Según el fiscal, sus compañeros de operación le propinaron una paliza mortal tras surgir discrepancias en plena operación de venta de hachís
ALMERÍA HOY / 22·10·2018
La Audiencia Provincial de Almería acogerá entre el 23 de noviembre y el 9 de enero el juicio contra un grupo de presuntos traficantes de droga acusados de acabar a palos con uno de los implicados durante una venta de hachís. Los acusados, todos varones, son de nacionalidad española y rumana, mientras que el fallecido, español de 44 años, estaba casado y era padre de dos hijos.
Según el escrito de acusación, consultado por ALMERÍA HOY, los procesados S.M.S, J.A.C., C.F.C., J.M.R.M., F.A.N. y S.M.N., desde octubre de 2010, integrados dentro de un grupo planificaron adquirir unos 150 kilos de hachís para su posterior venta en el mercado negro. Para ello, habrían mantenido contactos con R.B., de nacionalidad marroquí, y el hombre fallecido tras una brutal paliza, F.L.P., quienes se encontraban en posesión de la droga.
Así, el fiscal sostiene que durante los preparativos de la operación, mantuvieron constantes conversaciones telefónicas con lenguaje «críptico y previamente convenido», así como encuentros personales, siempre en lugares públicos, casi siempre en zonas del Campo de Níjar, como Campohermoso o San Isidro.
El escrito de acusación expone, asimismo, que los acusados acordaron la venta final de la droga a un grupo de personas de nacionalidad rumana entre los que se encontraban los hermanos S.M.N y F.A.N., «preparando la cobertura de seguridad de la operación y contactando frecuentemente con ellos a tal efecto a cambio de la percepción de importantes cantidades de dinero».
Así, la venta de la droga se habría acordado realizar para el 25 de octubre de 2010. Sobre medianoche, se desplazaron a la finca de F.L.P., ubicada también en el Campo de Níjar, los procesados C.F.C., J.M.R.M., F.A.N. y S.M.N., así como otros dos individuos de nacionalidad rumana que no pudieron ser identificados.
El fiscal apunta que «en el curso de la operación proyectada, surgieron serias discrepancias y desacuerdos con F.L.P., a quien, con el firme propósito de acabar con su vida, propinaron con gran fuerza diversos golpes por todo el cuerpo, provocando su fallecimiento por shock traumático por múltiples traumatismos craneales y toraco-abdominales causados».
Durante los registros realizados posteriormente en casa de S.M.N. se hallaron diversos teléfonos móviles y una pistola de 9 mm modificada, así como dinero en metálico.
El Ministerio Público pide las siguientes penas:
Para R.B., S.M.S. y J.A.C.: por el delito de salud pública solicita penas de dos años y seis meses de cárcel.
Para C.F.C., J.M.R.M. y F.A.N.: dos años y seis meses de cárcel por el delito de salud pública, y 12 años de prisión por delito de homicidio.
Para S.M.N.: las mismas penas citadas anteriormente a lo que hay que sumar otros dos años de cárcel por tenencia ilícita de armas.
Además, C.F.C., J.M.R.M., F.A.N. y S.M.N. tendrán que indemnizar a la viuda e hijos del fallecido con 168.000 euros, y a sus padres con otros 70.000 euros.
Según el escrito de acusación, consultado por ALMERÍA HOY, los procesados S.M.S, J.A.C., C.F.C., J.M.R.M., F.A.N. y S.M.N., desde octubre de 2010, integrados dentro de un grupo planificaron adquirir unos 150 kilos de hachís para su posterior venta en el mercado negro. Para ello, habrían mantenido contactos con R.B., de nacionalidad marroquí, y el hombre fallecido tras una brutal paliza, F.L.P., quienes se encontraban en posesión de la droga.
Así, el fiscal sostiene que durante los preparativos de la operación, mantuvieron constantes conversaciones telefónicas con lenguaje «críptico y previamente convenido», así como encuentros personales, siempre en lugares públicos, casi siempre en zonas del Campo de Níjar, como Campohermoso o San Isidro.
El escrito de acusación expone, asimismo, que los acusados acordaron la venta final de la droga a un grupo de personas de nacionalidad rumana entre los que se encontraban los hermanos S.M.N y F.A.N., «preparando la cobertura de seguridad de la operación y contactando frecuentemente con ellos a tal efecto a cambio de la percepción de importantes cantidades de dinero».
Así, la venta de la droga se habría acordado realizar para el 25 de octubre de 2010. Sobre medianoche, se desplazaron a la finca de F.L.P., ubicada también en el Campo de Níjar, los procesados C.F.C., J.M.R.M., F.A.N. y S.M.N., así como otros dos individuos de nacionalidad rumana que no pudieron ser identificados.
El fiscal apunta que «en el curso de la operación proyectada, surgieron serias discrepancias y desacuerdos con F.L.P., a quien, con el firme propósito de acabar con su vida, propinaron con gran fuerza diversos golpes por todo el cuerpo, provocando su fallecimiento por shock traumático por múltiples traumatismos craneales y toraco-abdominales causados».
Durante los registros realizados posteriormente en casa de S.M.N. se hallaron diversos teléfonos móviles y una pistola de 9 mm modificada, así como dinero en metálico.
El Ministerio Público pide las siguientes penas:
Para R.B., S.M.S. y J.A.C.: por el delito de salud pública solicita penas de dos años y seis meses de cárcel.
Para C.F.C., J.M.R.M. y F.A.N.: dos años y seis meses de cárcel por el delito de salud pública, y 12 años de prisión por delito de homicidio.
Para S.M.N.: las mismas penas citadas anteriormente a lo que hay que sumar otros dos años de cárcel por tenencia ilícita de armas.
Además, C.F.C., J.M.R.M., F.A.N. y S.M.N. tendrán que indemnizar a la viuda e hijos del fallecido con 168.000 euros, y a sus padres con otros 70.000 euros.
