Cuevas del Almanzora y Antas nombrarán hijo adoptivo al doctor Schubart

El profesor alemán dirigió las investigaciones y puesta en valor de Fuente Álamo y las últimas excavaciones llevadas a cabo en El Argar

El profesor Schubart durante una reciente visita a Antas


ALMERÍA HOY / 29·09·2019

Los Ayuntamientos de Cuevas del Almanzora y Antas nombrarán hijo adoptivo de ambos municipios al doctor Hermanfrid Schubart en sendos actos de reconocimiento a su labor que tendrán lugar los próximos días 4 y 5 de octubre respectivamente, y en los que estará arropado por los doctores Oswaldo Arteaga y Ana María Roos, entre otros destacados arqueólogos de toda España que han confirmado su asistencia.

El doctor Hermanfrid Schubart es hoy la máxima autoridad y referente vivo en lo concerniente al estudio de la Cultura Argárica y eso, en Antas, es mucho. Podríamos decir incluso, sin temor a errar, que es el sucesor de Siret.

Nació en Kassel el 1 de diciembre de 1930. Cursó estudios de Historia en las universidades de Greifswald y Leipzig, especializándose en Prehistoria y Arqueología, y realizó su tesis sobre la Edad del Bronce en Mecklenburg. En 1959 ingresó en el Instituto Arqueológico Alemán de Madrid, del que llegó a ser director desde 1981 hasta el momento de su retiro, en 1994.

Ha participado y dirigido excavaciones en numerosos países, siendo los más reconocidos sus trabajos en el sur de Portugal y en Andalucía, fundamentalmente, los relacionados con el “proyecto geoarqueológico de las costas de Andalucía”, junto al también arqueólogo Oswaldo Arteaga y los geólogos Horst D. Schulz y Gerd Hoffman.

El profesor Schubart realizó en 1991 las últimas excavaciones llevadas a cabo en El Argar, trabajos que simultaneó con los que desarrollaba en el poblado de Fuente Álamo, en Cuevas del Almanzora.

Los reconocimientos a su carrera son, igualmente, numerosos. Es Doctor Honoris Causa de las Universidades de Oporto y Autónoma de Madrid, medalla de oro de Andalucía, de la Asociación Española de Amigos de la Arqueología, al mérito en las Bellas Artes Juan Carlos I y Premio Andalucía de Arqueología entre muchos otros.

Llegó a El Real de Antas en 1959, buscando a la familia de Pedro Flores, que había estado a cargo de las excavaciones de Siret sobre el terreno, y alguien le indicó dónde vivía Cayetano, el menor de sus hijos, quien le acompañó y mostró El Argar por primera vez, y le habló de aquellos días en que llevaba la comida a su padre mientras trabajaba en las excavaciones.

El Argar, Fuente Álamo, Cuevas del Almanzora y Antas son nombres que dibujan una sonrisa en el rostro del doctor Schubart, del mismo modo que ambas localidades aflora un río de gratitud al escuchar y recordar su nombre.

Es de justicia reconocer el mérito de quien, tal vez, más haya aportado a su conocimiento desde los tiempos de Luis Siret y Pedro Flores y a la difusión y divulgación de una comarca como el Levante almeriense vinculada a la Cultura y la organización social más importante en esta parte de Europa durante todo un milenio.