La Comisaría Provincial y el Colegio de Farmacéuticos han emitido una serie de recomendaciones para que nada te agüe la fiesta en estos días
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| Imagen de archivo. |
ALMERÍA HOY / 18·08·2016
Ante el inicio de la feria de Almería, te dejamos una serie de recomendaciones, basadas en las emitidas por la Comisaría Provincial y el Colegio de Farmacéuticos, para disfrutar de las fiestas de una manera saludable y sin sobresaltos:
Mantén una hidratación adecuada
Si bien se trata de una recomendación válida para todo el periodo estival, en feria pueden producirse aglomeraciones que contribuyen a elevar la sensación de calor, especialmente a mediodía. Bebe agua con frecuencia y asegúrate de que lo hagan las personas de mayor edad, en las que el reflejo natural de sed puede haberse debilitado.
Utiliza protección solar
Aunque tendamos asociarlos con espacios naturales abiertos como la playa o la montaña, los efectos de la exposición al sol son exactamente los mismos en entornos urbanos. Si vas a pasar tiempo en la feria de mediodía, utiliza protección solar en la cara, el cuello y los brazos. Tu farmacéutico puede asesorarte a la hora de escoger el fotoprotector más adecuado para tu tipo de piel.
Viste ropa cómoda
No se trata de salir en shorts y deportivas —si no es lo que te apetece—, pero el uso de una ropa holgada, que permita la transpiración, y de un calzado cómodo, te servirá para evitar la aparición de las siempre molestas ampollas o de alguna dermatitis por rozamiento. Además, te ayudará a prevenir un posible golpe de calor.
Bebe con cabeza
El mejor remedio contra la resaca es la moderación en el consumo. Intercala agua, refrescos y otras bebidas no alcohólicas entre las alcohólicas para reducir la ingesta de estas últimas. Además, si estás tomando algún medicamento, infórmate bien sobre las posibles interacciones. Ten en cuenta que el alcohol puede llegar a resultar mortal combinado con antidepresivos, que potencia el efecto ulcerogénico de los antiinflamatorios y que puede producir daños en el hígado —por un aumento de su hepatotoxicidad— en combinación con otros fármacos de uso corriente como el paracetamol. Ante la duda, consulta a tu farmacéutico.
No pierdas de vista a los más pequeños
Para evitar sustos y disgustos, vigila en todo momento a los menores a tu cargo, especialmente a los más pequeños. Además, asegúrate de que conocen su nombre, apellidos, dirección y un número de teléfono que pueda facilitar su devolución si llegasen a perderse. También puedes anotarles el teléfono en un brazo o ponerles un colgante con sus datos de identidad y un teléfono de contacto.
Vigila tus pertenencias
Las aglomeraciones y el ambiente bullicioso de la feria facilitan la actuación de carteristas y otros amigos de lo ajeno. Si no quieres que te amarguen el día, mantén siempre tus pertenencias a la vista, prestando especial atención tu teléfono móvil. En las concentraciones de gente, trata de llevar el bolso en la parte delantera, con la mano encima y siempre cerrado. Además, si has acudido en tu vehículo, no dejes a la vista objetos de valor o llamativos.
Desconfía
Si alguien te ofrece su ayuda de un modo sospechosamente amable, probablemente tengas razones para sospechar. A menudo, se trata de una argucia para robarte. Desconfía igualmente de las gangas y los juegos de azar callejeros.
Utiliza el taxi y el transporte público
Evitarás problemas de aparcamiento y otros disgustos como posibles rayones y abolladuras en tu vehículo. Además, si bebes, no tendrás que andar haciendo cálculos poco fiables sobre cuando estarás de nuevo en condiciones de conducir. Recuerda que, incluso si sólo te has tomado un par de copas y te sientes perfectamente capacitado para ponerte al volante, un taxi será siempre más barato que una multa o un accidente.
Mantén una hidratación adecuada
Si bien se trata de una recomendación válida para todo el periodo estival, en feria pueden producirse aglomeraciones que contribuyen a elevar la sensación de calor, especialmente a mediodía. Bebe agua con frecuencia y asegúrate de que lo hagan las personas de mayor edad, en las que el reflejo natural de sed puede haberse debilitado.
Utiliza protección solar
Aunque tendamos asociarlos con espacios naturales abiertos como la playa o la montaña, los efectos de la exposición al sol son exactamente los mismos en entornos urbanos. Si vas a pasar tiempo en la feria de mediodía, utiliza protección solar en la cara, el cuello y los brazos. Tu farmacéutico puede asesorarte a la hora de escoger el fotoprotector más adecuado para tu tipo de piel.
Viste ropa cómoda
No se trata de salir en shorts y deportivas —si no es lo que te apetece—, pero el uso de una ropa holgada, que permita la transpiración, y de un calzado cómodo, te servirá para evitar la aparición de las siempre molestas ampollas o de alguna dermatitis por rozamiento. Además, te ayudará a prevenir un posible golpe de calor.
Bebe con cabeza
El mejor remedio contra la resaca es la moderación en el consumo. Intercala agua, refrescos y otras bebidas no alcohólicas entre las alcohólicas para reducir la ingesta de estas últimas. Además, si estás tomando algún medicamento, infórmate bien sobre las posibles interacciones. Ten en cuenta que el alcohol puede llegar a resultar mortal combinado con antidepresivos, que potencia el efecto ulcerogénico de los antiinflamatorios y que puede producir daños en el hígado —por un aumento de su hepatotoxicidad— en combinación con otros fármacos de uso corriente como el paracetamol. Ante la duda, consulta a tu farmacéutico.
No pierdas de vista a los más pequeños
Para evitar sustos y disgustos, vigila en todo momento a los menores a tu cargo, especialmente a los más pequeños. Además, asegúrate de que conocen su nombre, apellidos, dirección y un número de teléfono que pueda facilitar su devolución si llegasen a perderse. También puedes anotarles el teléfono en un brazo o ponerles un colgante con sus datos de identidad y un teléfono de contacto.
Vigila tus pertenencias
Las aglomeraciones y el ambiente bullicioso de la feria facilitan la actuación de carteristas y otros amigos de lo ajeno. Si no quieres que te amarguen el día, mantén siempre tus pertenencias a la vista, prestando especial atención tu teléfono móvil. En las concentraciones de gente, trata de llevar el bolso en la parte delantera, con la mano encima y siempre cerrado. Además, si has acudido en tu vehículo, no dejes a la vista objetos de valor o llamativos.
Desconfía
Si alguien te ofrece su ayuda de un modo sospechosamente amable, probablemente tengas razones para sospechar. A menudo, se trata de una argucia para robarte. Desconfía igualmente de las gangas y los juegos de azar callejeros.
Utiliza el taxi y el transporte público
Evitarás problemas de aparcamiento y otros disgustos como posibles rayones y abolladuras en tu vehículo. Además, si bebes, no tendrás que andar haciendo cálculos poco fiables sobre cuando estarás de nuevo en condiciones de conducir. Recuerda que, incluso si sólo te has tomado un par de copas y te sientes perfectamente capacitado para ponerte al volante, un taxi será siempre más barato que una multa o un accidente.
