Avance histórico para resolver el problema de los purines y generar ingresos

El Gobierno de Domingo Fernández ha conseguido más de un millón de euros para conjurar el mayor y más antiguo mal medioambiental de Huércal Overa y de la ganadería en general


El alcalde y el concejal Pedro García, en una de las múltiples balsas de purines de Huércal Overa.


ALMERÍA HOY / 05·05·2024

La ganadería porcina es uno de los motores de la economía de Huércal Overa y, al mismo tiempo, origen de su mayor problema medioambiental, enquistado desde hace décadas sin que nadie lo haya abordado: La gestión de los purines, es decir, los excrementos de los cerdos. Ahora, el Gobierno dirigido por Domingo Fernández ha conseguido 1,1 millones de la Junta de Andalucía para conjurar el problema. Los fondos provienen, concretamente del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (IFAPA), dependiente de la Consejería de Agricultura.

La idea comenzó a ponerse en marcha en junio de 2022. El regidor promovió la fundación de una asociación de afectados, reuniendo a la Agrupación de Defensa Sanitaria Ganadera de Huércal Overa (ADSG, cuya participación es indispensable, pues aglutina a los productores con la finalidad de elevar la calidad sanitaria de sus granjas), a técnicos municipales y locales, a la Cámara de Comercio y el propio Ayuntamiento. Se contó también con la colaboración de la Consejería de Agricultura, a través del IFAPA, y la Universidad de Almería.

El objetivo es paliar un inconveniente que en 2019 llegó a levantar a una parte de la población, que se manifestó a las puertas del Consistorio un día a la semana durante meses e, incluso, provocó modificaciones en el ordenamiento urbanístico municipal, ampliando la distancia de las granjas hasta 500 metros -entre ellas mismas y las viviendas- para mitigar sus efectos sobre las personas. No olvidemos que Huércal Overa alberga el mayor criadero de cerdos de capa blanca de Andalucía con 796.707 cabezas al año entre animales de cebo, lechones, cerdas y verracos.

1 HM3 DE EXCREMENTOS

El primer avance se conoció el pasado 2 de abril en Huércal Overa al anunciar la consejera de Agricultura, Carmen Crespo, que el IFAPA invertirá 1,1 millones en varias líneas de investigación para una mejor gestión del millón de metros cúbicos de purines que generan las explotaciones porcinas de la comarca y convertirlos en ingresos. De ese millón de m3 800.000 son producidos en Huércal Overa. Las conclusiones del estudio serán exportadas a otras zonas de Andalucía y España que comparten este problema.

Esta pretensión fue celebrada por el concejal de Pedanías, Pedro Carrasco, que está al frente del proyecto: “Es la mejor forma de acabar con el histórico problema de los purines que sufre el pueblo, al menos desde que tengo uso de razón, porque se puede resolver y generar ingresos”.

En la primera fase los investigadores del propio IFAPA y la Universidad de Almería serán los encargados de reunir datos y elaborar los estudios sobre muestras de excrementos porcinos recogidos periódicamente en cuatro granjas del municipio.

Las muestras se someterán a la acción de “distintos agentes biológicos para conocer la mejor manera de transformar los residuos en fertilizantes naturales dispuestos para la venta y en biogás, que podría ser tratado en una planta, pero también utilizado para cubrir las necesidades energéticas de calefacción de las propias granjas”, abunda el edil Pedro Carrasco.

BIOGAS PARA HUÉRCAL OVERA

Carrasco está convencido de haber encontrado la “herramienta definitiva” para solventar el “grave y difícil problema” creado por los residuos de la cabaña ganadera. “No es ninguna quimera -dice-. Ya existe una planta de biogás generado con purines en la localidad sevillana de El Arahal, y en Lorca han iniciado los trámites para establecer otra. En España hay muy pocas, pero en el Reino Unido e Irlanda existen muchas. La novedad consiste en que nosotros contaremos con una tecnología propia fruto de las investigaciones que llevaremos a cabo”.

La fase de estudio está en marcha y cuenta con un horizonte de dos años de trabajo. En 2026 se expondrán las conclusiones. Paralelamente, los propios investigadores explicarán el proyecto a los ganaderos a fin de “conseguir su colaboración para poner en marcha, de la manera más inmediata posible, la producción de fertilizantes y combustible. El sector está muy sensibilizado. Todos los empresarios consultados son conscientes de la necesidad de adaptarse a las nuevas normas europeas y este proyecto supone una gran ayuda. Ya nos han manifestado su voluntad de colaborar. Saben que la mejor manera de resolver un problema es convertirlo en un recurso capaz de generar ingresos”.

Si la experiencia concluye felizmente, Huércal Overa, y también la comarca, habrán eliminado un factor histórico de contaminación derivado de un potente sector en la zona, generador de un comercio anual por valor de casi 106 millones de euros, y otros municipios de Andalucía y España se beneficiarán de esta experiencia.