La oposición deja sobre la mesa el proyecto de presupuesto para 2018 del alcalde Torrecillas y no llega ni siquiera a debatirse
ALMERÍA HOY / 22·12·2017
Este jueves se ha celebrado en Albox el Pleno que debía debatir y, en su caso, aprobar las cuentas que habrán de regir el próximo ejercicio, pero el guión no se desarrolló según lo previsto por el alcalde Francisco Torrecillas (CILUS). Antes de iniciar el debate, el portavoz socialista, Tito Carrillo, propuso que «se dejaran sobre la mesa porque no habían sido tenido en cuenta, ni tan siquiera escuchadas, las propuestas de la oposición durante la comisión informativa».
El alcalde se negó, en principio, a las pretensiones del edil del PSOE, y quiso seguir adelante con la votación del presupuesto, pero la secretaria le observó que, «si la oposición lo pide, debe votarse que se dejen sobre la mesa y no se debatan ni voten». El resultado de la votación fue de 15 votos a favor de la propuesta socialista y sólo dos en contra, el del alcalde y el de José Campoy, concejal exsocialista que constituye el único apoyo del regidor.
Una vez conocido el resultado, Torrecillas ordenó la prórroga de los presupuestos de 2017 y el levantamiento de la sesión, lo que también fue reconvenido por la secretaria, que le advirtió que esa prórroga debía ser, también aprobada por el Pleno.
El origen de todo está, según Carrillo, «en la falta de interés por gobernar desde el consenso que muestra Torrecillas. En la comisión informativa, cuando llegó el turno de que, tanto nosotros como el PP explicáramos nuestras enmiendas, se levantó y se fue de la reunión alegando que tenía que inaugurar una plaza y que, después, se las explicáramos en privado, como si no fuera necesario que estuviera presente la secretaria».
«No son formas de gobernar un ayuntamiento —explica el portavoz del PSOE—. Torrecillas ningunea a la Corporación y, como en el caso de los presupuestos, publica primero sus ocurrencias en las redes sociales, suelta la bomba y luego no escucha a los ediles del Ayuntamiento».
El alcalde se negó, en principio, a las pretensiones del edil del PSOE, y quiso seguir adelante con la votación del presupuesto, pero la secretaria le observó que, «si la oposición lo pide, debe votarse que se dejen sobre la mesa y no se debatan ni voten». El resultado de la votación fue de 15 votos a favor de la propuesta socialista y sólo dos en contra, el del alcalde y el de José Campoy, concejal exsocialista que constituye el único apoyo del regidor.
Una vez conocido el resultado, Torrecillas ordenó la prórroga de los presupuestos de 2017 y el levantamiento de la sesión, lo que también fue reconvenido por la secretaria, que le advirtió que esa prórroga debía ser, también aprobada por el Pleno.
El origen de todo está, según Carrillo, «en la falta de interés por gobernar desde el consenso que muestra Torrecillas. En la comisión informativa, cuando llegó el turno de que, tanto nosotros como el PP explicáramos nuestras enmiendas, se levantó y se fue de la reunión alegando que tenía que inaugurar una plaza y que, después, se las explicáramos en privado, como si no fuera necesario que estuviera presente la secretaria».
«No son formas de gobernar un ayuntamiento —explica el portavoz del PSOE—. Torrecillas ningunea a la Corporación y, como en el caso de los presupuestos, publica primero sus ocurrencias en las redes sociales, suelta la bomba y luego no escucha a los ediles del Ayuntamiento».
