La almeriense Ángela Alonso denuncia con flamenco el sufrimiento de camellos y caballos turísticos en Egipto
ALMERÍA HOY / 03·11·2025
La bailaora almeriense Ángela Alonso, residente en la capital británica desde hace más de veinte años, está preparando una singular protesta artística: utilizará el poder simbólico del flamenco para condenar el maltrato al que son sometidos los camellos y caballos que trabajan en la zona de las pirámides de Guiza, en Egipto.
La iniciativa, según recogió la agencia EFE, tendrá lugar el próximo sábado 15 de noviembre, en la víspera del Día Internacional del Flamenco. El acto es parte de una propuesta dual con la que Alonso busca amplificar las voces de los animales explotados.
Ángela Alonso, quien fundó la prestigiosa academia Ilusión Flamenca en Londres, explicó a EFE que el objetivo de su performance es "llamar la atención de los turistas y del mundo" sobre el dolor de los animales explotados cerca de los monumentos.
Su plan es presentarse vestida de flamenca para ejecutar un baile. "Mi intención es ir vestida de flamenca y bailar allí para que la gente se dé cuenta de lo que pasa", señaló. La acción será documentada en un vídeo, tanto en inglés como en español, para que los espectadores "piensen en el dolor de esos caballos y camellos".
La bailaora ha sido testigo directo de la situación, describiendo escenas "terroríficas" de animales exhaustos y deshidratados obligados a largas jornadas de trabajo bajo el sol para transportar visitantes. "Muchos mueren deshidratados y exhaustos. Es algo que no puedo mirar sin hacer nada", afirmó con convicción.
Alonso busca que su arte, reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, sirva como un altavoz contra la crueldad. Este no será un espectáculo comercial, sino un gesto individual de esperanza y protesta pacífica. "Bailo porque es lo que sé hacer, y es mi forma de gritar sin palabras", resumió.
SOLIDARIDAD TAMBIÉN EN ALEJANDRÍA
La protesta en Guiza será el preámbulo de otra actividad benéfica. El domingo 16 de noviembre, Día Internacional del Flamenco, Alonso ofrecerá una clase de castañuelas retransmitida en directo desde Alejandría.
La sesión se impartirá desde el refugio de perros que ella misma ha impulsado en la ciudad, y todos los fondos que se recauden se destinarán íntegramente al mantenimiento y cuidado de los animales acogidos. "Voy a enseñar castañuelas en directo desde el refugio y presentaré a los perros que viven allí. Les pondré flores o pañuelos de lunares, algo flamenco, o al menos lo intentaré...", comentó.
Este centro, con capacidad para cerca de cincuenta perros, nació tras una experiencia insatisfactoria con otra entidad, buscando un modelo de bienestar animal más transparente. Alonso continúa trabajando en su registro oficial y en la búsqueda de apoyos para ampliar la capacidad del refugio.
DOCENCIA, PREMIOS Y ACTIVISMO
Ángela Alonso compagina su compromiso solidario con su carrera docente, impartiendo clases de flamenco en Londres desde 1998. Su escuela, Ilusión Flamenca, ha sido galardonada con dos premios Lukas Awards a la mejor academia de flamenco en el Reino Unido.
A lo largo de su trayectoria, ha colaborado activamente con santuarios y protectoras de animales, como Jarjeer Mules en Marruecos y Takis Shelter en Creta. Durante la pandemia, organizó clases online con fines benéficos que permitieron enviar ayuda económica a diversas protectoras, incluso en su provincia natal de Almería.
"Yo no tengo grandes recursos, pero tengo arte y tengo voz. Si el flamenco sirve para aliviar el sufrimiento de un solo animal, ya habrá merecido la pena", concluyó. Desde Guiza hasta Alejandría, el compás de su taconeo busca ser un llamado global a la compasión. EFE
La iniciativa, según recogió la agencia EFE, tendrá lugar el próximo sábado 15 de noviembre, en la víspera del Día Internacional del Flamenco. El acto es parte de una propuesta dual con la que Alonso busca amplificar las voces de los animales explotados.
Ángela Alonso, quien fundó la prestigiosa academia Ilusión Flamenca en Londres, explicó a EFE que el objetivo de su performance es "llamar la atención de los turistas y del mundo" sobre el dolor de los animales explotados cerca de los monumentos.
Su plan es presentarse vestida de flamenca para ejecutar un baile. "Mi intención es ir vestida de flamenca y bailar allí para que la gente se dé cuenta de lo que pasa", señaló. La acción será documentada en un vídeo, tanto en inglés como en español, para que los espectadores "piensen en el dolor de esos caballos y camellos".
La bailaora ha sido testigo directo de la situación, describiendo escenas "terroríficas" de animales exhaustos y deshidratados obligados a largas jornadas de trabajo bajo el sol para transportar visitantes. "Muchos mueren deshidratados y exhaustos. Es algo que no puedo mirar sin hacer nada", afirmó con convicción.
Alonso busca que su arte, reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, sirva como un altavoz contra la crueldad. Este no será un espectáculo comercial, sino un gesto individual de esperanza y protesta pacífica. "Bailo porque es lo que sé hacer, y es mi forma de gritar sin palabras", resumió.
SOLIDARIDAD TAMBIÉN EN ALEJANDRÍA
La protesta en Guiza será el preámbulo de otra actividad benéfica. El domingo 16 de noviembre, Día Internacional del Flamenco, Alonso ofrecerá una clase de castañuelas retransmitida en directo desde Alejandría.
La sesión se impartirá desde el refugio de perros que ella misma ha impulsado en la ciudad, y todos los fondos que se recauden se destinarán íntegramente al mantenimiento y cuidado de los animales acogidos. "Voy a enseñar castañuelas en directo desde el refugio y presentaré a los perros que viven allí. Les pondré flores o pañuelos de lunares, algo flamenco, o al menos lo intentaré...", comentó.
Este centro, con capacidad para cerca de cincuenta perros, nació tras una experiencia insatisfactoria con otra entidad, buscando un modelo de bienestar animal más transparente. Alonso continúa trabajando en su registro oficial y en la búsqueda de apoyos para ampliar la capacidad del refugio.
DOCENCIA, PREMIOS Y ACTIVISMO
Ángela Alonso compagina su compromiso solidario con su carrera docente, impartiendo clases de flamenco en Londres desde 1998. Su escuela, Ilusión Flamenca, ha sido galardonada con dos premios Lukas Awards a la mejor academia de flamenco en el Reino Unido.
A lo largo de su trayectoria, ha colaborado activamente con santuarios y protectoras de animales, como Jarjeer Mules en Marruecos y Takis Shelter en Creta. Durante la pandemia, organizó clases online con fines benéficos que permitieron enviar ayuda económica a diversas protectoras, incluso en su provincia natal de Almería.
"Yo no tengo grandes recursos, pero tengo arte y tengo voz. Si el flamenco sirve para aliviar el sufrimiento de un solo animal, ya habrá merecido la pena", concluyó. Desde Guiza hasta Alejandría, el compás de su taconeo busca ser un llamado global a la compasión. EFE
