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PASEO ABAJO/Juan Torrijos
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Para ser un hombre con cara de no haber roto nunca un plato, para ser una persona de hablar suave, sin estridencias, acabó el año pasado con una sorpresa de cara al ciudadano. A los funcionarios que dependen de él les rebajó la paga de Navidad, pero él, el presidente de todos los andaluces, se ha subido el sueldo en torno a un 19 por ciento. Que no está nada mal en tiempos de contención económica.
El presidente ganaba poco, dicen sus asesores. Por esa regla, suban las jubilaciones a miles de pensionistas que lo tienen crudo para llegar a fin de mes, y si tienen que ayudar a sus hijos, como les ocurre a muchos de ellos, ya me dirán ustedes, señores asesores del dilecto presidente, cómo puñetas llegan al 30 sin tirarse de los pelos. Menos mal que la gran mayoría de los jubilatas andamos con poco pelo como para andar de tirones con el mismo.
Con la subida aprobada, dicen sus asesores (el presidente “bonito, bonito”, que tienen los andaluces) sigue cobrando menos que algunos de sus consejeros, alcaldes y alcaldesas de las muy nobles y caras ciudades andaluces. Y eso no se podía permitir. Y como ellos, los asesores y sus camaradas fieles a la hora de votarle en el gobierno o en el parlamento no estaban por permitirlo, subida del 19 por ciento. Y digo yo, y si en vez de subirle el sueldo al presidente no se lo rebajan a los que cobran más que él. No creen que sería más justo ante la situación que están pasando miles de familias de este país. Pues no. Los que cobran más, seguirán, y el de Juanma un 19 por ciento más.
Hablando de la subida de los emolumentos del señor presidente, y ante las comparaciones odiosas de las que han hablado asesores, votadores y aplaudidores, nos enteramos que doña María del Mar Vázquez Agüero, alcaldesa de la muy noble y cara ciudad de Almería cobra más que el propio presidente de la Junta de Andalucía tras la subida acordada. Vamos que se ha subido poco, dicen sus compinches. Que el hombre necesita cobrar más, mucho más, pero mucho más. Con música suena mejor. Inténtelo.
¡Qué alegría, María! ganas más que el propio Moreno Bonilla. Estarás contenta.
Ahora se entiende lo de la subida del Iba un 27 por ciento, y que estéis preparando una subida del recibo del agua, por ahora lo tenéis parado, os ha dado un poco de vergüenza, con los sueldos, ¿puedo decir sueldazos? que os gastáis en el ayuntamiento, y al cajón por unos meses. Pero lo sacaréis algún día, lo verán los ciudadanos, y nos daréis la alegría de subir el recibo, con la excusa, eso sí, de que Almería necesita ese dinero para seguir en la senda del triunfo, del avance del soterramiento y de una ciudad cada vez mejor.
No os creemos, que lo sepáis, pero tenéis el poder en vuestras manos y nada podremos hacer ante vuestra voracidad a la hora de subir impuestos, tasas o recibos. ¿Y para qué? Para que sigáis disfrutando de vuestros sueldos, para que deis subvenciones a vuestros amigos, compréis a los enemigos y llenéis las carteras y bolsillos de compañeros. El personal se está cansando de la cara de cemento “armao” que tienen sus señorías.
El presidente ganaba poco, dicen sus asesores. Por esa regla, suban las jubilaciones a miles de pensionistas que lo tienen crudo para llegar a fin de mes, y si tienen que ayudar a sus hijos, como les ocurre a muchos de ellos, ya me dirán ustedes, señores asesores del dilecto presidente, cómo puñetas llegan al 30 sin tirarse de los pelos. Menos mal que la gran mayoría de los jubilatas andamos con poco pelo como para andar de tirones con el mismo.
Con la subida aprobada, dicen sus asesores (el presidente “bonito, bonito”, que tienen los andaluces) sigue cobrando menos que algunos de sus consejeros, alcaldes y alcaldesas de las muy nobles y caras ciudades andaluces. Y eso no se podía permitir. Y como ellos, los asesores y sus camaradas fieles a la hora de votarle en el gobierno o en el parlamento no estaban por permitirlo, subida del 19 por ciento. Y digo yo, y si en vez de subirle el sueldo al presidente no se lo rebajan a los que cobran más que él. No creen que sería más justo ante la situación que están pasando miles de familias de este país. Pues no. Los que cobran más, seguirán, y el de Juanma un 19 por ciento más.
Hablando de la subida de los emolumentos del señor presidente, y ante las comparaciones odiosas de las que han hablado asesores, votadores y aplaudidores, nos enteramos que doña María del Mar Vázquez Agüero, alcaldesa de la muy noble y cara ciudad de Almería cobra más que el propio presidente de la Junta de Andalucía tras la subida acordada. Vamos que se ha subido poco, dicen sus compinches. Que el hombre necesita cobrar más, mucho más, pero mucho más. Con música suena mejor. Inténtelo.
¡Qué alegría, María! ganas más que el propio Moreno Bonilla. Estarás contenta.
Ahora se entiende lo de la subida del Iba un 27 por ciento, y que estéis preparando una subida del recibo del agua, por ahora lo tenéis parado, os ha dado un poco de vergüenza, con los sueldos, ¿puedo decir sueldazos? que os gastáis en el ayuntamiento, y al cajón por unos meses. Pero lo sacaréis algún día, lo verán los ciudadanos, y nos daréis la alegría de subir el recibo, con la excusa, eso sí, de que Almería necesita ese dinero para seguir en la senda del triunfo, del avance del soterramiento y de una ciudad cada vez mejor.
No os creemos, que lo sepáis, pero tenéis el poder en vuestras manos y nada podremos hacer ante vuestra voracidad a la hora de subir impuestos, tasas o recibos. ¿Y para qué? Para que sigáis disfrutando de vuestros sueldos, para que deis subvenciones a vuestros amigos, compréis a los enemigos y llenéis las carteras y bolsillos de compañeros. El personal se está cansando de la cara de cemento “armao” que tienen sus señorías.
