La exalcaldesa de Garrucha María López defiende su mandato. También niega haber incumplido las normas de contratación
ALMERÍA HOY / 14·04·2024
- ¿Qué opinión le merecen los informes económico y legal realizados sobre su último mandato?
- No he tenido acceso al documento y, por consiguiente, desconozco el contenido. Sólo sé lo que ha desvelado el teniente de alcalde en prensa. Para empezar, no es una auditoría, sino una revisión de los actos de gobierno realizada a instancias de parte, porque las auditorías únicamente pueden ser obra de funcionarios. En este caso, lo que vale es la liquidación de 2022 en la que todos los parámetros son positivos.
- El Gobierno no habla de auditoría, sino de un informe económico y un análisis de la legalidad que, entre otras cosas, señalan un gasto de personal que alcanza el 57% del presupuesto, ¿no le parece excesivo?
- No será tan descabellado cuando el PP lo ha asumido. Ellos hablan de un aumento durante el último mandato, pero es un dato sesgado. Es cierto que ha crecido la plantilla a lo largo de los años para ajustarla a una población que ha superado los 10.000 habitantes. Contar con más vecinos requiere mayor dotación en los servicios de limpieza, obras, administración… y lo hemos hecho por debajo de las necesidades. No me parece excesivo el aumento del capítulo de personal.
- Entonces ¿considera normal haberlo incrementado 2,3 millones en 4 años, hasta alcanzar los 5,66 millones y el 57% del Presupuesto, cuando Hacienda aconseja no superar el 30%?
- Pero es que la cifra no es cierta. Creo que el gasto de personal ronda el 48 % o el 49%.
- Aun así, ¿es normal que el gasto corriente y el de personal ocupen casi todo un presupuesto de 10 millones y apenas queden 90.000 euros para inversiones?
- El gasto corriente es muy importante. Abarca servicios esenciales, como la limpieza viaria, el cuidado de los jardines, la reparación de desperfectos en las calles... Todo ayuntamiento tiene que ofrecer esas prestaciones de la mejor manera posible dentro de sus posibilidades. El PP debe estar de acuerdo cuando ha reflejado en los presupuestos lo mismo que hacíamos nosotros.
- ¿No será que no pueden hacer otra cosa por la herencia recibida? Las personas que pasaron a ser funcionarios durante su mandato no se pueden despedir.
- La herencia son los datos que ellos aprobaron en el presupuesto de 2024: Un superávit 4,7 millones, remanente de 2,1, remanente para gastos generales de 1,6… El legado no ha sido nada malo en comparación al que recibimos los socialistas en 2015. Ahora hacen falta gestores que trabajen por el futuro de Garrucha pero, desgraciadamente, yo sólo veo gente que únicamente quiere perpetuarse en el poder e incrementar sus sueldos. Manejan un discurso contradictorio. Dicen que han heredado una ruina, que no será tan grave cuando no les impide contratar asesores e incrementar disparatadamente sus propios salarios.
- Usted habla de un superávit producto de la suma de dos préstamos por importe total de 6,9 millones y de haber ingresado otros 4 millones por la adjudicación de la gestión del agua durante 25 años, ¿no le parece una trampa contable?
- Cuando nos enfrentamos a una situación económica complicada, los gobernantes tenemos la obligación de usar todas las herramientas disponibles. Nos acogimos a las posibilidades ofrecidas por el Gobierno de España a los ayuntamientos con dificultades. Al mismo tiempo, emprendimos acciones para ingresar un dinero al que teníamos derecho por la gestión del agua, pero que no recibíamos. Galasa no reportó a Garrucha ni un céntimo en 30 años. Las dos acciones contribuyeron a mejorar la situación de las cuentas municipales. Por eso liquidamos 2022 con superávit. Los gobernantes estamos para eso.
- Para recibir esa ayuda excepcional usted se comprometió a aplicar un plan de ajuste, pero no lo aplicó, ¿por qué?
- Porque, entre otras cosas, suponía subir impuestos, como está haciendo el PP. Nosotros preferimos licitar la gestión del agua para mejorar la situación económica del Ayuntamiento. Valoramos todas las posibilidades a nuestro alcance e hicimos lo que consideramos mejor. Así, logramos un superávit de 4,7 millones en 2022. Con esas cifras no se entiende la subida del IBI y otros impuestos ni la política de austeridad a la que el Gobierno del Partido Popular y el tránsfuga está sometiendo a los vecinos. Son miserables con los garrucheros pero muy espléndidos a la hora de ponerse sueldos. Todo el mundo lo ve y les critica por la doble vara de medir.
- Le planteo otro asunto. El informe le acusa de no haber respetado las normas de contratación.
- Reitero mi desconocimiento de los términos de ese documento. Nosotros hemos procurado trabajar con empresas de Garrucha y la comarca, pero siempre en igualdad de condiciones. Nunca ha habido reparos ni informes de funcionarios contra nuestra gestión económica ni la forma de contratar. No lo haríamos tan mal cuando, en los meses que lleva en la Alcaldía, el PP lo está haciendo exactamente igual. Entiendo que, sin reparos de Secretaría e Intervención, es la manera normal de funcionamiento.
- No he tenido acceso al documento y, por consiguiente, desconozco el contenido. Sólo sé lo que ha desvelado el teniente de alcalde en prensa. Para empezar, no es una auditoría, sino una revisión de los actos de gobierno realizada a instancias de parte, porque las auditorías únicamente pueden ser obra de funcionarios. En este caso, lo que vale es la liquidación de 2022 en la que todos los parámetros son positivos.
- El Gobierno no habla de auditoría, sino de un informe económico y un análisis de la legalidad que, entre otras cosas, señalan un gasto de personal que alcanza el 57% del presupuesto, ¿no le parece excesivo?
- No será tan descabellado cuando el PP lo ha asumido. Ellos hablan de un aumento durante el último mandato, pero es un dato sesgado. Es cierto que ha crecido la plantilla a lo largo de los años para ajustarla a una población que ha superado los 10.000 habitantes. Contar con más vecinos requiere mayor dotación en los servicios de limpieza, obras, administración… y lo hemos hecho por debajo de las necesidades. No me parece excesivo el aumento del capítulo de personal.
- Entonces ¿considera normal haberlo incrementado 2,3 millones en 4 años, hasta alcanzar los 5,66 millones y el 57% del Presupuesto, cuando Hacienda aconseja no superar el 30%?
- Pero es que la cifra no es cierta. Creo que el gasto de personal ronda el 48 % o el 49%.
- Aun así, ¿es normal que el gasto corriente y el de personal ocupen casi todo un presupuesto de 10 millones y apenas queden 90.000 euros para inversiones?
- El gasto corriente es muy importante. Abarca servicios esenciales, como la limpieza viaria, el cuidado de los jardines, la reparación de desperfectos en las calles... Todo ayuntamiento tiene que ofrecer esas prestaciones de la mejor manera posible dentro de sus posibilidades. El PP debe estar de acuerdo cuando ha reflejado en los presupuestos lo mismo que hacíamos nosotros.
- ¿No será que no pueden hacer otra cosa por la herencia recibida? Las personas que pasaron a ser funcionarios durante su mandato no se pueden despedir.
- La herencia son los datos que ellos aprobaron en el presupuesto de 2024: Un superávit 4,7 millones, remanente de 2,1, remanente para gastos generales de 1,6… El legado no ha sido nada malo en comparación al que recibimos los socialistas en 2015. Ahora hacen falta gestores que trabajen por el futuro de Garrucha pero, desgraciadamente, yo sólo veo gente que únicamente quiere perpetuarse en el poder e incrementar sus sueldos. Manejan un discurso contradictorio. Dicen que han heredado una ruina, que no será tan grave cuando no les impide contratar asesores e incrementar disparatadamente sus propios salarios.
- Usted habla de un superávit producto de la suma de dos préstamos por importe total de 6,9 millones y de haber ingresado otros 4 millones por la adjudicación de la gestión del agua durante 25 años, ¿no le parece una trampa contable?
- Cuando nos enfrentamos a una situación económica complicada, los gobernantes tenemos la obligación de usar todas las herramientas disponibles. Nos acogimos a las posibilidades ofrecidas por el Gobierno de España a los ayuntamientos con dificultades. Al mismo tiempo, emprendimos acciones para ingresar un dinero al que teníamos derecho por la gestión del agua, pero que no recibíamos. Galasa no reportó a Garrucha ni un céntimo en 30 años. Las dos acciones contribuyeron a mejorar la situación de las cuentas municipales. Por eso liquidamos 2022 con superávit. Los gobernantes estamos para eso.
- Para recibir esa ayuda excepcional usted se comprometió a aplicar un plan de ajuste, pero no lo aplicó, ¿por qué?
- Porque, entre otras cosas, suponía subir impuestos, como está haciendo el PP. Nosotros preferimos licitar la gestión del agua para mejorar la situación económica del Ayuntamiento. Valoramos todas las posibilidades a nuestro alcance e hicimos lo que consideramos mejor. Así, logramos un superávit de 4,7 millones en 2022. Con esas cifras no se entiende la subida del IBI y otros impuestos ni la política de austeridad a la que el Gobierno del Partido Popular y el tránsfuga está sometiendo a los vecinos. Son miserables con los garrucheros pero muy espléndidos a la hora de ponerse sueldos. Todo el mundo lo ve y les critica por la doble vara de medir.
- Le planteo otro asunto. El informe le acusa de no haber respetado las normas de contratación.
- Reitero mi desconocimiento de los términos de ese documento. Nosotros hemos procurado trabajar con empresas de Garrucha y la comarca, pero siempre en igualdad de condiciones. Nunca ha habido reparos ni informes de funcionarios contra nuestra gestión económica ni la forma de contratar. No lo haríamos tan mal cuando, en los meses que lleva en la Alcaldía, el PP lo está haciendo exactamente igual. Entiendo que, sin reparos de Secretaría e Intervención, es la manera normal de funcionamiento.
