Los alumnos se enfrentan a la exclusión en los centros educativos cercanos
ALMERÍA HOY / 22·04·2024
Los residentes del barrio se han enfrentado durante años a la necesidad de escolarizar a sus hijos en centros educativos de otros barrios e incluso en colegios privados-concertados del centro de la ciudad, a sabiendas que, al elegir alguno de los dos centros del barrio como primera opción (CEIP Nueva Almería o CEIP Virgen de Loreto), sus hijos o hijas podrían ser desplazados a otros mucho más distantes, incluso pudiendo ser reubicados en el actual CEIP San Valentín, situado a casi 5 kilómetros del barrio.
Este año, más de 40 familias se han visto excluidas de los centros escogidos como primera opción (21 en el CEIP Nueva Almería y 20 en el CEIP Virgen de Loreto). Es por ello que, a través de los medios de que disponen, y con el respaldo de diversas organizaciones (entre las que se incluye USTEA), estas familias han llevado a cabo una serie de acciones, entre otras, recogida de firmas con la reivindicación de promover la creación de nuevas unidades en los centros del barrio para sus hijos, que iniciarán su andadura escolar el próximo curso.
Según fuentes contactadas de las familias afectadas, la Delegación Territorial de Educación plantea soluciones como la creación de nuevas unidades en centros de la zona de influencia o en otros barrios, lo que los vecinos consideran podría generar un "desbarajuste" en el día a día, y no creen que pueda ser una solución "estable ni definitiva".
Según el sindicato USTEA, “la solución óptima radica en la creación del nuevo centro educativo cuya demora en el tiempo hará que, una vez inaugurado en un futuro (esperemos que no muy lejano), sea insuficiente para las demandas de un barrio en constante crecimiento”.
Este año, más de 40 familias se han visto excluidas de los centros escogidos como primera opción (21 en el CEIP Nueva Almería y 20 en el CEIP Virgen de Loreto). Es por ello que, a través de los medios de que disponen, y con el respaldo de diversas organizaciones (entre las que se incluye USTEA), estas familias han llevado a cabo una serie de acciones, entre otras, recogida de firmas con la reivindicación de promover la creación de nuevas unidades en los centros del barrio para sus hijos, que iniciarán su andadura escolar el próximo curso.
Según fuentes contactadas de las familias afectadas, la Delegación Territorial de Educación plantea soluciones como la creación de nuevas unidades en centros de la zona de influencia o en otros barrios, lo que los vecinos consideran podría generar un "desbarajuste" en el día a día, y no creen que pueda ser una solución "estable ni definitiva".
Según el sindicato USTEA, “la solución óptima radica en la creación del nuevo centro educativo cuya demora en el tiempo hará que, una vez inaugurado en un futuro (esperemos que no muy lejano), sea insuficiente para las demandas de un barrio en constante crecimiento”.
