La Audiencia Provincial aprecia "falta de control y fiscalización del gasto en combustible" que suponen "meras irregularidades administrativas, no ilícitos penales"
ALMERÍA HOY / 08·07·2024
La Audiencia de Almería ha confirmado el archivo de la querella contra la exalcaldesa de Garrucha María López Cervantes (PSOE) por presuntos delitos de falsedad, contra la administración pública y malversación por el uso irregular de tarjetas de combustible.
En su día, un juzgado de Vera abrió diligencias previas contra la exregidora tras la denuncia presentada ante la Fiscalía por el concejal Álvaro Ramos, en la actualidad teniente de alcalde en el equipo de gobierno como socio del PP, motivo por el que fue expulsado de IU.
En dicha denuncia, el edil exponía una serie de presuntas irregularidades en el uso de las tarjetas de combustible asociadas a los vehículos de titularidad del consistorio garruchero, entre las que incluía "el repostaje excesivo de combustible" por facturar cantidades superiores a la capacidad de los depósitos de los vehículos asociados.
Como ejemplo, el edil señalaba que una barredora con un depósito de 40 litros tuvo asignada dos tarjetas en las que se facturaban repostajes que excedían dicha capacidad y también presentaba el caso de otro automóvil que presuntamente realizaba repostajes "en puntos geográficos lejanos sin justificación aparente".
En el auto, la Audiencia de Almería señala que "si bien se aprecia una falta de control y fiscalización de gastos, son meras irregularidades administrativas, no ilícitos penales". Los magistrados añaden que "el tiempo transcurrido hizo imposible identificar a las personas que usaron las tarjetas" por lo que "no se ha podido comprobar si fueron concejales o familiares de estos"
En su día, un juzgado de Vera abrió diligencias previas contra la exregidora tras la denuncia presentada ante la Fiscalía por el concejal Álvaro Ramos, en la actualidad teniente de alcalde en el equipo de gobierno como socio del PP, motivo por el que fue expulsado de IU.
En dicha denuncia, el edil exponía una serie de presuntas irregularidades en el uso de las tarjetas de combustible asociadas a los vehículos de titularidad del consistorio garruchero, entre las que incluía "el repostaje excesivo de combustible" por facturar cantidades superiores a la capacidad de los depósitos de los vehículos asociados.
Como ejemplo, el edil señalaba que una barredora con un depósito de 40 litros tuvo asignada dos tarjetas en las que se facturaban repostajes que excedían dicha capacidad y también presentaba el caso de otro automóvil que presuntamente realizaba repostajes "en puntos geográficos lejanos sin justificación aparente".
En el auto, la Audiencia de Almería señala que "si bien se aprecia una falta de control y fiscalización de gastos, son meras irregularidades administrativas, no ilícitos penales". Los magistrados añaden que "el tiempo transcurrido hizo imposible identificar a las personas que usaron las tarjetas" por lo que "no se ha podido comprobar si fueron concejales o familiares de estos"
