Cocaína, hachís, una plantación de marihuana y cinco detenidos en Piedras Redondas

A los detenidos se les imputa un delito contra la salud pública y otro de defraudación de fluido eléctrico



ALMERÍA HOY / 13·11·2020

La Policía Nacional ha intervenido 257 plantas en el interior de una vivienda del barrio de Piedras Redondas en Almería, y ha detenido a cinco personas de una misma familia, tres mujeres y dos hombres, propietarios de las viviendas y de la plantación desmantelada.

Desde el mes de abril de este año, la Policía Nacional venía controlando los movimientos que realizaba una pareja que residía en el barrio de Piedras Redondas. En una calle tenían su vivienda habitual, y en los aledaños de ésta, eran propietarios de un segundo inmueble que dedicaban en exclusividad al cultivo de marihuana.

Exteriormente, la vivienda gozaba de apariencia de normalidad, salvo por las ventanas cerradas las 24 horas del día. Sin embargo, en su interior, los detenidos habían configurado un minucioso sistema de temperatura y humedad idóneos para la prosperidad de las plantas de marihuana, todo ello enganchado a la red eléctrica de manera ilegal.

275 plantas de marihuana

Finalmente, el pasado 4 de noviembre, la Policía Nacional procedió a la entrada y registro de tres domicilios relacionados con la pareja investigada.

Durante el desarrollo de los mismos, los agentes intervinieron 257 plantas de marihuana -que arrojaron un peso de 32 kilos-, un kilo y 150 gramos de cogollos de marihuana, 200 gramos de cocaína, 300 gramos de hachís, 8.065 euros en efectivo, 23 transformadores, 23 lámparas, 36 bombillas de 600 w, 10 extractores, tres filtros, dos ventiladores, y cinco balanzas de precisión.

Además de los efectos intervenidos, la Policía Nacional procedió a la detención de la pareja y otras 3 personas más, familiares directos de los primeros.

A los detenidos se les imputa un delito contra la salud pública y otro de defraudación de fluido eléctrico, al disponer de la energía necesaria para la prosperidad del cultivo de manera fraudulenta, y sin que el consumo quedase registrado en un contador para que pudiese ser facturado.

Este tipo de fraude eléctrico es un grave problema para la seguridad y la salud de las personas que conviven cerca, ya que las instalaciones manipuladas no cumplen la normativa en materia de seguridad, generando un importante riesgo para los que las tocan o circulan por las proximidades de las instalaciones.

También existe un perjuicio para las personas dadas de alta legalmente y que abonan sus facturas a las compañías eléctricas correspondientes. En Almería ya se han registrado casos de incendios en viviendas como consecuencia de dichas manipulaciones.

Tras la actuación policial, y adoptando las correspondientes medidas de seguridad por parte de agentes de atención al ciudadano, los operarios de la compañía eléctrica procedieron al desenganche ilegal de luz de la vivienda, y al restablecimiento normal del suministro en el barrio.