
Por todo ello, desde el sindicato indican que «quizá fuese oportuna la convocatoria de la mesa técnica de restos vegetales para evaluar la situación». «Hace unas semanas nos informaban de que próximamente se iban a publicar nuevamente ayudas para los que deseen realizar una mejor gestión y rápida eliminación de los restos de la cosecha por lo que contar con las impresiones de todos los agentes que participan en este proceso es importante para avanzar y mejorar».