Cinco años de prisión por quemar la casa del hermano de una juez con quien estaba resentido

El acusado ya había sido condenado en 2008 por propinar una paliza a la víctima, manifestando su intención de «partirle la espalda» y «dejarlo inútil»



EUROPA PRESS / 21·09·2016

L.T.C. ha aceptado cinco años de prisión por un delito continuado de incendio en grado de tentativa, después de que tratara de prender fuego hasta en siete ocasiones en un mes a la vivienda del hermano de una magistrada con la que estaba «fuertemente resentido» por una resolución en la que acordó el internamiento de su madre en una residencia.

Así lo han trasladado fuentes jurídicas después de que la Fiscalía rebajara su petición inicial de nueve años de prisión para el acusado, quien ya había sido condenado anteriormente cuando «movido por aquel resentimiento», en enero de 2008, abordó al hermano de la juez en la calle y le propinó una paliza al tiempo que manifestaba su interés en «partirle la espalda» y «dejarlo inútil».

El hombre, que llegó incluso a manifestar su «animadversión» a la juez en una carta tras serle comunicada la sentencia, se dirigió de madrugada a la casa del hermano de la magistrada en noviembre de 2014, y, movido por la «animosidad» descrita, acumuló papeles, cartones, telas y líquido inflamable para prender fuego en la casa.

Las llamas hicieron arder parcialmente la ventana de madera que se situaba a unos 1,2 metros sobre el suelo, si bien no se propagaron gracias a la intervención de un funcionario municipal. No obstante, el acusado habría repetido la operación al menos seis veces más con el mismo resultado, bien por la intervención de terceros o bien porque por causas naturales, el fuego se extinguió.

Así, fue en el último de los intentos, sobre las 5:10 horas del 19 de noviembre, cuando el acusado fue sorprendido por los agentes cuando trataba de incendiar los restos que había acumulado en el quicio de la ventana, por lo que fue detenido.

El fuego supuso un «grave peligro» para la víctima y su pareja, ya que al menos en cuatro de las siete ocasiones se encontraba durmiendo en la planta superior. Igualmente, podría haberse extendido a las casas vecinas. La acusación particular ha renunciado a cualquier indemnización.