ERC, PNV y Bildu han dado la espalda a la medida propuesta por la ministra de Hacienda y han procurado la primera derrota al Ejecutivo de Sánchez
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| PNV, Bildu, ERC, Nueva Canaria, BNG, Compromís y el Partido Regionalista de Cantabria han pedido cambiar la ley de estabilidad, e incluso la Constitución, para reformar el artículo 135 que se aprobó por un acuerdo entre el Gobierno del PSOE y el PP en la crisis de 2008. |
ALMERÍA HOY / 10·09·2020
Según avanza hoy La Vanguardia, el acuerdo entre el Gobierno y la Femp para que los ayuntamientos cedieran al estado sus remanentes o ahorros, a cambio de recibir dinero de un fondo de 5.000 millones se ha convertido en la primera gran derrota parlamentaria del Gobierno de Pedro Sánchez.
Han sido los partidos que en otras ocasiones han apoyado medidas del Gobierno como el PNV, ERC o Bildu, los que han dado la espalda al Ejecutivo y han hecho imposible que el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y la Femp se derogue hoy, sin que haya podido aplicarse en alguna ocasión.
Las negociaciones entre el Ministerio de Hacienda y los grupos políticos hasta altas horas de la noche, de las que salieron un fondo de 3.000 millones a fondo perdido, al margen del decreto ley, sólo sirvió para que los Comunes, que rechazaban, con la alcaldesa de Barcelona a la cabeza, el decreto, ley, puedan abstenerse, pero eso no es suficiente para sacar adelante el decreto ley, ya que ni PNV, ni Bildu, ni ERC, ni Nueva Canaria, ni el BNG, ni Compromís, ni el Partido Regionalista de Cantabria, apoyara el decreto.
Todos con el mismo argumento, que se incauta el dinero de los ayuntamientos y que lo que hay que hacer es cambiar la ley de estabilidad, e incluso la Constitución, para reformar el artículo 135 que se aprobó por un acuerdo entre el Gobierno del PSOE y el PP en la crisis de 2008.
Han sido los partidos que en otras ocasiones han apoyado medidas del Gobierno como el PNV, ERC o Bildu, los que han dado la espalda al Ejecutivo y han hecho imposible que el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y la Femp se derogue hoy, sin que haya podido aplicarse en alguna ocasión.
Las negociaciones entre el Ministerio de Hacienda y los grupos políticos hasta altas horas de la noche, de las que salieron un fondo de 3.000 millones a fondo perdido, al margen del decreto ley, sólo sirvió para que los Comunes, que rechazaban, con la alcaldesa de Barcelona a la cabeza, el decreto, ley, puedan abstenerse, pero eso no es suficiente para sacar adelante el decreto ley, ya que ni PNV, ni Bildu, ni ERC, ni Nueva Canaria, ni el BNG, ni Compromís, ni el Partido Regionalista de Cantabria, apoyara el decreto.
Todos con el mismo argumento, que se incauta el dinero de los ayuntamientos y que lo que hay que hacer es cambiar la ley de estabilidad, e incluso la Constitución, para reformar el artículo 135 que se aprobó por un acuerdo entre el Gobierno del PSOE y el PP en la crisis de 2008.
