Un ataifor y un jarrito nazarí de Bayra, ‘Pieza del mes’ del Museo de Almería

Son un ejemplo del ajuar de mesa, del comercio y de la artesanía de la antigua Vera



ALMERÍA HOY / 19·06·2024

Las piezas ahora expuestas en el Museo de Almería proceden de la antigua ciudad de Bayra, situada en el Cerro del Espíritu Santo de Vera (Almería). Se localizaron en el interior de uno de los silos encontrados durante una excavación en una vivienda de la ladera este. El silo apareció intacto cubierto por una tapadera de piedra. Son un ejemplo del ajuar de mesa, del comercio y de la artesanía de Bayra del siglo XVI.

En la presentación de estas dos piezas, junto al delegado de Turismo, Juan José Alonso, han estado la directora del Museo, Tania Fábrega, el alcalde de Vera, Alfonso García y la investigadora Carmen Sánchez, quien ha elaborado el texto explicativo que se muestra junto a las piezas.

Los ataifores son platos típicos en al-Andalus, del período nazarí (ss. XIII-XV), solían tener grandes dimensiones y un uso colectivo. Este que se expone posee unas dimensiones reducidas, una cubierta blanca interior y decoración esquemática en negro, característicos de la última época del período nazarí y posiblemente, se trate de una producción norteafricana.

La segunda pieza, un pequeño jarrito-botecito, posee una cubierta vítrea que la impermeabiliza. Su acabado y tamaño nos permite suponer que contendría algún elemento líquido como aceite y la pasta interior permite reconocer una fabricación local.

Los ataifores, jofainas, platos, cuencos, escudillas, copas, jarritos y jarritas son elementos cerámicos que conforman la vajilla utilizada para servir alimentos, tanto sólidos como líquidos, durante la baja edad medieval. Muchos de estos recipientes tienen su origen en al-Andalus, mientras que otros provienen de territorios feudales. Sus trasformaciones, cambios y pervivencias reflejan la sociedad que las consumían, producían e intercambiaban.

La ciudad de Bayra, ocupada desde el siglo IX-XI hasta el siglo XVI, destacó por su ubicación estratégica al servir de frontera entre el territorio de Murcia y Granada. Fue destruida y abandonada el 9 de noviembre de 1518 cuando un gran terremoto la destruyó y obligó a su población a trasladarse a las faldas del cerro.

En 2021 comenzó un proyecto de investigación en el yacimiento arqueológico de Bayra, patrocinado por el Ayuntamiento de Vera y desarrollado por el Grupo de Investigación PRINMA de la Universidad de Granada. Las excavaciones arqueológicas han sacado a la luz parte de la alcazaba, murallas, torres, aljibes, calles y viviendas.

Además, está permitiendo conocer la alimentación, técnicas culinarias, agricultura, ganadería, actividades textiles, arquitectura, alfarería, comercio, estatus social, religión y costumbres de sus antiguos pobladores.

El final abrupto de la ciudad, 30 años después de la conquista castellana, ha permitido obtener una imagen fija de la sociedad que la habitó a inicios del siglo XVI, haciendo del yacimiento un referente en la arqueología bajomedieval. Durante la excavación de las viviendas destaca la localización de 9 silos. Los silos eran agujeros trabajados en el suelo y empleados como almacenes, principalmente de grano, que una vez abandonados podían ser empleados como basureros.

Precisamente en el interior de uno de esto silos se encontró una pequeña capa de tierra con restos de cerámica, desechos de comida (peces, huevos, cerdos o aves) útiles trabajados (de hueso, piedra y cerámica), elementos de metal (colgantes, monedas o alfileres) y vidrio (recipientes y brazaletes), entre los que estaban las “piezas del mes”.