Una concejal de Carboneras vota a favor de que el Ayuntamiento contrate a su hermano

Los servicios jurídicos municipales instan al alcalde a repetir la votación sin la presencia de la edil de su mismo partido




ALMERÍA HOY / 14·11·2018

El Pleno extraordinario que el Ayuntamiento de Carboneras ha celebrado este martes podría volver a repetirse. Y es que, con posterioridad al mismo, los servicios jurídicos municipales han advertido al alcalde, Felipe Cayuela (Gicar), con un informe donde ponen en duda la legalidad del mismo.

La historia es la siguiente: el pleno de este martes incluía en el orden del día la propuesta del PSOE para revocar el acuerdo de rescisión del contrato a la empresa Moreno y Garrido S.L. y su incorporación inmediata como empresa de los servicios eléctricos de todo el municipio al Ayuntamiento de Carboneras. Además, los socialistas proponían la incorporación con Moreno y Garrido S. L. de todo el personal «con los efectos retroactivos correspondientes» que dicha empresa tenía en el momento de la rescisión del contrato: Manuel Ruiz Venzal, Antonio Francisco Moreno Segura, Antonio Manuel Moreno Garrido y Juan Moreno Segura.

Pues bien, la propuesta ha salido adelante con los votos del PSOE y de una concejal de Gicar, del equipo de gobierno, cuyo nombre es María Ángeles Ruiz Venzal, a la sazón hermana de uno de los trabajadores afectados.

Así, los servicios jurídicos del Ayuntamiento carbonero instan al alcalde a convocar otro pleno para que se vote ese mismo punto sin la participación de María Ángeles Ruiz Venzal.

Por otro lado, a primera hora de esta mañana se han presentado en la Casa Consistorial los cuatro empleados, acompañados de su abogado, exigiendo ser contratados por el Ayuntamiento.


Antecedentes


La empresa Moreno y Garrido S.L. venía prestando servicio en Carboneras mediante un contrato menor sin firmar por alcalde de entonces (hablamos del año 1993) y una duración de un año para el mantenimiento de los servicios eléctricos en localidad, todo ello por importe de siete millones de las antiguas pesetas.

Sin ningún tipo de expediente posterior, la empresa siguió prestando servicios hasta que, hace cinco años, se sacó el servicio a concurso. Destacar que en los últimos años, esta empresa ya facturaba unos 50 millones de pesetas al año (300.000 euros), y que cuando el servicio salió a concurso, Moreno y Garrido S.L. no llegó siquiera a concursar; sí lo hicieron otras tres empresas, una de las cuales, Monraval, se hizo cargo de ella.