Desde hace unos días vivo bajo el cuidado de los voluntarios del Refugio La Reserva, pero necesito con urgencia una familia adoptiva o de acogida que me ayude a curar mis heridas
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| Este soy yo, Indalo, recibiendo el cariño de los miembros de la protectora. |
ALMERÍA HOY / 28·06·2016
Mi nombre es Indalo, un perrito de tamaño medio y creen que puedo tener entre cuatro y cinco añitos. Mis cuidadores dicen sobre mi que soy tierno y dócil y que aún estoy algo asustado, ya que solo llevo una semana bajo los cuidados de los voluntarios del Refugio La Reserva, después de que la policía les diera aviso de que me habían encontrado vagando por la calles con diversas heridas.
Ahora recibo tratamiento para curar la anaplasmosis, leishmaniosis y erliquia que padezco, no obstante os debo decir que todas estas enfermedades son curables y que ya me encuentro algo mejor. Pero precisamente por ello, necesito con urgencia una casa de acogida para poder sanar más rápido, ya que estar en el refugio con temperaturas tan elevadas hace que mi recuperación sea algo más complicada.
Antes de despedirme, me gustaría dar las gracias a todos los miembros de la protectora La Reserva, ubicada en la Mojonera, por la labor que desempeñan y el esfuerzo que realizan para acoger, atender y proporcionar cuidados veterinarios a los más de 250 perros que vivimos en sus instalaciones hasta que nos encuentran una familia de adopción. Mientras esto sucede, un grupo de voluntarios se encarga de ofrecernos todo el cariño y la atención que requerimos diariamente.
Así que si deseas ayudarme o quizás quieras adoptarme, sólo tienes que ponerte en contacto con la asociación a través del mail adopcionesprotectotavicar@gmail.com. Además, también puedes ayudar al Refugio Canino La Reserva mediante un donativo en la cuenta ES46 3058 0064 69 2720010585 de Cajamar para que continúen ayudando y mejorando las vidas de tantos caninos abandonados.
Ahora recibo tratamiento para curar la anaplasmosis, leishmaniosis y erliquia que padezco, no obstante os debo decir que todas estas enfermedades son curables y que ya me encuentro algo mejor. Pero precisamente por ello, necesito con urgencia una casa de acogida para poder sanar más rápido, ya que estar en el refugio con temperaturas tan elevadas hace que mi recuperación sea algo más complicada.
Antes de despedirme, me gustaría dar las gracias a todos los miembros de la protectora La Reserva, ubicada en la Mojonera, por la labor que desempeñan y el esfuerzo que realizan para acoger, atender y proporcionar cuidados veterinarios a los más de 250 perros que vivimos en sus instalaciones hasta que nos encuentran una familia de adopción. Mientras esto sucede, un grupo de voluntarios se encarga de ofrecernos todo el cariño y la atención que requerimos diariamente.
Así que si deseas ayudarme o quizás quieras adoptarme, sólo tienes que ponerte en contacto con la asociación a través del mail adopcionesprotectotavicar@gmail.com. Además, también puedes ayudar al Refugio Canino La Reserva mediante un donativo en la cuenta ES46 3058 0064 69 2720010585 de Cajamar para que continúen ayudando y mejorando las vidas de tantos caninos abandonados.
