El Juzgado de lo Penal de Almería ha sancionado con seis meses de prisión a una mujer que aseguró ser la intermediaria del artista y se embolsó 1.800 euros de una sala de fiestas de Níjar
EUROPA PRESS / 17·06·2016
El Juzgado de lo Penal número 5 de Almería ha condenado a seis meses de prisión a una mujer identificada como M.P.M.I. por un delito de apropiación indebida después de que se quedara con 1.800 euros que una discoteca de Níjar adelantó para contratar un actuación de Kiko Rivera ante quien, según aseguró la acusada, intervenía como intermediaria, y que fue finalmente el artista quien la canceló.
La sentencia, dictada tras la conformidad de las partes, señala que el propietario de la sala de fiestas contactó con la acusada a través de un tercero para contratar al cantante en una actuación que debía celebrarse el 22 de junio de 2013.
Así, la «intermediaria» interesó un anticipo de 1.800 euros «comprometiéndose a entregarlo al artista mencionado», de forma que la víctima realizó un ingreso en cuenta para reservar la actuación. No obstante la acusada «guiada por el propósito de incorporar de forma definitiva tal cantidad a su patrimonio, realizó un reintegro y se lo quedó, sin dárselo al artista contratado».
Ante esta situación, Kiko Rivera suspendió el 'bolo' previsto para el día apalabrado, lo que generó al propietario de la sala de fiestas un gasto derivado de los imprevistos de unos 4.000 euros. En esta línea, el juez José Manuel Rey condena a la acusada al pago de 5.800 euros en concepto de indemnización: 1.800 euros por el dinero adelantado y 4.000 euros por los perjuicios causados.
La sentencia, dictada tras la conformidad de las partes, señala que el propietario de la sala de fiestas contactó con la acusada a través de un tercero para contratar al cantante en una actuación que debía celebrarse el 22 de junio de 2013.
Así, la «intermediaria» interesó un anticipo de 1.800 euros «comprometiéndose a entregarlo al artista mencionado», de forma que la víctima realizó un ingreso en cuenta para reservar la actuación. No obstante la acusada «guiada por el propósito de incorporar de forma definitiva tal cantidad a su patrimonio, realizó un reintegro y se lo quedó, sin dárselo al artista contratado».
Ante esta situación, Kiko Rivera suspendió el 'bolo' previsto para el día apalabrado, lo que generó al propietario de la sala de fiestas un gasto derivado de los imprevistos de unos 4.000 euros. En esta línea, el juez José Manuel Rey condena a la acusada al pago de 5.800 euros en concepto de indemnización: 1.800 euros por el dinero adelantado y 4.000 euros por los perjuicios causados.
