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PASEO ABAJO/ Juan Torrijos
Corría el mes de abril del año dos mil diecisiete (2017). El domingo, día nueve (9), la prensa recogía una declaraciones del diputado nacional por Almería del PP Rafael Hernando. En ellas, don Rafael venía a decir algo así como: “Vamos a recuperar credibilidad con el AVE con unos presupuestos para las personas”.
Era, como digo, el año 2017. La credibilidad del PP de la que nos hablaba el señor Hernando en aquellos momentos ya sabemos dónde se quedó.
Y llegó el PSOE.
Y se nos dijo que era el momento de la inversión, que los millones llegarían como esa lluvia que riega campos y llena pantanos. Pero estamos en Almería. Y aquí, si algo nos llega, es ese polvo en suspensión que se mete en los pulmones, nos recuerda con su diferencia aquellos polvos que los trenes del mineral dejaban sobre la ropa tendida en nuestros “terraos” durante años y años.
Corre el mes de marzo, estamos en el 2022, los picos y las palas brillan en lo que tendría que ser el trazado del Ave, pero no las vemos en las manos de los obreros, están en las manos de políticos y de agentes sociales, que ven que pasan los años y la credibilidad de los partidos, PP y PSOE se va perdiendo entre las vías ultra rápidas de lo que tendría que ser la esperanza de comunicación de esta tierra.
¡Pobre y ninguneada tierra!
La foto de la gente con los cascos es emotiva, los gestos de los líderes altruistas, las miras necesarias, pero los políticos en el poder no están por coger las palas, y lo que es peor, tampoco están por gastar lo presupuestado. Un día, cualquier día, aparece un político por la provincia y dice que se van a invertir 588 millones de euros en el Ave. Y la prensa recoge la lluvia de millones, y los pregona y los canta, y nos lo vende como la gran solución que por fin ha llegado por estos lares.
¡Albricias, aleluyas y campanas al vuelo!
La puñetera realidad de nuestra alta velocidad, la triste verdad del Ave a su paso por Almería es que de aquellos 588 millones que tenían que haberse invertido el año pasado solo se ejecutaron 27, según el Diario de Almería; 55, según otros medios. ¿Y el resto hasta los 588?
Eso nos preguntamos los ciudadanos que no estamos en la foto, que no llevamos chalecos, cascos y algunos palas en las manos, que asistimos atónitos a los muchos años de silencio de estos mismos señores que cogían pala una mañana para una foto.
¿Dónde están los millones presupuestados para las obras del Ave durante el año pasado?
¿Dónde coño se los han gastado?
¡No grite, puñetas, en algún bolsillo andarán!
¿No tiene nada que decirnos el alcalde de Serón, o es que las obras quedan muy lejos de su pueblo y no es de su incumbencia?
Nos dirá que el año pasado él no era el jefe de los socialistas, por lo que no esos millones no entran en su responsabilidad política. Que lo explique José Luis Sánchez Teruel.
Este nos indicará que sus relaciones eran con la Junta de la sultana Susana, y que ellos no eran responsables de esas inversiones, que le pregunte a Fernando Martínez, que era la mano derecha de Pedro Sánchez en Almería.
Mano derecha de Sánchez el año pasado, este no parece que sea así, ¿tiene algo que decir sobre los millones no gastados en el Ave?
Lo mío, nos indicará con voz de barítono, es la Memoria histórica, no están los gastos del Ave entre mis responsabilidades diarias. ¿Queda alguien por ahí?
Le preguntaremos a Manolo de la Fuente, ¿algo qué decir? El año pasado era, y este sigue siendo, el portavoz del Gobierno en Almería.
Esos silencios. Qué duros son. Pero están acostumbrados, no se preocupen por ellos. Hoy les toca a ellos tragarse el sapo, los ciudadanos nos los tragamos todos los días por su culpa.
Era, como digo, el año 2017. La credibilidad del PP de la que nos hablaba el señor Hernando en aquellos momentos ya sabemos dónde se quedó.
Y llegó el PSOE.
Y se nos dijo que era el momento de la inversión, que los millones llegarían como esa lluvia que riega campos y llena pantanos. Pero estamos en Almería. Y aquí, si algo nos llega, es ese polvo en suspensión que se mete en los pulmones, nos recuerda con su diferencia aquellos polvos que los trenes del mineral dejaban sobre la ropa tendida en nuestros “terraos” durante años y años.
Corre el mes de marzo, estamos en el 2022, los picos y las palas brillan en lo que tendría que ser el trazado del Ave, pero no las vemos en las manos de los obreros, están en las manos de políticos y de agentes sociales, que ven que pasan los años y la credibilidad de los partidos, PP y PSOE se va perdiendo entre las vías ultra rápidas de lo que tendría que ser la esperanza de comunicación de esta tierra.
¡Pobre y ninguneada tierra!
La foto de la gente con los cascos es emotiva, los gestos de los líderes altruistas, las miras necesarias, pero los políticos en el poder no están por coger las palas, y lo que es peor, tampoco están por gastar lo presupuestado. Un día, cualquier día, aparece un político por la provincia y dice que se van a invertir 588 millones de euros en el Ave. Y la prensa recoge la lluvia de millones, y los pregona y los canta, y nos lo vende como la gran solución que por fin ha llegado por estos lares.
¡Albricias, aleluyas y campanas al vuelo!
La puñetera realidad de nuestra alta velocidad, la triste verdad del Ave a su paso por Almería es que de aquellos 588 millones que tenían que haberse invertido el año pasado solo se ejecutaron 27, según el Diario de Almería; 55, según otros medios. ¿Y el resto hasta los 588?
Eso nos preguntamos los ciudadanos que no estamos en la foto, que no llevamos chalecos, cascos y algunos palas en las manos, que asistimos atónitos a los muchos años de silencio de estos mismos señores que cogían pala una mañana para una foto.
¿Dónde están los millones presupuestados para las obras del Ave durante el año pasado?
¿Dónde coño se los han gastado?
¡No grite, puñetas, en algún bolsillo andarán!
¿No tiene nada que decirnos el alcalde de Serón, o es que las obras quedan muy lejos de su pueblo y no es de su incumbencia?
Nos dirá que el año pasado él no era el jefe de los socialistas, por lo que no esos millones no entran en su responsabilidad política. Que lo explique José Luis Sánchez Teruel.
Este nos indicará que sus relaciones eran con la Junta de la sultana Susana, y que ellos no eran responsables de esas inversiones, que le pregunte a Fernando Martínez, que era la mano derecha de Pedro Sánchez en Almería.
Mano derecha de Sánchez el año pasado, este no parece que sea así, ¿tiene algo que decir sobre los millones no gastados en el Ave?
Lo mío, nos indicará con voz de barítono, es la Memoria histórica, no están los gastos del Ave entre mis responsabilidades diarias. ¿Queda alguien por ahí?
Le preguntaremos a Manolo de la Fuente, ¿algo qué decir? El año pasado era, y este sigue siendo, el portavoz del Gobierno en Almería.
Esos silencios. Qué duros son. Pero están acostumbrados, no se preocupen por ellos. Hoy les toca a ellos tragarse el sapo, los ciudadanos nos los tragamos todos los días por su culpa.
