Francisca Iglesias, portavoz de UPA-Almería, advierte que «les han aumentado un 30% los costes de producción y del agua al agricultor»
ALMERÍA HOY / 19·02·2018
Los precios de las hortalizas almerienses vuelven a estar «por los suelos», motivo por el que desde la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) se organizaba la pasada semana un acto de protesta en Almería consistente en regalar tomates y pimientos a los viandantes. En ese sentido, la portavoz provincial de UPA, Francisca Iglesias, ha detallado a este medio que «el precio del tomate está ahora más bajo que hace un año».
Cabe recordar que, en febrero de 2017, también se produjeron distintas protestas por los bajos precios de las hortalizas. Justo un año después, las cosas van a peor.
«Hemos vuelto a hacer un reparto gratuito de hortalizar porque estamos viendo que los precios, con una producción menor, sobre todo en tomate, está todavía peor. El precio del tomate está mas bajo que hace un año, que ya estaba en mínimos, con 54 céntimos de media». Así, Iglesias apunta que «ha variado mucho el rendimiento de nuestros agricultores porque les han aumentado un 30% los costes producción y el coste del agua. Un agricultor que recibe 54 céntimos por kilo de media y paga el metro cubico de agua a 80 céntimos, vende a pérdidas alrededor del 40%», lamenta.
En cuanto a posibles soluciones, Francisca Iglesias recuerda la sentencia de un tribunal europeo «que comunica que las organizaciones de productores pueden establecer precios mínimos sin que Competencia diga nada». «El problema es que no todo el mundo está en las organizaciones de los productores», añade.
Así las cosas, la portavoz de UPA en Almería traslada que su organización ha pedido al Gobierno «que nos aclare si una interprofesional puede establecer precios mínimos, y si ciertamente es así, por qué no se hace. Hay una situación de parálisis total del Gobierno, que cuando se le pregunta no responde, y si no responde no tenemos garantía jurídica para hacerlo, por lo que pedimos agilidad», finaliza.
Cabe recordar que, en febrero de 2017, también se produjeron distintas protestas por los bajos precios de las hortalizas. Justo un año después, las cosas van a peor.
«Hemos vuelto a hacer un reparto gratuito de hortalizar porque estamos viendo que los precios, con una producción menor, sobre todo en tomate, está todavía peor. El precio del tomate está mas bajo que hace un año, que ya estaba en mínimos, con 54 céntimos de media». Así, Iglesias apunta que «ha variado mucho el rendimiento de nuestros agricultores porque les han aumentado un 30% los costes producción y el coste del agua. Un agricultor que recibe 54 céntimos por kilo de media y paga el metro cubico de agua a 80 céntimos, vende a pérdidas alrededor del 40%», lamenta.
En cuanto a posibles soluciones, Francisca Iglesias recuerda la sentencia de un tribunal europeo «que comunica que las organizaciones de productores pueden establecer precios mínimos sin que Competencia diga nada». «El problema es que no todo el mundo está en las organizaciones de los productores», añade.
Así las cosas, la portavoz de UPA en Almería traslada que su organización ha pedido al Gobierno «que nos aclare si una interprofesional puede establecer precios mínimos, y si ciertamente es así, por qué no se hace. Hay una situación de parálisis total del Gobierno, que cuando se le pregunta no responde, y si no responde no tenemos garantía jurídica para hacerlo, por lo que pedimos agilidad», finaliza.
