.. |
PASEO ABAJO/Juan Torrijos
Hace años que no sigo las campanadas de nochevieja por la Tv. En la cueva de Tere y Antonio Manuel no hay televisión, y que siga así por muchos más, por lo que tuvo que ser un aparato de radio, ¡hermosa la radio! la que nos trajera el sonido de las campanadas a través de su altavoz. Quiere ello decir que no puedo hablar de la Pedroche y su vestido de cada año, muy lechero él, nos han comentado, y menos de la que nos ofreció la señora de la estampica. Es evidente que he visto la misma, ya que las redes, y hasta algunos medios de comunicación que no cobran mordidas del gobierno, nos han ofrecido la imagen de la señora portando la estampica de marras.
No creo que les extrañe a ustedes lo que hizo la susodicha, estamos acostumbrados desde hace unos años a que los medios públicos, esos que pagan todos los españoles, algunos de sus bien pagados contratados se dediquen a meterse con pasión con según qué religiones, o a defender, con la misma pasión, según qué ideologías. La estampica de la citada camarada era de esperar que apareciera, y si no era la estampica, seguro que habría aparecido alguna otra estulticia con la lógica idea de molestar a un sector de la sociedad española.
No creo que la estampica que sacó la señora, con su vaca de gran Prix, fuese una sorpresa sacada de la manga de la campanera —entiendo que su compañero sabía de esa estúpida campanada de media noche que nos iba a mostrar la alegre y hermosa señora que estaba a su lado—. Y si lo sabía el de los 28 millones, es de imaginar que la estampica había pasado por el despacho del nuevo director de la Rtve, y el hombre, es de imaginar que no se atrevió a dar la orden sin avisar a sus jefes, no lo veo tan valiente, por lo que hay que pensar que sobre la mesa de Pedro Sánchez estuvo la estampica de la vaca que iba a enseñar al mundo la campanuda presentadora de las campanadas del viejo año.
Qué pena me dan estos personajes, y no la campanera, ella solo es el medio por el que algunos personajes, tristes ellos, nos mandan sus mensajes. Luego los ves detrás de una procesión, o llevando a hombros el paso de la Virgen del Rosario de su pueblo, incluso con levita, vara de plata en la mano y marcando el paso detrás de la Macarena o la Virgen del Mar. La anécdota nos ha servido para abrir el año 2025, algunas voces dirán que se rasgan las vestiduras los católicos ante la ofensa, hará que las tertulias y comentarios hablen de la estampica, pero no creo que a los católicos les afecte la mofa de la Tv de Pedro Sánchez. ¿Quién es ese pobre Pedro Sánchez que gobierna España con presuntos delincuentes de todos los colores? Un pobre personaje del se puede esperar cualquier cosa. ¡Qué pena! Para lo que han quedado algunos que se llamaban socialistas, que encima se ríen ante la patochá de una señora y una estampica en la noche más vieja del año. Pobres.
No creo que les extrañe a ustedes lo que hizo la susodicha, estamos acostumbrados desde hace unos años a que los medios públicos, esos que pagan todos los españoles, algunos de sus bien pagados contratados se dediquen a meterse con pasión con según qué religiones, o a defender, con la misma pasión, según qué ideologías. La estampica de la citada camarada era de esperar que apareciera, y si no era la estampica, seguro que habría aparecido alguna otra estulticia con la lógica idea de molestar a un sector de la sociedad española.
No creo que la estampica que sacó la señora, con su vaca de gran Prix, fuese una sorpresa sacada de la manga de la campanera —entiendo que su compañero sabía de esa estúpida campanada de media noche que nos iba a mostrar la alegre y hermosa señora que estaba a su lado—. Y si lo sabía el de los 28 millones, es de imaginar que la estampica había pasado por el despacho del nuevo director de la Rtve, y el hombre, es de imaginar que no se atrevió a dar la orden sin avisar a sus jefes, no lo veo tan valiente, por lo que hay que pensar que sobre la mesa de Pedro Sánchez estuvo la estampica de la vaca que iba a enseñar al mundo la campanuda presentadora de las campanadas del viejo año.
Qué pena me dan estos personajes, y no la campanera, ella solo es el medio por el que algunos personajes, tristes ellos, nos mandan sus mensajes. Luego los ves detrás de una procesión, o llevando a hombros el paso de la Virgen del Rosario de su pueblo, incluso con levita, vara de plata en la mano y marcando el paso detrás de la Macarena o la Virgen del Mar. La anécdota nos ha servido para abrir el año 2025, algunas voces dirán que se rasgan las vestiduras los católicos ante la ofensa, hará que las tertulias y comentarios hablen de la estampica, pero no creo que a los católicos les afecte la mofa de la Tv de Pedro Sánchez. ¿Quién es ese pobre Pedro Sánchez que gobierna España con presuntos delincuentes de todos los colores? Un pobre personaje del se puede esperar cualquier cosa. ¡Qué pena! Para lo que han quedado algunos que se llamaban socialistas, que encima se ríen ante la patochá de una señora y una estampica en la noche más vieja del año. Pobres.