Las cuentas del Gobierno suponen un recorte de 38,8 millones en tres años en inversiones hídricas

Para la inutilizada desaladora de Villaricos se incluye la misma partida que el año pasado, de la que no se ha invertido un sólo euro


Reunión de cargos de C's y la Mesa del Agua este viernes en la sede de Asempal. PERQ.

ALMERÍA HOY / 06·04·2018

El portavoz de la Mesa del Agua de Almería, José Antonio Fernández, ha criticado las inversiones en materia hídrica previstas para la provincia en el proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018, ya que, como ha explicado este viernes, se pasan de 57,9 millones de euros presupuestados en 2016, a algo más de 22 millones el año siguiente, hasta los 19,1 millones previstos para este ejercicio; en total, 38,8 millones menos contemplados para infraestructuras hídricas almerienses.

En rueda de prensa conjunta con cargos de Ciudadanos (C's), la Mesa del Agua ha trasladado tres cuestiones fundamentales: una, el mencionado recorte presupuestario —«Con los problemas de agua que tenemos y sólo ponen 19 millones, de los que para regadío no es casi nada», se queja Fernández—, otra queja ha sido que, después de 'abrirse el grifo' del Tajo-Segura, de 20 hectómetros cúbicos, a Almería sólo llegan 425.000 metros cúbicos de agua, lo que ha definido como una «insignificancia» para la provincia, sobre todo para el Almanzora, que «no tiene asegurada el agua para la agricultura».

La tercera cuestión planteada por la Mesa a diputados de Podemos es que «un mes después desdela aprobación del decreto de sequía, no sabemos a día de hoy en qué nos va a afectar». «Al principio acogimos el anuncio con entusiasmo porque creíamos que pagaríamos el agua a 30 céntimos, pero hoy no lo tenemos claro».

Además y ante preguntas de ALMERÍA HOY, Fernández ha repasado el estado actual de las desaladoras que hay repartidas por la provincia: «La de Carboneras está al 100% de su capacidad actual, la desaladora de Balerma también está al 100% porque el acuerdo entre ayuntamientos y regantes a través de la JCU ha permitido que se ponga a funcionar al 100%, puesto que esos 11 hectómetros que los municipios hoy no pueden llevarse, hemos llegado a un acuerdo y los vamos a utilizar este 2018. La desaladora de Villaricos, lógicamente, sigue en la misma situación desde septiembre de 2012, y la otra desaladora, Rambla Morales, es privada y sigue en la misma situación; allí está abandonada. Luego, las pequeñas desaladoras, como la de Cuevas, por las necesidad que hay de agua en el Almanzora estarán al cien por cien».