Sin inaugurar la mina de Arboleas año y medio después del accidente mortal

La excavación, de 2000 años de antigüedad, producía lapis specularis y será el centro de un futuro circuito minero-arqueológico



ALMERÍA HOY / 10·07·2024

Han pasado 20 meses desde que ocurrió el accidente que costó la vida a un trabajador de 46 años que participaba en las tareas finales de rehabilitación de la mina Limaria, excavada por los romanos y productora de lapis specularis, en Arboleas; un proyecto estrella para el municipio que, con 4.600 habitantes, de los que 3.000 son extranjeros, busca su espacio en el creciente mercado del turismo cultural.

El plan Consistorial contemplaba un futuro circuito de visitas arqueo-mineras, donde la mina ‘Limaria’ sería su principal reclamo, junto a otras que, al igual que ésta, fueron compradas en su momento por el Ayuntamiento.

Los trabajos autorizados a partir de 2016-2017 por la Delegación de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo en la mina de lapis specularis, o yeso selenítico, consistieron en la retirada de escombros y tierra, e investigar la morfología y la extensión de sus galerías, con la finalidad de “descubrir todo su potencial” y “ponerlo en contexto respecto a otros yacimientos de espejuelos del Imperio Romano que existen en Europa”, abriendo “la posibilidad de hacerla visitable para la ciudadanía”, señaló entonces el delegado del área Miguel Ángel Tortosa. El proyecto contó con un presupuesto de 250.000 euros.

La intervención en la mina, inscrita en esos años como Bien de Interés Cultural en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, la llevó a cabo la empresa Sadim Ingeniería, especializada en la explotación turística y museística del patrimonio minero. La actuación no sólo interesó a la vieja excavación, sino a todo el entorno.

Una vez realizado todo ese trabajo y con una pequeña partida municipal de 5.000 euros, se emprendió en 2022, “la limpieza del caminillo que va a la mina. Y dentro de la mina raspar las zonas de paso de la gente para que no tropezaran; lo que se llama alisar, porque el resto estaba hecho ya”, cuenta del exregidor Cristóbal García.

Sin embargo, algo ocurrió que provocó la caída de una gran piedra de dos toneladas sobre dos personas que trabajaban allí, en la misma entrada; una de ellas quedó medio sepultada, aunque con vida, y la otra falleció. El 17 de noviembre de 2022, comenta el exalcalde, “justo cuando habían concluido todos los trabajos de adecuación del espacio que se pretendía abrir como transitable, todo se fue al garete”, procediéndose al cierre de la mina y, con ello, congelando sine die las pretensiones del equipo de Gobierno.

Y es ahora, transcurridos veinte meses del suceso, cuando cabe preguntarse cuánto tiempo más habrá de pasar para que se sepa judicialmente sobre quién recaen responsabilidades, si es que las hay, y por qué aún no está abierta y puesta en valor la mina. Constan en las páginas webs del Ayuntamiento consultas de investigadores, espeleólogos, arqueólogos y curiosos en general, preguntando cuándo será posible visitar la espectacular explotación minera romana de Arboleas.

Nos hemos dirigido al Ayuntamiento y el actual alcalde, José Juan Ramos, no ha podido dar una respuesta precisa.

SOBRE EL LAPIS SPECULARIS

El espejuelo o yeso selenítico se explotaba durante los siglos I y II después de Cristo en Hispania y en otros puntos del Imperio Romano. La antigua Segóbriga -en Cuenca- concentraba el comercio de este mineral, que, además de en la zona de Almería capital, Arboleas o Sorbas, se extraía también en explotaciones de Toledo y otros enclaves de Hispania.

El interés de este material radicaba en su transparencia, así como en la facilidad que presenta para poder trabajarlo. Se utilizaba sobre todo para acristalar ventanas, acoplando varias láminas en armazones de madera o cerámica. También se usaba, una vez calcinado, para fabricar yeso o escayola para realizar molduras, vaciados y enyesados. En otras ocasiones se mezclaba triturado con la arena del Circo Máximo para que ésta brillase, realzando los espectáculos.